LAS RAZONES PARA ODIARME. (JonDami)

Capitulo V. "Cariño"

-Damian,¡Damian!- le grite una y otra vez mientras salia de la universidad después de casi darle un infarto al profesor, las personas al rededor volteaban a verme, unos pocos sorprendidos, otros comentando "¿Es Damian Wayne?" "¿No compro Lexcorp?"
-Damian detente- le dije al estar enfrente de su auto -¿Que vas a hacer? ¿Que es lo que hay en Cadmus?-
-Nada que sea de tu incumbencia Kent- me dijo molesto mientras subía a su auto, dudo un momento y bajo el vidrio -Quitate o subete-
Me sorprendió escuchar eso, en serio no estaba molesto conmigo, sonreí un poco y tome el lugar del copiloto provocando la sorpresa de varias personas.
Damian manejaba rápido pero sin emoción, no como en esas películas de acción, para el ir rápido o lento no tenia relevancia. Al llegar a el lugar solo era un edificio Damian se miraba desilucionado, como que esperan algo más; bajamos del auto y entramos, el edificio estaba abandonado y Damian conectó un cable al toma corriente.
-Mira a ver que encuentras- me ordeno mientras movía un par de teclas en su visor holográfico, empecé a dar vueltas viendo todo sin saber que buscaba -Con tu visión de rayos X imbécil-
-Ah, claro- me reí por lo obvio -Damian-
-¿Que?-
-Hay como 50 pisos a bajo- comente un poco asustado a lo desconocido -Vamos a bajar verdad- le comente al ver que se estaba encaminando hacia el ascensor
-A eso venimos-

*

Mientras descendíamos Superboy se miraba mas nervioso, volteaba a ver a todos lados y contaba los pisos que descendíamos, lucia lindo.
-Tanquilo- comente mientras tomaba su mano, Jon se sonrojo y quite inmediatamente mi mamo ¿Que estaba haciendo?
Al llegar a abajo Jon escanio todo, no había nada en lo mas próximo así que salimos, abajo las primeras paredes eran de piedra labradas, pequeñas luces iluminaban el camino hacia una puerta de metal de la cual, Superboy no pudo ver mas alla.
-Vamos a entrar-
-Como digas- acto seguido rompió la puerta como si esta estuviera hecha de papel, adentro solo había una habitación con paneles a los costados y una cápsula blanca en la cual fácilmente podría caber un adulto.
-¿Que estamos buscando?- preguntó mi compañero al acercarse a la cápsula
-No es un que. Es un quien- comente mientras analizaba la información que estaba en las computadoras, resulta que, un ADNalien se había escapado provocado que todos adentro tuvieran un final horrible o eso se aparentaban.
-Damian...- escuche decir con un hilo de voz -Ve esto-
Me acerque a la cápsula y pude verla, era ella, era mi madre.
-¡Maldita sea!- exclame mientras intentaba abrir la cápsula
-Es tu madre Demi-
-Lo se, ayudame a abrir esta cosa- le grite aun mas desesperado.
El Hereje había logrado uno de sus cometidos ahora le quedaba dos cosas mas por hacer.
-Debí verlo buscado antes-
-A quien?- me pregunto Jon, no le puse mucha atención a su pregunta y como la cápsula no cedía empecé a lanzarle dagas y pequeñas bombas provocando que el edificio empezaba a temblar
-¡Detente!- me grito una y otra vez hasta que me tomo por atrás y me abrazo evitando que siguiera -Es tu madre-
-Es una maldita zorra que se atrevió a matar a su propio hijo- grite mientras trataba de safarme.
-Damian, basta...- susurro a mi oído provocandome un escalofrío; y fue ahí cuando lo vi, era un tipo alto, con ojos azules y ropa blanca, manchada de un rojo carmesí que pronto reconocí como sangre; se lanzó precipitadamente hacia Jon soltando un grito del guerra, que logró evitar lanzándome al suelo y el dando un salto manteniéndose en el aire.
-¿Que demonios es esto?- pregunto Superboy mientras se lanzaba al genomorfo levantándolo unos cm del suelo.
-Yo que se, hay que salir de aquí, alguien viene- grite al escuchar el ruido proveniente de arriba -Vámonos- le ordene al salir por la puerta que entramos, Jon me siguió y no dijo ni una palabra hasta que llegamos a la seguridad de mi departamento, el cual había asegurado con la misma tecnología que la cueva además de un toque mágico por parte de Raven.
-¿Estas bien?- me pregunto el joven mientras se desplomaba en mi cama aun lado de mi. -¿Quien era el? ¿Por que nos ataco? ¿Que dominios hace Cadmus? ¿No estaba muerta tu madre?-
-Una a la vez Cariño, no se quien demonios es el, no se por que nos ataco pero estoy casi 100% seguro que fue quien destruyó Cadmus y si, esa zorra estaba muerta- termine de decir mientras me quitaba los zapatos y la chaqueta de cuero.
Tenia una estúpida sonrisa en su cara, ¿Como podía estar sonriendo después de lo que paso?
-Eres idiota, ¿por que sonríes?- le pregunte molesto
-Me dijiste cariño- comento mientras se acercaba a mi y me daba un dulce y pequeño beso en los labios, no como aquel que me dio la primera vez, lleno de pasión y deseo, no, esta vez fue tímido y dulce.

*

Damian me correspondió el beso, lo cual no esperaba ni por asomo, paso su mano por mi nuca acercandome mas a el y aumentado el grado de fusión de nuestros labios, tome su mano y con la otra lo rodie por la espalda baja acercándolo aún más.
En un momento dado sus labios se separaron de los míos y empeze a besar su cuello, Damian me alejo un poco, pensé que quería que me deteniera, temía que me viera de la misma manera que aquella vez; pero no, el me siguió besando y en algún momento se subió arriba de mi, yo ya estaba acostado en la cama saboriando sus besos mientras se escuchada uno que otro gemido que no sabia si eran de el o mios.
Los besos de Damian no eran como los esperaba, yo creí a que serian fuertes y sexys; pero no, eran dulces y lindos, y hubiese podido pasar así toda la noche.
-Ya duermete- me dijo el chico sin separarse de mi boca.

*

Ya en la madrugada me desperté, estaba utilizando a Jon de almohada -No sera para lo único que lo utilizare- pensé. Necesitaba al chico para algo mas.