ACEPTACIÓN

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Paso el tiempo rápidamente desde aquel día que Foxy fue encontrado por el chico de pelos turquesa.

Ocho días en que el ambiente tenso entre ellos permanecía; había sido una semana agotadora para el pobre Bon, por mas que lo intentaba no podía socializar con el mayor y al parecer el pelirrojo desconfiaba demasiado en el y a cada pregunta que el menor le hacia, Foxy respondía cortante y abecés le gritaba un <<¡cállate!>>.

Pero no solo para él, Fox también lo había pasado mal, le dolía el cuerpo y de vez en cuando le daba una fuerte fiebre.

Por mas que Bon insistía en llevarlo a un hospital el otro se negaba dándole mas trabajo a un muy cansado peli-turquesa.

(. . .)

Hoy amaneció como de costumbre, Bon dormía tranquilamente hasta que el sonido de una guitarra eléctrica de su tema favorito junto a una vibración lo despertó.

—¿hola? habla Bon _dijo con sueño.

—Buenos días Bon dormilón.

—¿Joy? Oh, como estas_ respondió frotándose los ojos. 

—bien Bon, hey dime ¿hoy vendrás a la H.S.?

—¿hoy es? Ah sí ¿por qué?_ tambaleaba aún en la cama, apoyando su mano en el mentón , dando un bostezo y parpadeando un par de veces. 

—solo me preguntaba, faltas mucho y nos tenias preocupadas, si pasa algo. . .tú eres importante para nosotras, lo sabes.

—sí, lose, gracias chicas. 

—que bueno, entonces te esperamos._ dijo feliz. 

—si, ya voy en un momento. _dijo mas animado.

—nos vemos Bon _y colgó la llamada. 

El oji-verde se paró para buscar ropa y cambiarse a toda prisa, haciendo bastante ruido despertando al pelirrojo que estaba en otra habitación.

Foxy entro de repente alterando a Bon mientras se encontraba en ropa interior, tapándose rápido con su camisa.

—¡Hey! ya deja dormir al prójimo. . .

—¡como te atreves a entrar así!_ Bon enrojecía poco a poco. 

—No~ _Foxy dio una leve sonrisa. _¿en serio usas bóxer de conejitos?

—¡no me mires!_ gritó muy avergonzado, poniéndose sus pantalones.

—no lo puedo creer _Fox no dejaba de mirarlo burlón.

—estaban de oferta, además eso no importa. _suspiro mientras insertaba los últimos botones de su camisa con sus típicas mangas en sus brazos. —ya me voy a. . .  hay comida en la cocina por si quieres, adiós.

El pelirrojo puso un rostro mas serio,  no respondió ni siquiera se movió,  solo con la mirada siguió a Bon que paso por su lado yéndose.

(. . .)

Después de lo sucedido en la mañana,  el pequeño ya se encontraba en el instituto, al parecer llegó tarde y tenia exámenes finales, era como si la suerte hubiera decidido darse unas vacaciones.

 CORAZON FRÍO (Reescribiendo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora