11:Amor, la debilidad del asesino.

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Apenas llegar a la mansión y aparcar el auto. Entre los cuatro hombres llevaron a Hikage a una habitación. Takashi comenzó con la revisión, Tomó se encontraba a los pies de la cama de brazos cruzados mirando con atención. Yoshiatsu hecho un manojo de nervios se mordía las uñas en señal de nerviosismo mientras que yacía sentado en el sillón cubierto por terciopelo rojo.

—No hay nada roto.. Tampoco parece que haya hemorragias internas.— Anuncio Takashi.

La habitación quedo en silencio. Tomó observo el rostro angelical de Hikage al dormir, sus múltiples heridas que eran como pequeñas cortaduras, también el innumerable número de moretones que habían sobre su cara y cuerpo.

—¿Cuanto tiempo más estará así?.—

Takashi dirigió su mirada hacia tomo.— Posiblemente unas dos horas más.. Es lo que dura el efecto de la anestencia del collar.—

—Entonces no hay nada que hacer aquí hasta entonces, me largo a fumar.—

Tomó se giró sobre sus talones, camino hacia la puerta atravesando el umbral y fue seguido por Takashi, quien término por cerrar la puerta a sus espaldas.

Al estar a solas, Yoshiatsu acerco la silla, miro el rostro casi desfigurado de Hikage gracias a los moretones, sintió dolor por ello y una fuerte presión invadió su pecho seguido por una enorme cantidad de ira. Llevo una mano hasta el rostro de la muchacha con cuidado delineó sus labios con el dedo pulgar y suspiro en un fallido intentó de calmarse, justo ahí.. Recordó esa suave y débil sonrisa que ella le había regalado hace menos de media hora.

—Me pregunto si.. En ese momento realmente te alegraste de verme.— hablo como si realmente ella fuera a escucharle, unió su frente con la de Hikage y suspiro.— Hikage.. Te prometo que cuando lo encuentre le haré sufrir.. Lo torturare hasta que pida clemencia.. Le haré comer su propia mierda.. Le cortare su diminuto pene en trocitos y luego haré que se lo trague también.— Se mordió el labio.— Te lo prometo.

Tomó con fuerza su mano, incluso entrelazó sus dedos con los suyos apoyó su frente en la orilla de la cama y en silencio con sus ojos cerrados se quedo ahí, sólo deseando que ella despertará lo más pronto posible.

Tomó se había ido hasta el jardín trasero, un cigarrillo estaba entre sus dedos. Tras botar el humo miro el estanque colorido repleto de peces Koi, segundos más tarde dirigió su mirada hacia ese punto amarillo que se notaba detrás de los arbustos más cercanos.

—Sal de ahí de una maldita vez.— Le dijo a Takashi, consciente de su "acoso"

Takashi al ser descubierto no tuvo de otra que salir, camino en su dirección, sobando su brazo derecho con su mano izquierda y desvío su mirada con cierta vergüenza.

—Tomó-san.. ¿Puedo preguntarle algo?.—

El azabache alzó su mirada hacia el, sonrió ladino y tras quitar el cigarrillo de su boca hablo.

—Claro.—

—¿Qué siente usted por Hikage-san?.—

—Nada.—

Takashi abrió sus ojos como platos sorprendido por la respuesta, pero también en cierta parte aliviado.

—No lo entiendo.. Entonces.. ¿Por que no quiso que desincronizaramos su collar del resto?.—

—Por algo simple.. Quería ver a tu jefe retorcerse del dolor por un rato.—

—Pero usted.. También sufrió las consecuencias.—

Tomó soltó una leve carcajada.—¿Y eso que? Llámame masoquista, pero a pesar de todo llego a ser divertido, incluso es divertido ver la estúpida cara de tragedia que tenía hace unos minutos mientras revisabas a Hikage. Que patético.—

「  Let Me Kill∥Let Me Love。」Where stories live. Discover now