UN CORAZÓN IMPENETRABLE.

CAPITULO 11: LA PROPUESTA.

Llegamos al restaurante llamado akatsuki el mejor de la ciudad de konoha. La verdad reservé una mesa, tres días antes de venir a este lugar. Nos sentamos y yo le ordene al mesero el mejor vino y la cena.

—Sasuke te invite a este restaurante, porque quiero pedirte que seas mi novio—le propongo.

—Eres un dobe y no quiero ser tu novio—rechaza mi propuesta.

Me siento un poco triste por sus palabras, pero decido cambiar de estrategia, me acerco a su oído y le susurro.

—Tengamos una relación de amigos con derecho durante un mes y te prometo que dejo de molestarte—lo dijo porque sasuke puede ser que tenga miedo a tener algo serio conmigo, aunque si acepta mi propuesta, voy a conquistarlo y así le propondré en el futuro que sea mi novio oficial.

—Está bien, pero no me beses en público—desvía su mirada.

En ese instante llega el mesero y interrumpe nuestra conversación, cenamos en silencio, después al acabar la cena, llevo a sasuke a su casa, me despido con un beso en la mejilla izquierda que le doy.

—Te dije que no me besaras en público—me dice con un sonrojo.

—No hay nadie—me rio porque se me hermoso con las mejillas sonrojadas y además ahora que lo pienso creo que amo su carácter, aunque a veces me saca de quicio.

—Dobe—me dice y se mete a su casa,

Yo empiezo a caminar hacia mi casa con una sonrisa, porque di un paso importante para empezar a conquistarlo y voy a derrumbar poco a poco esa muralla que ha construido durante años y después me robare su corazón y será todo mío

—Voy a conquistar ese corazón impenetrable—me dijo a mismo y continúo caminando.

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Entro a mi casa y miro a mi padre adoptivo que me mira con una sonrisa burlona, yo lo ignoro y empiezo a caminar hacia las escaleras, pero un comentario me detiene.

— ¿Te gusta naruto?—me pregunta.

Volteo y lo miro con enfado.

—No me gusta—le contesto.

—Parece que si te gusta—me sonríe.

Yo no le respondo y me marcho a mi habitación, cuando llego me subo a mi cama, me acuesto y miro hacia el techo. Me pregunto porque acepte su propuesta del dobe, y la respuesta es que después de un mes me va a dejar de molestar, aunque espero no estar cavando mi propia tumba y acabar enamorándome de naruto. Trato de dormir pero me es imposible porque no dejo de pensar en naruto y su tonta propuesta que acepte.

Amanecí con unas ojeras, me duche y luego me puse mi ropa, desayune un vaso de leche y pan tostado.

Me marche a mi empresa y cuando llegue me subí al elevador, pero para mí desgracia mi amigo con derecho entro al mismo elevador que yo. Tardamos cinco minutos en llegar a nuestro piso.

—Nos vemos más tarde—se acerca a mí, me besa y se marcha a su oficina.

—Maldito dobe—toco mis labios inconscientemente, me doy cuenta de mi reacción, sacudo mi cabeza y decido no pensar más en naruto y concentrarme en mi trabajo.

Continuará.....................