"A traves de la verdad"

Capitulo 25 2ºTemp

Maraton 6/10

-Nataly-dijo Amber divertida y Martina resoplo.
-¿Y por qué les parece tan gracioso?-les pregunto Martina sin poder creerlo.
-Porque ahora está nuevamente detrás de Zac, hacia tiempo se había resignado y ahora vuelve-le dijo Drake con una sonrisa.
-Y nos gusta ver como Zac sufre acosado por ella-dijo Amber divertida.
-Ustedes simplemente no tienen remedio, bueno, creo que tanto Zac como yo la detestamos lo suficiente como para arruinarle la fiesta-dijo Martina.
-¡Hey! ¿Y nosotros qué somos? ¿Acaso parecemos parte de la decoración? No Martina, nosotros nos unimos a su plan, eso de ver a Putaly fuera de su fachada de chica perfecta, nos encanta-dijo Drake con una sonrisa.
-¡Drake! ¡La llamaste Putaly!-dijo Amber riendo.
-¿Y cómo más? Si tiene el nombre escrito en los senos-dijo Drake y las chicas rieron.
-Eres tan poco caballeroso.
-Solo soy guapo-dijo Drake y ambas rieron nuevamente.
-Bueno, entonces entre los 4 nos encargaremos de ella-les dijo Martina y ellos sonrieron divertidos.
Eran unos de los primeros en llegar a la fiesta, por ser los mejores amigos de Zac, él fue hasta ellos y luego los 4 rieron.
-Esto será cómico, con Putaly acosándote-le dijo Amber a Zac.
-¿Cómico? Demonios, esa chica es un dolor en el trasero, lo juro-dijo Zac divertido.
-Es tu culpa por ser guapo y popular y todo eso que a ella le encanta-dijo Martina burlándose de su mejor amigo.
-Ja, ja, que graciosa, ojalá viniera el imbécil de Austin a acosarte a ver si te gusta-le dijo Zac burlándose.
-Yo lo dejaría estéril, para que aprenda que no me gusta que se me acerque-le dijo Martina con suficiencia.
-Con todas las historias que me cuentas de ser experta dejando estéril a cada hombre que te molesta…
-Eso debe doler mucho-dijo Drake apoyando a Zac.
-Cuando quieran les muestro cuanto duele-ofreció Martina y ambos se taparon su entrepierna.
-¡No sean puercos! No se toquen ahí en público, pff… ¡hombres!-dijo Amber divertida.
-Bueno, yo no sé, pero estéril o no, comenzare la fiesta-dijo Drake tomando de la mano a Amber para acercarse a la mesa de bebidas y comenzar a preparar una para ambos, demonios, se pondrían tan borrachos que no recordarían ni su nombre.
-Así que… ¿Nataly?-dijo Martina para seguir molestando a su amigo, él soltó un gruñido y luego ambos rieron.
La gente comenzó a llegar, más y más personas llegaban y Martina se preguntaba dónde estaban los padres de Zac.
-Hey, ¿y tus papás?-pregunto ella gritando, la música ya no dejaba escuchar más.
-Salieron fuera, digamos que es una fiesta no autorizada-dijo Zac divertido y ella se rio.
-Por eso te amo Zac, chico rebelde-le dijo ella con una sonrisa, amaba en serio a su amigo, era al mejor que podía imaginar, era como un patán, con las mismas características de un patán, excepto porque no lo era. Nunca jugaría con una chica, y además desde que Martina había llegado a su vida, él había dejado de ser un completo desobligado y había comenzado a equilibrar su tiempo y su vida.
Ambos chicos fueron a sentarse donde pudieron entre tanta gente, la casa terminaría siendo un completo desastre, pero a Zac no le importaba, ya contrataría a algunas personas para dejar todo como si nada hubiese pasado. Zac miraba a su amiga y sonreía, en serio amaba estar con ella, pasar tiempo con ella.
-¿Te diviertes?-pregunto Zac mirándola fijamente.
-Me divertiría más si estuviéramos en un lugar con menos personas aplastándome cuando se caen borrachas-comento ella y Zac se rio.
-Sí, entiendo, así que… si no puedes con ellos, úneteles-le dijo entregándole una copa, ella la miro asqueada, pero después sonrió, ¿por qué no? Y se la tomo completa.
-Puaj-exclamo, pero se la paso a Zac para que le sirviera otra.
-Con más calma ¿sí? Te va a dar algo-dijo él divertido y Martina sonrió, y comenzó a tomarla más despacio, hasta que el pésimo sabor disminuía.
-Oh mierda, aquí viene la puta-dijo Martina mirando a Nataly, con una falda que más que nada parecía ser un cinturón y su blusa parecía ser un simple top.
-¡Zacky!-dijo la chica acercándose a ellos-oh, estas con esta, te estuve buscando, ¿me invitarías a bailar?
-No realmente-dijo Zac mirando a Martina tomarse toda la copa y él comenzaba a sentarse también algo mareado.
-Hey Putaly, creo que te confundiste, ¡vienes solo con un cinto y tu bra!-dijo Martina sonriendo.
-Que graciosa. 
-Yo sé que sí-bromeó Martina y dejo a un lado la copa-¿y dónde están Drake y Amber? Ellos querían ayudarme a sacar a toda perra que entrara.
-No eres graciosa, en serio no lo eres.
-¿Ah no? Que decepción, no intentaba bromear, hablo en serio. 
Zac rio divertido y siguió tomando copas, una tras otra, hasta que sentía que su cerebro dejaba de funcionar.
-Ya, ya chicas, calma-les dijo-Nataly, deja en paz a Martina.
-¡Es una maldita puta! Llega y se lleva todo lo mío con ella. 
-Jorge nunca fue tuyo, si a él te refieres-le dijo Martina.
-Pff… ¡no! ¡Hablo de todo! Te llevaste a Zac, te llevaste a Austin y a todos esos chicos que antes me miraban a mí y ahora solo tienen ojos para ti, eres patética-le dijo Nataly.
-¿Patética yo? Mírate, rogando por atención…
-¿Sabes algo? ¿Estás muy feliz por el hecho de que Jorge intente reconquistarte? Pues siento decir que todo es parte de una apuesta con sus amigos, todo el equipo de fútbol lo sabe, Jorge quiere demostrar que ni su ex se resiste a él, ¿y por qué no? Llevarte a la cama-dijo Nataly y Martina sintió como el aire abandonaba sus pulmones y dejo de querer estar ahí.
No entendía porque le dolía, pero le dolía que Jorge hubiera intentado hablar con ella como antes, salir con ella y ahora ella se daba cuenta de que había tenido razón, Jorge solo quería demostrar que era un Don Juan de primera.
-Bueno Nataly, no eres quien para decir nada, a ti los chicos solo para eso te quieren, para llevarte a la cama, y créeme que cuando me acosté contigo hace tiempo, fue por lo mismo, una calentura del momento-dijo Zac y Nataly lo miro realmente ofendida, porque eso a cualquier mujer le dolería por poca dignidad que tenga.
La chica salió de ahí rápidamente, dirigiéndose a otra parte de la casa, para ocultar ese dolor que sintió.
-Oh mierda, ¿crees que me pase?-pregunto Zac a Martina y ella respiro profundamente.
-Eso creo, gracias por defenderme Zac, pero… bueno, debes aceptar que eso no fue digno de ti-le dijo ella y él sonrió.
-¿Tú estás bien? No debes creerle-le dijo Zac y ella negó con la cabeza.
-Yo estoy bien, realmente no es como si Jorge me importara, y ahora… ¿qué harás con Nataly?-pregunto ella y Zac resoplo.
-Pedir disculpas, ¿qué más?-dijo él y ella sonrió.
-Ese es mi amigo, ve, y yo… bueno, estaré por aquí-dijo Martina sonriendo, él se puso en pie, besó la frente de su amiga y luego se alejó de ahí para disculparse con Nataly muy a su pesar.
Martina suspiro, mirando a su alrededor, mientras veía como Zac se alejaba, y noto que en serio estaba un poco borracho y sonrió, al parecer las copas que ella había tomado, habían disminuido su efecto con la noticia sobre Jorge. Se puso de pie, busco con la mirada a Amber y Drake para ir con ellos, pero parecían más borrachos que nada, el alma de la fiesta, dando un súper espectáculo. Martina rio y decidió que necesitaba aire fresco.
Cuando salió de casa de Zac, sintió un miedo extraño, ¿caminaría sola por la calle en la madrugada? Donde podían hacerle daño… donde podría encontrar a Ryan nuevamente con nuevas órdenes de Tom… ¡pero demonios! Ella no era una cobarde.
Salió y se arrepintió de no haber llevado algún suéter, estaba helando, salía ese vapor por su boca que lo hacía claramente notable. Abrazo sus brazos y suspiro, camino un poco, hasta que la música dejo de escucharse, pero justamente había caminado unas cuadras cuando se dio cuenta de que estaba cerca de casa de Tony, donde seguramente estaban todos celebrando la fiesta, donde estaba Jorge… 
De nuevo hizo una mueca, estúpido falso mentiroso.
Comenzó a escuchar música nuevamente. La otra fiesta, se desvió de su camino, justamente para irse a otra parte o volver a la fiesta, cuando entonces choco con alguien bruscamente al dar la vuelta. Era Jorge