Azul Celeste|Terminada|

Capítulo-47

Habían pasado dos meses desde que Alonso se había mudado al departamento de Jos. Todo estaba de maravilla y a pesar de que el pelinegro no se encontraba mucho en casa por cuestiones laborales, el rubio la pasaba bien con Fernanda y su novio.

Los tres habían formado una linda amistad, el rubio conocía más al novio de la chica que el propio hermano.

-¿Qué peli han elegido?- dijo Mau entrando al departamento. Habían hecho tradición que los Miércoles era noche de películas.

-Aún nada amor, leíamos títulos.

-¿Alguna sugerencia?

-Se me antoja una cómica.

Alonso preparó palomitas en lo que Fer apagaba las luces de la sala. Cuando regresó dejó el bowl sobre la mesita y tomó asiento.

Entre risas y palomitas la película ya había llegado a la mitad, de pronto un ruido algo molestoso comenzó a escucharse.

-Oohh- se quejaron Fernanda y Mauricio.

-Ay ya, ya- Era el móvil de Alonso, estaba recibiendo una llamada- es tu hermano- dijo antes de contestar el telefono.

-¡Cuelga o me visto!- gritó el novio de Fer.

-Shhh- lo calló Alonso mientras caminaba a la cocina.

-¿Con quién estás?

-Solo es Mauricio amor, vino a ver películas como TODOS los miércoles- hizo énfasis en "todos" resaltando el hecho de que muchas veces se lo había mencionado.

-Oh es verdad.

-Pero dime ¿a qué debo tu llamada?

-¿Qué? ¿no puedo llamar a mi hermoso novio para invitarlo a cenar?

-¿A cenar? ¿Hoy?- Alonso se encontraba emocionado, no era habitual que Jos tuviese tiempo entre semana.

-Quería, pero estás con Fer y Mau mejor vamos otro día.

-¿Estás de broma? Casi no estás en casa entre semana y menos tienes tiempo de salir en estos días, no voy a desaprovechar la oportunidad de ir a cenar contigo.

-¿Pero y mi hermana?

-Por ella no te preocupes, sé que entenderá.

-Entonces paso por ti en media hora.

-Hasta entonces amor- le mandó un beso tronado antes de colgar y volver a la sala- Oye Fer...- abrió los ojos como platos- Dios Fernanda consigue una habitación- la pareja se encontraba besándose de una forma muy pasional.

-Lo siento- dijo sonrojada- ¿qué dijo mi hermano?

-¡Me invitó a cenar!

-¿José te invitó a salir hoy?- preguntó el chico.

-Sí, sé que es raro pero amo que tenga un espacio para mí hoy- el rubio no dejaba de sonreír.

-¿Y la peli?

-Después de lo que acabo de ver, creo que estará bien sin mi, cuñis.

Alonso se encontró listo 5 minutos antes de que Jos llegara, se despidió de Fernanda y bajó a esperar al pelinegro.
Dió un par de vueltas en la recepción del edificio, salió para verificar que Jos no hubiese llegado aún y luego tomó asiento en una pequeña silla que estaba a un lado de las escaleras. Habían pasado 15 minutos y Jos no llegaba, volvió a ponerse de pie y salió a ver si veía el auto de Jos a lo lejos, entró dispuesto a subir al departamento de nuevo cuando el sonido del claxon lo puso alerta, giró y vio aquel auto azul oscuro.

-Por fin llegas- dijo entrando al auto.

-Lo siento cielo, al final se me complicó un poco.

-Sí, ya no importa.

-No te enojes Alon.

-No estoy enojado, pero pudiste avisarme.

-Lo lamento, no pensé tardar tanto.

-Ya, olvídalo y vámonos.

Su cena no había sido lo que ellos esperaban, la reservación que había hecho Jos se perdió, fueron a un par de restaurantes más pero todos estaban al límite de su capacidad por lo que terminaron cenando en una pequeña taquería del centro de la ciudad.

-Definitivamente esto no es lo que tenía planeado.

-Si hubieses llegado temprano.

-¿Alonso vas a seguir con eso?

-Tienes razón, te dije que lo olvidaras. Pero no es tan malo, los tacos están ricos.

-Sí Alonso, pero no fue esto lo que planee.

-¿Por qué te enoja tanto? Lo que importa es que estamos juntos.

-Sé que lo que importa es que tu y yo estamos juntos, pero... tenía algo importante que decirte o más bien proponerte.

-¿Qué cosa?

-Es algo importante, no quiero hacerlo en un puesto de tacos.

-Dilo- el chico estaba impaciente.

-No Alonso, es algo que podría cambiar nuestras vidas no voy a decirlo así como así y menos en un puesto de tacos.

-Por favor Jos, dilo ya!

-Ok, ok- dio un sorbo a su bebida- esto es algo que podría cambiar nuestras vidas, dejaríamos muchas cosas atrás- con cada palabra que salía de la boca del pelinegro el rubio se emocionaba más- después de analizar bien la situación...- hizo una pausa- creo que sería bueno abrir una nueva sucursal del restaurante en el interior del país- la sonrisa de Alonso había desaparecido.

××××××××××❤××××××××××

Hola pequeñas personitas bellas!!!!

Estamos en la recta final de esta historia
💔
Sólo tres partes más (2capítulos y el epílogo) y esto tendrá un final.

Estén pendientes, porque

Hoy subiré el capítulo 48.
Mañana podrán leer el 49
Y finalmente el Lunes 25 podrán disfrutar el epílogo.

Espero les guste el desenlace😌❤

Les mando
muchos besos😘😘😘