The Shadow (Daryl Dixon)

Sanctuary

El camino en la RV es silencioso y me muerdo el labio para no romper en llanto otra vez.

Negan me ha hecho entrar a la fuerza junto a sus secuaces, y lo último que vi de Daryl fue cuando lo arrastraron lejos de mí.

La impotencia y la culpa que sentía en estos momentos era indescriptible, ¿acaso nunca acabaría esta pesadilla?

Acaricio mi vientre ya abultado con cariño, lo menos que necesitaba era traspasarle todo este mal al bebé.

Siento la mirada de mi captor ir y venir hacia mí, pero no quiero mirarlo, la sola idea de verle me repugnaba.

-Jefe, aquí Dwight-se escuchó la voz de mi amigo por la radio que Negan solía traer con él.

Mi estómago pareció revolverse por un instante y un atisbo de alivio me recorrió el cuerpo, mi amigo estaba vivo.

-Adelante, D. Te escucho-vociferó Negan.

-Tendremos que salir un momento de la caravana para re abastecer de combustible la camioneta...-dice este.

Negan se pasa una mano por la barbilla y mira un segundo por el retrovisor, quizás asegurándose de que estén ahí.

-Vale, 5 minutos. Nada más-avisa y termina la transmisión.

El ambiente vuelve a ser silencioso y tenso, pienso en las mis y una formas en las que podría escapar pero ninguna parece fiable.

¿Y si me aventaba por la puerta? ¿Podría servir?

Bufo.

«No, claro que no» pienso recordando al bebé y en que podría pasarle algo.

-¡P*ta madre, mira cómo ha crecido! Ya se nota, ¿cuánto tiene? ¿2?-dice Negan sacando una mano del volante y con claras intenciones de acercarla a mi vientre.

Lo impido poniendo mi mano justo en donde él planeaba tocar.

Automáticamente él voltea a ver enfadado, su ceño se frunce al punto de formar líneas entremedio.

-Pronto 6 meses de hecho-le contestó seca.

Él retira su mano lentamente y justamente cuando creo que no hará ni dirá nada, golpea con fuerza el manubrio provocando que me sobresalte.

-¡Me tiene hasta los cojones esa miradita tuya de inferioridad que has adquirido!-grita-¡4 meses buscándote y lo único que veo es que le copiaste las malas mañas a ese alexandrino con síndrome de Robin Hood!

Bajo la mirada y me muerdo la lengua para no decir algo que empeore más las cosas.

Al cabo de unos segundos el silencio vuelve, pero esta vez lo siento más reconfortante que escuchar la voz de Negan.

"4 meses buscándote", esa frase se repite en mi mente. Ciertamente había durado más de lo que pensé escapando de Negan.

Lo miro de reojo unos segundos, no me había puesto a analizar en lo demacrado que se ve desde la última vez que compartimos una mirada en el santuario. Su perfil luce cansado y enojado, tiene una barba descuidada que lo hace ver avejentado y puedo atisbar unas prominentes bolsas bajo sus ojos.

Nada parecido a cuando lo conocí.

*flashback*

Termino de maquillarme y bajo hasta la cocina para poner unos bocados en la mesa.

-¿Cuál crees que se me verá mejor? ¿Este ó este?-chilla Lucille corriendo escaleras abajo mientras en sus manos trae dos vestidos de cóctel, el primero es uno de color verde claro con un escote v y ajustado al cuerpo, el segundo es uno gris con detalles de encaje en la falda y unos pequeños brillos en el pecho.