La niña Loan

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-¿Entonces tu hija tiene sindrome de paranoia?-Dijo Dana mientras trataba de cambiar el tema de Paige y Lincoln.

-Si, la verdad es que es un poco triste verla asi, que sus unicos amigos sean solo su familia.
En vez de socializar y ver el mundo, estar siempre en casa arreglando todo sin tomar nada de aire fresco.-Dijo Lincoln mientras agachaba la mirada.

-Pero, debe, haber una razon por la cual esta asi, ¿no?

-Hay muchas razones. Demasiadas.
Su madre, la primaria, la secundaria, su primer noviazgo.
Todas ellas la transformaron en lo que piensan que es Loan Loud, realmente me da miedo pensar que es lo que hará cuando yo muera.
Tiene que estar dependiente de alguien, sino, no le gustara jamas estar con otras personas.

-¿Podrias contarme...como sucedio en su primaria?-Dijo Dana mientras se acercaba a el recostando su cabeza en el hombro del muchacho, generando una leve risa por parte de Lincoln.

-Todo sucedio cuando ella tenia 8.
No estaba como ahora, era una niña inteligente, educada, amable.
Rayos, era casi el corazon de la familia.

-o-

-¡Hola a todos!-Exclamo la niña alegre Loan Loud, causando que toda la clase se alegrara de verla.

-¡Hola niña nueva!-Dijeron todos al unísono causando una alegra sonrisa por parte de la niña.

Lincoln veía por la ventana a su pequeña socializando, la causaba gracia toda esa socializacion, ni el pudo hacer tantos amigos cuando era niño.
Solamente le hecho un ultimo vistazo a su hija y se retiro a la salida en direccion a su auto.

-Muy bien Lincoln. Loan en la escuela, ahora Liena, ¿Lista para tu primer dia de escuela?-Dijo Lincoln dandose la vuelta mirando a los asientos de atras, quedando sorprendido que no habia nadie-
¿Liena? ¡Liena!-Miro a todos lados y no la encontraba, el panico empezo a dominarlo, salio del auto buscando a su hija desesperado, reviso por varios lugares de la escuela, afuera de toda la escuela, regreso al auto casi llorando pensando que habia perdido a su niña.
Entonces, sintio un suspiro, miro otra vez al asiento trasero y pudo ver a su hija durmiendo en el lugar debajo de los asientos.
Lincoln solo sonreia aliviado y volvio al auto, encendio el auto y fue directo a la escuela de Liena.

Al dejar a su hija en la escuela, se fue al trabajo esperando que sus hijas pasaran un buen dia.

-Vamos niña nueva, ¿no quieres tu conejito de vuelta?-Decia un chico esbelto quien su flequillo le tapaba la vista hacia sus ojos.

-P-por favor. ¡Devuelvemelo!-Suplicaba Loan mientras intentaba alcanzar su conejo de peluche, era su peluche favorito desde que su padre se lo dio.

-¿Lo quieres? ¡Ve por el!-Dijo el bravucon mientras lanzaba lejos al peluche, cayendo justo en unos arbustos espinosos.

Loan se planteaba si ir a por su peluche, fue entonces que su bravucon la tomo del brazo y la empezo a acercar hacia los arbustos.
Luego de eso lanzo a la niña hacia adentro, donde varias espinas empezaron a picar los brazos, manos, cara y piernas de la joven.

-A-ah, d-duele~-Loan empezo a sollozar lentamente mientras veía a su bravucon sonreír, este se alejo sin avisar a nadie que estaba ahi atrapada.
Loan trato de llorar y captar la atencion de alguien, pero luego de 10 minutos nadie la escuchaba, el receso empezaba a terminar y tenia que regresar a su aula.

-D-debo, salir...de a-aqui.-En la mente de Loan se repetía la palabra "ignoralo", el dolor era tan fuerte que ignorarlo no era una opcion.
La sangre empezaba a recorrer sus brazos y piernas, las lagrimas limpiaban la sangre de su rostro.
Pudo visualizar a su peluche, estiro el brazo intentando agarrarlo, cuando hizo esto una espina empezo a entrar mucho mas adentro de ella. Solo se mordia el labio soportando el dolor, tomo el peluche y se apresuro para tratar de salir de aquellos arbustos.
Volvio a su aula llorando con su peluche en mano, tenia parte de la ropa desecha y varias espinas aun clavadas en las partes de su cuerpo, pero la niña lloraba mas porque la pata de su peluche se habia desprendido de este.

Loan Loud - (The Loud House)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora