De todos ¿¡Porque tu!?

Cap 1

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Ayy, como odio que me inviten a estas cosas. Pero ya nada, todo por mis amigos.

¡Maldita sea! Me retracto por completo, no quiero ir, mas bien, no queria venir. No entiendo el porque me invitan si no soy nadie en la escuela como para que me esten invitando a estas tonteras. Solo llevo aqui 20 minutos y ya no soporto la gente, ni la bulla y lo peor es que no me van a venir a ver hasta las 3 de la mañana, hora en la que se acabe esta mierda.¡¡¡¡Y no tengo el dinero para pedir un jodido TAXI!!!! Bueno, ya que estoy aqui, voy a tratar de disfrutarlo.

Y ahora voy con mis amigos, Santaana, Camilo, Cris y Finn, que estaban en la esquina de la casa en la que estabamos. Me acerque a ellos con cara de que malditos que me invitaron.

-Hhhhhooolllllaaaaaaaa- me dijo Santanna, arrastrando las palabras, claramente borracha... Eh aqui Satanas pasada de tragos.

-Ya se que se emborracho, pero como diablos paso- les dije a las tres personas frente a mi.

-Verasssssss, primerooooo tteeniaaa doossss copiiiittas, aahhoorrraa mmulltipliclas llaas dosss copiiitas pooorrr cinccoo copoitas, lloo que noosss daaa... Uunnass cuaantasss copiiitaasss- dijo, tratando explicar como termino asi, no lo logro. Al ver mi cara Camilo se puso a explicarme lo que realmente paso.

-Haber, primero, vio un whysky mezclado con vodka, el cual penso que era una Sprite Zero, porque no trajo sus lentes. Luego, ya estaba un poco mas ebria, pero vio que pasaban unos Mojitos y con la vista borrosa y sin lentes, cogio pensando que era limonada.- Para este no me sorprendia, con lo terca que es- Para colmo, vio a un tipo con barba y le fue gritando "¡Capitan Barbosa, deme el tesoro!" que el tesoro era obviamente una botella de ron, que se la tomo entera- Concluyo, dios me imagino como debio haber sido eso- Tengo video, por si quieres- me lo dijo.

-Luego nos lo pasas- dijo La Crisis (así le decimos a Cris) que por cierto no me habia dado cuenta de que habia aparecido repentinamente.- Hay que llevar a Satán lejos de aqui, puede pasar algo malo- nos dijo con cara de miedo, conociendo a nuestra querida Satán, se va a meter en problemas si no la perdemos de vista- Y hablando de ella...¿Donde esta?- pregunto.

-Por mil demonios, ya desaparecio- dijo Finn, y todos empezamos a buscarla con la mirada, la tipa no aparecia, la perdimos.- Tenemos que buscarla- sigio hablando, pero fue demasiado tarde, ahi llegaba ella, con unos de esos vasitos rojos clasicos de las fiestas, gritando.

-¡¡¡Oigan!! Los tipppooosss de alllaaa vannnn aaa jjjuggarr aa la booottellla, yyy ussstedeees viiennen pporrqquee ssooommos lllooosss uultimooos- nos dijo, mas borracha que antes- Dddeeennada, denada- nos dijo, mientras que nos guiaba a donde estaban los mas populares de la escuela, Tomás, Esteban, Jhonn, Amelie, Natalia, Diego, Andre, Camila y Michelle. Maldita sea.
-¿Juegan?-Nos propuso Tomás. Con esa maldita sonrisa que convence a todos. Y yo, como no quería mas bullyng, dije que si.
-Claro, que es lo peor que podría pasar- acepté, mientras me sentaba en un hueco que había.
-Lo siento, solo había espacio para uno mas- nos dijo Natalia, con una voz irritante y chillona a la vez.

- No importa, pero ¿Nos podemos quedar a ver?- dijo Cris con un tono tierno, clásico de ella. Note como Esteban la quedo viendo con una cara de fascinación tremenda, parecía que se le caía la baba. Ya entiendo porque Natalia no la dejo jugar.
- Claro, claro- dijo rápidamente Esteban- Ven sientate- le señalo un espacio libre que acababa de hacer, empujando a Natalia a un lado.
-Bueno empezemos- dijo Andre a lo que giraba la botella y le señalaba a Amelie y Cris vivió a girar la botella ( ella estaba de jueza ) y le toco a Jhonn, algo que siempre vemos, ellos se besaron y listo, la botella volvió a moverse y le señalo a Diego y a Camila, que ella le vio con es varita pervertida de los emojis y se besaron. Así pasaron cinco parejas más, en las que a mi no me tocó, no se como pero no. Otra vez la botella giró y me apuntó a mi, la suerte me fallo esta vez, espero que sea suave, osea, nada significativo. Giro otra vez y apunto a alguien que no me esperaba, levanté la vista y ahí estaba Tomás, tan sorprendido como yo. Ya se lo que significa. Si esto fuera un Anime yo ya estaría gritando avergonzado con toda la cara roja.
- Que esperan chicos, o se ahuevan y les toca los 7 minutos de alegría en el armario- Nos dijo Michelle. De hecho yo prefiero los 7 minutos de alegría, a besarme con este, pero ese es el juego. Yo ya iba a decir lo que prefería pero siento que me levantan del suelo, me toman de la cintura y veo como su rostro se acerca al mío, mas de lo que me gustaría, o quizá no. En tan solo unos segundos, eternos para mi. En los que senti como sus labios se pegaron a los míos. No era del todo desagradable, de hecho, me pregunto si había tomado algo, porque hasta donde yo percibia, sabia a chicle de fresa con manzana... Me gustaba. Él beso no duro demasiado, pero si fueron mas de tres segundos, estoy seguro. Fue cálido, no sentí esas clásicas mariposas traviesas de los libros románticas, lo que yo sentía era un maldito zoológico de dinosaurios en todo mi cuerpos. No era feo, no me molestaba, era simplemente, lo mas extraño que había sentido.

P.O.V Tomás

Vi como la botella giraba y le apuntaba a Martín, que se quedo viéndola por unos segundos, hasta que volvió a girar, apuntándome a mi. No jodas. Me tocaba besar al chico al que he hecho bullyng desde casi cada día de cuando llegó. No me molestaba, solo, se me hacía raro. Note que el no se movía, quedó petrificado viendo la botella y de un segundo a otro ya estaba viéndome a mi con las mejillas teñidas de un suave rojo. Como no se movia, tuve que tomar la iniciativa, así que me pare, fui hasta su puesto y no me di cuenta de lo nervioso que estaba hasta que lo tome de la cintura. No lo había visto, pero tiene una cintura muy, pero muy pequeña, me gusta. Lo levante del suelo, y wow, si que es liviano, no fue un problema. El me miro con unos ojos que a mi parecer enormes y hermosos, eran de un color miel, profundo y se veía un brillo especial en ellos. Yo no dude en acercarme, por mas nervioso y tembloroso que este. Observé sus labios, eran delgados y de un color rosado muy suave, pero muy notable. Me gustaría verlo sonreír, debe ser hermoso. Me acerqué lentamente a el, yo no me mandaba. Sentí sus labios, suaves, y dulces. Tenían sabor a algodón de azúcar. Duro demasiado poco, me habría gustado mas. ¿Ustedes han visto como esta una chica después de su primer beso? Yo no, pero estoy seguro que así es como se vería. Me emocioné, no sabia porque, sólo me sentía alegre. Su rostro lo decía todo, estaba brillando, no quería soltarlo, estaba muy cómodo como estábamos, pero recordé que alrededor estaban mis amigos y mi posible novia, viéndonos. Me lo habría llevado a un sitio mas seguro, pero una voz me interrumpió.
Pero cualquier cosa, ese beso, me encanto y quisiera repetirlo. Dudo olvidarlo, mas bien, ni quiero olvidarlo.

P.O.V MARTÍN

Seguíamos los dos dentro de la burbuja, pero cierta personita tenía que abrir la boca.
-¡¡¡DAME MI VASO!!!,¡¡¡¡NO TOQUES MI VASO!!!! ¡¡¡¡SUELTA MI VASO!!!!- grito Satanás, que vio como Andre accidentalmente le quitaba el vaso en donde estaba tomando- ¡¡¡¡DAMELO!!!- Volvió a gritar, pero esta vez, le empezó a golpear. Yo me acomodé en mi puesto y vi como el guardia de la casa se la llevó arrastrando y como nosotros nos encargamos de llevarla a casa, pues nos toco irnos también.
- Bueno, gracias por la invitación. Pero tenemos que irnos, nos toca llevarla, ella no conducirá sola- dijo Fin mirando seriamente a Estaban, que estaba abrazado a la Crisis.
- Ay es verdad, no podemos dejarla- dijo parándose, Esteban detrás de ella. - Adiós chico!- se despidió, con ese mismo tono tierno e inocente.- Nos vemos el lunes, que la pasen bien- termino mientras salia de la casa, seguida por mi y un coro de despedidas.
Estaba saliendo de la casa y volteo a ver que nadie se quede, pero me tope con esos ojos café chocolate que me robaron el aliento, hace unos momentos atrás. Mantuve mi mirada fija en él, y su mirada en mi. Yo juro que me sonroje, y vi un pequeño rubor en sus mejillas. Sacudí mi mano, en forma de despedida y el me dio una sonrisa, de esas que te llegan hasta el alma...