El neko que cambio mi vida (Editando)

Capitulo 6: conociéndonos mejor

Transcurrió una hora desde que mi tío se retiro dejándome a este malhumorado, que no me dirigía la palabra, se encontraba en el sillón mirándome seriamente. Debo de admitir que es un rubio muy lindo, se ve muy tierno con su apariencia gatuna.

-¿Que tanto me miras? hum.

-Lo mismo debería preguntarte

-Te miro porque quie....-detiene su hablar y toca su estomago-

-¿Qué te pasa? -pregunto preocupado pero no responde- ¿Te duele algo? -solo niega- Mmm entonces ¿tienes hambre? -Tampoco responde, solo me observa, me levanto en busca del teléfono- ¿Que quieres cenar?

-En ningún momento dije que tenía hambre.

-Tu mirada te delata, Nekito -mierda olvide que no le gusta que lo llamen así- dime que es lo que quieres, yo aun no ceno.

-Pide lo que sea hm -responde molesto.

Marco al Dilevery que se encuentra cerca de mi departamento, encargo comida rápida, luego de terminar la llamada mi dirijo a mi habitación para acomodar un poco el desorden. espero no le moleste compartir la cama. Al rato alguien llama a la puerta, pago por la cena y lo llevo a la cocina.

-¿Te vas a quedar mirando o quieres comer? -se levanta del sofá y se acerca a la cocina- toma, espero te guste -coloco frente a él un plato que contenía una hamburguesa y papas fritas.

-Gracias -dicho esto empezó a comer rápido-

-Come con calma o te ahogaras -agarro un vaso y le sirvo agua- toma.

Deidara toma el vaso y bebe el contenido en un solo trago para luego continuar comiendo, ya se había terminado las papas y la mitad de su hamburguesa. Yo recién iba por la mitad de las papas.

-¿Acaso no comes en semanas? Jajaja -pregunto en joda para acabar con este ambiente silencioso.

-Exacto hm, establecí una huelga de hambre para que no me traigan contigo pero perdí -termina su ultimo trozo de hamburguesa-estuvo riquísimo, gracias hm.

Lavo los platos mientras que el rubio fue a recorrer mi departamento, al terminar nos dirigimos a mi habitación, me costó convencerlo para que duerma conmigo pero al final lo logre. Al día siguiente los rayos del sol que provenían de una ventana me hizo despertar y note que estaba solo en la cama, me levante muy confundido en busca de él, lo encontré en la cocina preparando café.

-Buenos días hm -me sonríe.

-Buenos días Nekito, veo que estas de humor eh -sentándome, note que algo estaba raro en el.

-¡Te eh dicho que mi nombre es Deidara! -me grita- grábatelo bien, imbécil -coloca, frente a mi, la taza de café volcando un poco su contenido.

-No te enojes hermoso -dando un sorbo al café- espero no le hayas puesto veneno.

-Ojala se me hubiera ocurrido antes hm -susurra.

-¡Te escuche! -suspiro- en un rato iremos de compras.

- ¿Es necesario que valla? Hm.

-Obvio, si te vas a quedar conmigo necesito comprar todo lo que necesitaras o ¿piensas vestir lo mismo siempre?

En la calle note que la mayoría de los hombres miraban, a Deidara, con lujuria y no perdían el tiempo con hacerle gestos obscenos, los cuales el ignoraba. La verdad que este rubio es muy hermoso y mas con esos ojos que tiene, también ese hermoso cabello.....aparte es muy sexy dan ganas de......

-interrumpe mis pensamientos- Itachi ¿falta mucho para llegar?.

-Un poco, mientras cuéntame cómo fue que conociste a mi tío.

-Madara-san me rescato de un viejo, llamado Orochimaru, que quiso abusar de mi hm.

-<<quien no querría abusar de ti, Dei>>

Al llegar, tomo su mano y lo conduje dentro del shopping. Al parecer Deidara nunca había conocido un lugar como este, ya que al entrar se sorprendió mucho, o eso note en su expresión, estaba muy emocionado mirando todo. Parecía un hermoso niño que por primera vez conoce una juguetería, mierda, ahora me siento como un pedófilo.

-Elije todo lo que quieras.

- agarraste una campera, que al parecer te gusto mucho, pero al ver el precio de la prenda lo pusiste en su lugar- No puedo creer que una simple campera cueste tanto hm.

-No te preocupes por el costo, si lo quieres, tómalo.

-Vallamos a otro lugar hm, aquí está todo carísimo.

-Repito, eso no importa hazme caso, ve y elije todo lo que quieras que yo pagare.

-Tu ganas, pero algún día te lo devolveré, aunque creo que me tomara una eternidad devolvértelo todo hm -viendo las prendas.

-Dei, eso no es necesario.

-No me contradigas, veré como -agarra de mi camisa y acercando sus labios a los míos juntándolos para empezar un beso corto, al terminar me susurra- Aparte también le puedo pagar de otra forma hm-dicho esto se aleja.