•Estorbo• | Altaïr x Ezio |

♦Capitulo 2 - Ezio♦

La vida había sido difícil para Ezio, pero nada que un par de chicas no puedan resolver. Al menos así decía él.

Él había descuidado un poco su trabajo, pero al oír de un nuevo asesino decidió entrenar un poco, por si acaso.

— ¡Pero tío Mario! ¡No necesito ayuda de nadie más! —se cruzó de brazos.

— Ezio, Altaïr Ibn-La'Ahad  puede ser de gran ayuda. —sonrió orgulloso.

— ¿Altaïr que? —lo miró extrañado. El apellido del otro asesino era algo particular para Ezio.

— Ibn-La'Ahad, Ezio.

— Sólo Altaïr mejor. —sonrió aún sin entender.

— Vale, Ezio. Espero lo recibas bien. Es un chico difícil.

— Claro —suspiró. — Sigo opinando que no necesito ayuda de nadie.

— Altaïr es un buen asesino. No lo subestimes —abrazó por los hombros a su sobrino — Vete ahora. Llegará mañana

— ¿Tan pronto? Vale... —miró al suelo algo insatisfecho.

Se dirigió a un establo, cogió un caballo y tomó rumbo a Florencia. Una hora, hora y media después, ya estaba allí. Miró a sus alrededores y se adentró a la ciudad.

— Altaïr —resopló. — ¿Un chico difícil, eh? Me gusta. —esbozó una sonrisa.

[...]

— Si Leonardo, vendrá otro asesino a ayudarme. No necesito ayuda, no lo necesito. —murmuró sin darle mucha importancia.

— Pero Ezio, no digas eso. Quizá algún día necesites ayuda. —le dedicó una sonrisa.

— ¿Lo dices en serio? Lo dudo muchísimo.

— ¡Claro! —lo abrazó por los hombros. — ¿Vamos a buscarlo?

— Bene. Espero que esté a mí altura. (Ejem)

— Ezio... —se cruzó de brazos. — Altaïr podría ser de gran ayuda. ¡Quiero conocerlo! No es de aquí, me gustaría preguntarle algunas cosas.

Sonrió — Bien, vamos. Espero que supere mis espectativas. —Giró sobre sus talones, acto seguido abrió la puerta y salió detrás de Leonardo.

— Tranquilo Ezio, superará tus espectativas —le dedicó su mejor sonrisa y Ezio se la devolvió.

Caminaron a paso tranquilo hasta la salida de la ciudad. Donde, en poco tiempo, llegaría el nuevo asesino a cambiarlo todo.