El Próximo Alfa -Sterek-

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“¿Como puedes salir con alguien que no podrá caminar nunca?"

“Porque estoy enamorado de él y no necesito que camine para hacerlo..”

Stiles río divertido cuando Derek comenzó a quejarse, se encontraban en el patio de la escuela, Derek tenía diez y Stiles siete, ese día la maestra estaba en la dirección, así que Stiles quiso salir a jugar al patio, pero no quería jugar solo, al final nadie quería salir a jugar con el, salió solo al patio, donde se encontraba otro niño, Stiles podía asegurar que era el niño más bonito que había visto en su vida, cabello negro azabache, cuerpo delgado, ojos verdes, moreno, era lo que Stiles consideraba alguien hermoso. El niño bonito estaba en una silla de ruedas, claro que Stiles no tenía idea de que se trataba por lo que se imagino que sería como un carrito.

Sin perder más tiempo Stiles se acercó.

—¡Hola! ¿Eres nuevo? Eres muy bonito. —Derek giró con su silla, un chico muy extraño le estaba hablando, el chico era muy muy blanco, tenia muchos puntitos en su cara, Derek se preguntaba que serían, era pequeño y tenia unos grandes ojos cafés ¿Porque alguien le hablaría a el? El niño era muy bonito, Derek se sonrojó al darse cuenta de sus pensamientos.

—Soy Derek, tu también eres muy bonito. —Derek se tapó la boca ante lo que había dicho, Stiles sonrió de oreja a oreja.

—¿Que es eso?—Stiles curioso pregunto, apuntando la silla de ruedas, Derek miro donde estaba y entonces recordó.

“¡Arruinaste la familia Derek! Te odio!” Su madre le había dicho.

“¡Mi novio me termino por tener un hermano tan patético y estúpido, ¡Te odio!” Le había dicho su hermana.

“¡No tendré un hijo inútil!" Dijo su padre cuando se fue de casa.

Los pequeños ojos de Derek se cristalizaron cuando recordó como su familia le había abandonado, por lo que ahora estaba en un orfanato, un orfanato donde llevaba desde los cuatro años, nadie le había querido adoptar desde entonces.

—¡No llores!—Derek se sorprendió por el inmenso grito, creyó que nuevamente su nuevo amigo le abandonaría. —¡Tus bonitos ojitos van a arruinarse!

Esa vez fue la primera vez que alguien se había quedado a jugar con el porque quería, era la primera vez que alguien le había dicho lo bonito que era, era la primera vez que alguien le había paseado hasta hacerlo reír, era la primera vez que alguien no le abandonaba. Era la primera vez que tenía un amigo.