Magic Pet. |L.S| (EN PROCESO DE EDICIÓN)

Capítulo 11

Capítulo 11. 

 Louis alcanzó a sentir el largo escalofrío que recorrió su columna vertebral, sin saber como reaccionar. Su padre lo sabía todo. Sabía que había estado engañándolos durante años y ahora sufrirían las consecuencias. Estaban jodidos.  

—No sé a que se refiere, señor— contestó firmemente Eleanor con rapidez, sin mostrar ni un atisbo de duda. 

Richard simplemente se puso de pie sin decir nada, dándole una última calada a su cigarrillo y dejándolo en el cenicero. Luego, dio un gran trago al whisky que había estado sosteniendo, y les dio a todos la espalda para comenzar a pasear alrededor de la oficina. 

—Te conozco desde siempre, Louis— comenzó después de un rato— conozco todo sobre ti, lo quieras creer o no. Sé lo obstinado que puedes llegar a ser, cuanto defiendes tus ideales una vez que se te meten a la cabeza, y cuanto defiendes tu homosexualidad. 

Louis tragó saliva con un ruido sordo, apretando aún más el agarre que tenía sobre el durmiente Harry.       

—¿En serio creías que me tragaría eso de que se te había quitado lo gay de un día para otro, que habías conocido a una chica de la que te enamoraste, y que ahora adoptaron un híbrido de la nada? Por favor, la única persona lo suficientemente estúpida para creerse eso es tu madre. 

—S-señor...

—Ahora no, Eleanor, no quiero escuchar tus pobres excusas. No has respondido mis preguntas, ¿Cuánto te paga? ¿También te paga para que tengas sexo con él y así se le quite lo marica? 

—Es suficiente, Richard—espetó Louis sintiendo su sangre hervir ante ese tipo de comentarios— lo que haga o no con mi vida no es tu problema.

—No lo es, es cierto, y tampoco de tu madre— Replicó éste a su vez con una pequeña sonrisa de autosuficiencia— Sin embargo, quieres seguir teniendo nuestro dinero, ¿no? Sacrificio por sacrificio. 

Louis se reclinó contra el asiento y contuvo el aliento, preparándose para lo que sea que quisiera su padre. 

—Bien, ¿que quieres a cambio? 

—Veamos... Para empezar, quiero que realmente te cases con Eleanor, si vas a seguir mintiendo lo harás bien. Los papeles del híbrido los tendré temporalmente yo, para asegurarme de que no hagas una estupidez. Quiero que renuncies a tu parte correspondiente del negocio familiar que pensabas tener en el futuro. Y quiero un nieto legítimo. 

El ojiazul no supo si reír debido a lo estúpido que era eso o gritar por lo que le estaba pidiendo. No veía problema en casarse realmente con Eleanor, ambos acordaron que lo harían y se divorciarían tiempo después para que así no hubiera más problemas. Podría renunciar al negocio familiar, no quería tener nada que ver con su familia después de que terminara la universidad y se pudiera conseguir un buen trabajo. Podría conseguirse un trabajo desde ese momento, pero la universidad en la que estaba le exigía demasiado tiempo de su día, y no podía pagar todo lo concerniente al departamento y además pagarle a Eleanor (a pesar de que ella ya le había dejado en claro que no importaba si le pagaba o no); además, ahora tenía como responsabilidad un ser humano más, era demasiado dinero. 

Aunque dejarle los papeles de Harry, ni loco.  

—¿Y que pasa si no lo hago? 

—Para comenzar, dejaré de pagarte la universidad—Comenzó Richard con una mirada brillosa— también tu departamento y todo el dinero que te doy. Por cierto, ¿Sabes quienes manejan la tienda en donde obtuviste al híbrido, Magic Pet? 

Louis no supo que contestar, expectante a lo que sea que su padre tenía que decir. El ya mencionado se acercó a la computadora que tenía ahí y comenzó a teclear algunas cosas.