Sociopata.

Indispuesta-Octubre 30

Un sombra me cubrió, vestía formal.

-¿Estas bien?- su voz era masculina

Se agachó y pude ver su cara, era el chico al que había atendido la otra vez, el notó que lo analizaba. Me sonrió, yo me limpie las lágrimas con las mangas de mi sudadera. Quiero que se valla y no volver a verlo, me siento estúpida.

-Se que tienes vergüenza- dice mientras me quita las manos de la cara. 

*Se burla de ti*

-Gracias pero ya puedes irte- digo indiferente

Odio que me vean cuando lloro, muestra debilidad. El sonríe

-No me iré hasta ver que estas bien- dice con una sonrisa

Ok, esto ya no es ayuda ciudadana, este chico quiere algo.

*Otro a tu lista de admiradores, otro que quiere cuidarte*

Ay no. No necesito amor, ¿Por que cupido no lo entiende?

-Estoy bien ya puedes retirarte- Sonrió para tranquilizarlo- Además, tu debes de tener asuntos importantes-

-Los tengo, bueno- Me entrega una tarjeta personal ¿Quien carajos hoy en día carga de esas?- Ten mi tarjeta, llámame por si me necesitas-

¿Esta coqueteando conmigo? Que arrogante, no lo necesito ni al ni a nadie. Ya lo he demostrado.

Asiento con la cabeza y el se va en su Ferrari, parece el típico niño rico que sus papis le buscan trabajo. Probablemente es un inútil de la vida. Regreso al departamento con el alma en el bote de la basura, me siento avergonzada.

***

Quiero dormir, lo necesito, necesito relajarme, hago una lista mental de lo que ha pasado.

1Conosco al hijo de mi jefe, el cual acaba enamorándose de mi, hemos pasado mucho junto y creo que también lo aprecio

*No lo aprecias, lo quieres*

¡NO!

2Tuve una pelea con una maldita rubia

3Mate a una persona, y lo peor, lo disfrute

4Encuentro a mi padre, que de seguro esta buscandome, hablando con un rubio no natural

5Me topo con un pillo arrogante que cree poder ayudarme

Me recuesto en mi cama ya es tarde, caigo en sueño.

***

<Abro los ojos a una alternativa diferente ¿Donde estoy? Miro a amigo alrededor, todo es blanco, y hay un sillón terciopelo y una ,mesa caoba que carga un pastel de chocolate, me levanto y me mareo, siento como si no hubiese comido en días, se me antoja mucho el pastel de chocolate no dudo en ir por el a devorarlo, su sabor me es conocido pero no recuerdo de donde. Sigo comiendolo, me encanta el chocolate. Empiezo a marearme mas, sigo comiendo mas, ya me he llenado pero no puedo parar. Tengo nauseas y vómito. Sigo comiendo, ¡YA! no paro. El pastel parece interminable. Vuelvo a querer vomitar, vomito pero esta vez no vomito el pastel, ahora vomito sangre. Tengo miedo, pero no paro de comer estoy llena de chocolate. El aire comienza a irse, se me cierra la garganta y noto que mis órganos se destrozan internamente. El pastel estaba envenenado. Moriré, pero de una forma dolorosa. Sigo comiendo pastel.>

Despierto bañada en sudor y lágrimas ¿Que he estado soñando que me hace estar así? ¿Es algo relacionado con mis padres? Agradezco no recordar el sueño, parece algo muy malo. Los pajaros cantan, Alguien toca la puerta y yo hago un puchero, ¿Ahora que quieren? Es Wendy, había olvidado que andariamos de compras

-Hola- digo al abrir la puerta

-¿Que ha pasado?- dice ella molesta, ¿Como sabe ella que estoy mal?

-Nada- digo tratando de parecer indiferente

No lo consigo

-Tienes los ojos hinchados-

-He tenido un mal sueño-

-Oh- dice y me abraza- Ven, vamos a comprar.

Caminamos por la avenida Statel, la tienda Mona'0 esta cerrada, hoy hay descanso, Wendy pide un taxi. Siento una añoranza, extraño algo, me falta algo. No se que.

-Cuéntamelo, ¿Como va todo con Gabriel?- dice inquisitiva Wendy

Abro los ojos platos, ¿Sera que lo que me falta es el? No, no es posible, yo no lo quiero, descarto la idea.

-Bien- digo con una sonrisa

-Isabella, odio cuando no estas habladora-

Suspiro

-He vuelto a ver a mis padres-

-¿Estas bien? ¿Te han dicho algo? ¿Te lastimaron?- Wendy parece preocupada

-No, yo me fui corriendo como una cobarde-

-Eres muy valiente- dice alentadora- Yo me hubiera desmayado al verlos tratando de llevarme de nuevo al psiquiatra.

Sonrió. Pero desearía estar ahora mismo muerta.

***

Hay muchas tiendas con nombres raros. Nunca me ha llamado la atención todo esto, en cambio a Wendy le encantan la moda, siempre ha trabajado mas que yo para cumplirse sus caprichos. Entramos a una tienda que creo que se llama ¿Dori? ¿Diro? ¿Dior? Oh! Como se llame, a nadie le importa. Hay ropa linda, pero no me llama la atención, yo tengo gustos muy peculiares. Wendy me dice que vea unos vestidos, son bonitos, me gusto uno negro. Pero es demasiado caro, ¿Por que alguien pagaría una cantidad ridícula de dinero por un simple trozo de tela sobrevalorado? Yo no lo haría aunque tuviera todo el dinero del mundo, que estúpido. Wendy me señala unos vestidos en oferta.

-¿Ya sabes cual sera tu disfraz?-

Frunzo el ceño

-No-

-Entonces ¿Como sabrás que comprar?- dice molesta

-Yo no se de moda Wen-

Wendy roda los ojos

-Mira un vestido rojo, no es muy caro-

Miro el precio, si que es caro. Niego con la cabeza.

-Isabella si es por el dinero, yo te ayudo a pagarlo-

-No es por que sea una avara- sonrió- se llama lógica, no pagare tanto por ropa-

Wendy tomo el vestido y me obligo a probarmelo, salí del probador, Wendy abrió la boca.

-Te ves divina- chillo

Según ella resaltaba mis curvas ¿Cuales? Soy muy delgada, muy amarillenta,  y desalineada.

-Lo debes de comprar- suplico

Rodé los ojos, esta bien, voy a ceder. Pero solo lo haré por que ya me quiero ir de aquí. Las chicas plásticas que andan por ahí hacen que quiera vomitar.

***

Íbamos de regreso a a mi departamento, yo saque la tarjeta que me dio aquel chico. Aparentemente se llama Stephan Oleo. Trabaja en la editorial de Oleo, de seguro y es la editorial de su padre. También esta su número ¿Como se atreve a pensar que lo necesito? Que arrogante. Lo peor de todo es que estaba coqueteando conmigo. No creo que eso le guste a Gabriel.