Chupetines de cereza

Capitulo 7

Estaba haciendo el desayuno cuando escuche carcajadas en la escalera, una era de Emma y la otra la desconocía. Me acerqué mas a la puerta para tratar de escuchar pero estaban hablando en español entre risas. Esto es estupido, yo soy estupido, estoy escuchando atrás de la puerta cuando podría ir a pedirle... Azúcar! O es muy cliché? Dios, esto es estupido, estupido.

- Era todo genial, tenia que llegar una loca para trastornarme la mente- iba protestando en voz baja mientras subía la escalera con una taza vacía.

- Tranquilo campeón. Ni siquiera estas mirando por donde vas- la Sra Guess estaba parada en el final de las escaleras y casi tropiezo con ella.

La miré y tenia ganas de llorar, realmente llorar, porque no sabia como manejar todo lo que me estaba pasando.

- Liam... Cuídate, cuídala, ella viene apaleada y lastimada, sino no cruzas un océano escapando de algo o alguien.

Solo asentí, la Sra Guess aparentemente sabia porque Emm había venido a Irlanda. Me dio un apretón en el hombro para reconfortarme.

Se escuchaban risas detrás de la puerta del 3A, golpee suavemente y abrieron la puerta rápidamente. Un hombre alto, rubio y de ojos café me miró fijo.

- Emm, vos encargaste un Adonis?- grito el hombre

- Que?- grito Emma desde supongo la habitación.

Entonces apareció en mi vista, sonrió de oreja a oreja y me abrazó como nunca, me dio un beso y me arrastró al interior.

- Matt, él es Liam. Liam él es Matt, mi mejor amigo en todo el mundo.

- Diooos, Emm, que sentimental- dijo Matt riéndose

- Idiota- le contestó y lo fulminó con la mirada

Me hizo sentar en el sillón, se sentó sobre mis piernas y paso su brazo por mi hombro. Matt me miraba y sonreía, era una situación de lo mas incómoda.

- Asi que, Matt no es un nombre muy latino no? - dije finalmente

- Se llama Matías- intervino Emm- solo que siempre lo llamaron asi o Mati.

Asentí mientras hablaba pero no supe que decirle.

- Emma me dijo que trabajas en una empresa de telecomunicaciones- eso es interesante- dijo Matt inclinando la mano como diciendo podemos hablar sobre eso.

Pasamos la tarde hablando sobre nuestros trabajos y vidas personales. Matt tenia la misma novia desde los 17 y habían ido los tres a la misma escuela, su novia tambien era una buena amiga de Emm. Tenia su propio bar que habían puesto los tres hasta que Emma decidió venir a Irlanda y les vendió su parte

- Entonces ahí estaba yo, totalmente ebrio en una fiesta donde nos habíamos colado- Matt no podía borrar la sonrisa mientras contaba la anécdota y Emma se reía en la cocina mientras preparaba café- aparentemente vomite en algo valioso porque nos echaron a los cuatro a patadas.

- A los cuatro pregunté?

- Si, estaba también Tomás, el novio de Emma por ese entonces.

Se escucho el estruendo de la taza contra el suelo y cuando volteamos a ver estaba parada mirándonos con los ojos como platos, todavía sostenía la cuchara en la mano aunque la taza y el café estuvieran esparcidos sobre el piso de madera. Entonces vi la expresión de Matt, la miro horrorizado y después con arrepentimiento. Evidentemente aquello era algo que yo no tenia que saber y Matt me había revelado parte del pasado de mi vecina. Como si un interruptor los hubiera sacado del trance se empezaron a reír y a juntar los pedazos de taza.