Finding love ~ Angela

Capítulo 7

El silencio mantenía una situación tensa. Nadie decía nada.

Mi mente repetía una y otra vez...

Soy idiota, nunca antes había caído tan bajo ante esa trampa tan básica. Mi estupidez está avanzando.

— Vaya, vaya, vaya... — dijo uno de los tipos de manera cortante para dejar el suspenso en el aire— Hasta que tengo el honor de conocer a la famosa Ángela Becher.

Yo no respondí, sólo mantuve mi mirada seria y cortante en ese momento.

— ¿Qué? No me digas que el vernos te dejo muda... ¿o acaso te comió la lengua el ratón?

Un gruñido salió de mi boca.

— Ahora eres perro— después de eso todos comenzaron a reír en carcajadas.

Los Benedicts seguían callados por lo que supuse que su paciencia también se les estaba acabando.

— Oh, vamos, no sean aguafiestas y rían con nosotros.

Me adelanté a contestar— nunca perdería mi dignidad riendome ante algo tan patético.

— Vaya, hasta que la princesita habla— mencionó uno de ellos.

— Quería evitar gastar saliva en unos ineptos— sonreí de manera escalofriante.

Aquel comentario fue claro que no les dio gracia.

— Estas gastando nuestra paciencia niña. Nosotros sólo queríamos ser buenas personas y atrasar su aniquilamiento.

— Uy, que miedo.

— Ya verás lo que es tener miedo.— sonrió orgulloso.

El que ríe al último ríe mejor.

Un disparo se escuchó, me dí cuenta que Yves intentó que está explotará antes de que lo tocará, pero esto no fue el resultado y la bala siguió su curso...

— YVES!!! — el grito ahogado de Phoenix alteró a todos.

— Oh, lo siento, olvidé mencionar que sus dones están bloqueados?— mencionó el descarado que había disparado. Me recordó la típica voz de un niño que hizo una broma "por error"

Mi cuerpo reaccionó sólo... fue todo tan lento. Empuje a Yves antes de que la bala lo tocará y al yo estar cerca un escudo de ramas comenzaron a crecer.

— Pues no del todo— dije casi en murmullo.

Mi don era más poderoso que aquella barrera que me impusieron, sin embargo, el luchar con el don de los escudos hacía que gastará más rápido mi energía, así que tenía que cuidarme. Mantuve las ramas hasta que la bala dejará de moverse, ese fue el instante en que comencé a quitar mi ramas y, al final sólo se escuchó como la bala tocaba el suelo y rebotaba un poco un su "tin, tin, tin".

Todos miraron sorprendidos lo que hice. Eso era un punto a mi favor.

— Sorprendente "Darkness"... Quisiera ver tú siguiente movimiento.

Mi sangre comenzó arder, esa voz me recordaba lo inútil que había actuado... pero no podía mostrarme débil en esa situación.

El líder sonrió. — Tal y como dijo nuestro mensajero... eres alguien poderoso.

—Mensajero?— dijo James.

— Oh, alguien que te a tenido en la mira desde hace mucho.

—Cuéntame de él— dije

—Lo lamentó, pero prefiere estar en contacto contigo en un tiempo.— lo dijo con tanto sarcasmo que me dieron ganas de golpear su cara para borrarle esa sonrisa asquerosa— Pero ya basta de tanto parloteo; comencemos con lo interesante.— al instante, de su mano saco una bola de nieve.

Xav rió — No me digas, ¿vamos a hacer muñecos de nieve? O ¿vamos a hacer ángeles en la nieve?

— No, vamos a hacer una batalla con bolas de nieve... y hielo— respondió el líder y comenzó a atacar.

Nosotros estábamos en desventaja por el hecho de que todos, es excepción de mí, tenían bloqueados sus dones. Pero a pesar de eso, lo Benedicts no parecían intimidados o miedosos; sólo estaban preocupados por sus almas gemelas, y como no estarlo, en el mundo savant tener un alma gemela es lo mejor del mundo... Un pensamiento abrumo mi mente ¿Los Benedicts no se sentirán inseguros en momentos como estos? Por lo que sabía, la familia Benedict trabajaba (de alguna manera) para la policía y la mayor parte del tiempo vivían en situaciones como está ¿Acaso ya estaban acostumbrados? ¿Será de su agrado? No lo sabía.

Mi corazón estaba acelerado... esa era otra señal de mi sobreproteccion. En ese momento yo era la única que estaba "completa"... la única que estaba segura ¿Porqué no utilizar eso para protegerlos?... en pocas palabras, tenía la necesidad de convertirme en...

"Guardia Real de los Benedicts"

— Interesante título. Ya no serás "Darkness" si no"G.R Benedicts"

—SAL DE MI CABEZA!!!— exclamé furiosa. Cuando estoy molesta, me agrada pelear.

Perfecta combinación. Pensé mientras sonreía de manera malévola.

Él comenzó a atacar con una daga de hielo, de inmediato mi escudo de ramas lo atrapó.

La pelea al fin empezó.

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Todos estaban acelerados, hasta ahora lo que iban ganando (por desgracia) eran los del otro bando, pero no era algo de sorpresa, ellos tenían mejor protección que nosotros. Mientras más pasaba el tiempo más difícil se me hacía seguir luchando y los Benedicts estaban totalmente agotados, hasta el momento teníamos a dos heridos. Uriel y El sr. Benedict, Saúl.

Las almas gemelas sabían que sin su complemento su vida podría convertirse en una desgracia... Todos los sabíamos...

Xavier le dio un puñetaso a uno pero fue respondido con un ataque de su don. Lo dejo paralizado mientras que un dolor insufrible recorría su cuerpo. Crystal quería correr a ayudarlo pero un tipo la tomó del brazo y la avento al suelo.

En un cerrar y abrir de ojos me encontré con todos los Benedicts y a sus almas gemelas en el suelo. Habíamos perdido.

Sentí un golpe en el pecho, el don que tenía aquella persona era la del viento... sólo me empujó y caí al suelo. Yo tampoco soportaría mucho más.

Un par de risas burlonas se escucharon frente a mi. Que ridículo.

— Vaya, que interesante batalla algo aburrida pero interesante. Ahora, usted señorita Becher nos acompañará con nuestro líder o mataremos a sus amigos. Usted elige.

Talle mi nariz, quitando la sangre que salía de está, el uso excesivo de mi don hacía que mi cuerpo se desgastará a tal punto que mi temperatura subía mi nariz sangraba y mis ojos lagrimearan.

Esta punto de contestar cuando...

-¡¡¿Y todo este viento?!! -exclamó un enemigo, subí mi mirada y entonces sentí un gran alivio, era un yet que conocía perfectamente.

Mire a James y Elia, ellos también lo habían reconocido.

Brad...