COME BACK ( +15) || 2da Temporada de DL || EN EDICIÓN

Capítulo 2

Al día siguiente, Adrien se levantó como de costumbre, despertando a Nino para que ambos se vistieran y estuvieran listos para ir a sus trabajos. Como siempre, Nino salió primero despidiéndose de su amigo y le dijo que le vería hasta en la noche. Después, el rubio salió cerrando con llave el departamento.

Al llegar al ascensor, dio un suspiro de molestia al ver que tenía que compartir ese breve viaje con su vecina Mónica, una mujer que se veía mayor que él, guapa, pero no quería nada con ella, aunque siempre insistiese.

Parecía que el universo conspiraba en su contra, ahora que se mantenía distante con las chicas y buscaba mantener su vida en la tranquilidad, sentía que atraía a muchas más mujeres que cuando era Chat Noir, e incluso ellas se le insinuaban descaradamente.

Absolutamente todas menos una... Todas menos la que anhelaba con toda su alma.

— Hola Adri... — saludó la pelirroja mientras se colocaba labial.

— Buenos días.— Saludo seco entrando al elevador.

— ¿Ya pensaste en mi propuesta?— en cuanto se cerraron las puertas, ella oprimió un botón para que el ascensor no pudiese avanzar.

— Sí, y como siempre te diré que no.— la vio como se colocaba frente a él.

— Por favor, ¿No te gustaría experimentar un poco?— se mordió el labio inferior y comenzó a pasar sus manos por su torso.

Por Dios, díganme que no me veía igual... ¿Acaso Ladybug se sentiría así? Si la vuelvo a ver voy a disculparme hasta de rodillas...

— Eres muy amable, pero no.— retiro las manos de su cuerpo sin ser grosero.

— Creí que no tenías novia.

— Eh... no, no tengo.— dijo un tanto desanimado.

— ¿Entonces?— se le iba acercando listo para besarlo.

— Es que... yo... ¡Soy gay!

Ella se apartó de repente.—¿Q-qué? ¿Entonces tú y Nino...?

— ¡No, no! Nino no es gay pero... eh... yo sí... Sí, soy gay, super gay.— Dijo asintiendo con la cabeza y apartándola un poco. Después apretó el mismo botón y el ascensor se movió, y esta vez, para suerte del rubio, todo el trayecto fue en silencio.

En cuanto las puertas se abrieron, ella casi salió volando de ahí, lo cual le causo mucha gracia al muchacho.

— Gracias.— dijo la chica de aquella mesa entregándole una servilleta para después morderse el dedo provocativamente, a lo cual hizo caso omiso. Como siempre.

— Gracias a usted.— dijo Adrien con una sonrisa. Se fue con la bandeja llena de trastes sucios hacia la cocina, donde después tomo un trapo y un bote con jabón, acercándose al mostrador, y comenzar a limpiarlo, no antes de tirar la servilleta en el cesto de basura.

— Vaya día.— Dijo cansado Jim mientras se sentaba en la silla que estaba tras el mostrador.— ¿Qué es esto?— Se agachó al ver una servilleta con labial en la basura.— ¿Otro número, Agreste?

— Mesa cinco, la chica de la izquierda.— Dijo sin dejar de limpiar.

Jim se asomó y asintió con aprobación.— Bastante guapa, ¿Me dejarías...?— preguntó para poder quedarse con el número.

— ¿Qué no tienes novia?— pregunto con gracia el chico de ojos verdes.

— Sí, bueno...— Volvió a dejar el número en el cesto.— Demonios, detesto que seas tan buen chico. Seguro por eso las traes locas, por lo ñoño que eres.— Adrien se echó a reír, más por la ironía que solo él conocía que había detrás.— Aunque de todas formas no soy capaz de engañarla. La quiero demasiado.— El rubio le miro sonriente antes de proseguir con su tarea.— ¿Pero tú que me dices, Agreste? Según Mari no tienes novia, pero tampoco dejas que todas tus locas y sexys fans se acerquen a ti. ¿O esa no es tu orientación sexual, acaso?