Capitulo 26: Entrenamiento Intenso

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"¡Octano explosivo!"

En el bosque, un crujiente rugido sonó.

Una sombra ágil, saltaba flexiblemente en estos bosques y a pesar de que el bosque estaba densamente cubierto de espinas, éstos no le obstruían en lo absoluto.

En el siguiente instante, la sombra se detuvo inesperadamente ante un árbol de 0,5 metros de alto, y con la mitad del cuerpo inclinado, dio un golpe contra el árbol con su hombro.

"¡Bang!" Se oyó cómo la madera se astillaba. Grietas delgadas y oscuras aparecieron en el punto de impacto extendiéndose a lo largo de todo el árbol.

«* Crunch *...» El árbol tenía un enorme agujero ocasionado por el golpe que dio con el codo, emitiendo un crujido antes de caer ruidosamente al suelo un momento después.

En el momento en que el gran árbol cayó, la sombra ágil, rápidamente tomó unos cuantos pasos hacia atrás con tanta fuerza como un mono y flotando ligeramente a una piedra de color verde.

Viendo los resultados de sus esfuerzos, el delicado rostro de Xiao Yan, mostró una sonrisa. En los últimos tres meses, esta fue la primera vez en la que él había tenido éxito en el uso del "Octano Explosivo", una alta habilidad de Xuan. Este Octano Explosivo que podría rivalizar con la técnica Dou Di no dejó decepcionado a Xiao Yan; con el Duan Qi 6 de Xiao Yan, ¡él podría competir por la destrucción de una persona en Duan Qi 8!

......

Entre más se eleven los niveles del Duan Qi, más difícil es para uno elevar su Duan Qi. Pero desde la subasta, Xiao Yan fue a un entrenamiento intensivo por 3 meses y sólo unos días antes de hacer su Duan Qi, saltó del Duan Qi 5 al Duan Qi 6.

Para obtener un Duan Qi en 3 meses, -aunque esta velocidad es más lenta, comparada con los dos meses necesarios para llegar a Duan Qi 5-, Xiao Yan estaba muy satisfecho. Antes, cuando él entrenaba, tardó todo un año y medio para ir de Duan Qi 5 al Duan Qi 6. La velocidad actual es terrorífica.

......

Después de haber utilizado el Octano Explosivo, el cuerpo de Xiao Yan parecía una esponja a la cual le acababan de exprimir su agua. Un dolor intolerable fue corroyendo sus nervios mientras que las venas en sus brazos latían visiblemente. Estos fueron los signos del agotamiento extremo...

Lamiendo sus labios, Xiao Yan luchaba para girar su cabeza y ver su codo derecho. Lo que entró en su visión fue un codo carmesí...

"Tss..." Una esquina de su boca se entreabrió mientras hacia una respiración profunda, diciendo con una sonrisa amarga: "No es de extrañar que tuve que soportar esas duras palizas. De no ser así, en vez de haber roto el árbol, me habría roto mi brazo. La habilidad del Octano Explosivo, es más o menos, una comparación de quién tiene el cuerpo más fuerte."

Todo su cuerpo reposaba en una piedra helada, la respiración agitada de Xiao Yan poco a poco se calmó; sin embargo, el cuerpo adolorido de Xiao Yan provocó que ni siquiera quisiese mover sus dedos.

Con el Duan Qi 6 de Xiao Yan, podría utilizar, como mucho, el Octano Explosivo una vez y después de usarlo, su energía estaría completamente agotada hasta mucho más tarde.

Xiao Yan echó hacia atrás su cabeza, entrecerró los ojos y miró perezosamente las nubes flotantes en el cielo azul. Una ligera brisa pasó, soplando un mechón de su cabello negro el cual se agitaba contra su frente.

Viendo a través de su cuerpo, mientras Xiao Yan descansaba, estaban los Elixires de Fundación que él había absorbido durante los últimos meses, y ahora estaban en el trabajo: reparando su tejido muscular y células a la máxima velocidad, trayéndole así, nueva energía a Xiao Yan.

"Maestro, ¿por cuánto tiempo necesito seguir practicando para poder lograr el Duan Qi 7?" Con sus ojos cerrados, Xiao Yan le susurró de pronto.

Su objetivo era alcanzar el séptimo rango y así adquirir la calificación para entrar al Salón Dou Qi del Clan de Xiao, donde podría encontrar métodos de Qi para practicar. Aunque, en este punto, ésos métodos de Qi están en un nivel demasiado bajo para él, él debe adquirir estas calificaciones porque está relacionado con el rostro de su padre.

Un viento frío sopló cuando el cuerpo transparente de Yao Lao apareció por encima de la enorme piedra.

Con una feliz expresión en su rostro, miró al joven, Lao Yao tomó primero nota del gran árbol. Luego asintió, y le dijo con una sonrisa: "La velocidad de tu entrenamiento está más allá de mis expectativas. Originalmente creía que incluso con la ayuda del elixir, necesitarías un año más antes de entrar en el Duan Qi 7... o ¿acaso se debe a que te han suprimido demasiado duro antes, y ya no te puedes echar para atrás? Mirando este avance, dentro de 2 meses, sin duda, podrás entrar al 7 º rango del Dou Qi.

Escuchando esto, los labios de Xiao Yan se elevaron*, terminando en una sonrisa débil. Después de estos 3 años, durante los cuales él fue ridiculizado sin cesar por su clan, él realmente quería saber, qué tipo de expresión mostrarían cuando ellos viesen su fuerza. Ese día, cuando hablaba con Nalan Yanran en la sala principal, ¿acaso esas palabras no se aplicarían a ellos también?

"¡Yo, Xiao Yan, pude crear un milagro hace 3 años, y tres años después, todavía puedo seguirlo haciendo!" Su visión brillaba un poco,mientras pensaba acerca del medio año antes, como él había sido burlado en la sala principal; sin embargo, a pesar de que su silueta era solitaria, ésta era inflexible y persistente.

Nalan Yanran, paso a paso te estoy alcanzando, ¡espérame! Nos reuniremos en la Facción de Misty Clouds en 3 años.

Rápidamente, la comisura de su boca se fue frunciendo de a poco, los jóvenes saltaron en cuanto él levantó su cabeza para rugir al cielo distante.

Viendo a su joven rugir, Yao Lao le sonrió, pero no le detuvo: la gente necesita presionada para madurar. El actual Xiao Yan tiene suficiente talento, ¡pero lo que él necesita es presión para expulsarlo! La decisión de Nalan Yanran fue la mejor presión posible.

"¡Déjala ser tu trampolín. En el camino a ser respetado, aún tienes una gran distancia antes de llegar al final!"

"¡Anda, enfoquémonos de nuevo en practicar!"

Rugiendo varias veces, la sonrisa de Xian Yao se volvió más grande. Tan pronto saltó de la roca, agitó su mano a Yao Lao, antes de descender de la montaña, aun sonriente.


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