Cliché » Kim Yugyeom

08

El resto del equipo soltó un "Ohh" al unísono y dirigieron sus pupilas al rostro de Kim.
El pelinegro se hallaba aún incrédulo observando la desafiante expresión de su amigo, y ahora, retador.

— Corre tu tiempo, YuGyeom... — murmuró este con una sonrisa — Si la chica sale de esa tienda y se va, es tu fin, quedarás fuera del equipo.

El chico no pudo evitar alarmarse.
¿Él? ¿Fuera del equipo? Ni hablar.

Se levantó manteniendo su actitud indiferente y miró con odio al Tailandés antes de caminar hacia la tienda frente a la cafetería.
Sentía las miradas de sus amigos en su nuca, logrando presionarlo.

En cuanto ingresó buscó a la chica, a quien no tardó en encontrar frente a la sección de antiguos discos.

Kim frunció el ceño con algo de curiosidad, pero se reprimió de inmediato a investigar a mayor profundidad.
Aunque se negase por completo a aceptarlo, había algo en la actitud de ________ que no dejaba de parecerle... cómico.

Vaya, como le gustaba molestarla.

YuGyeom despejó su mente y se acercó hasta la muchacha de espaldas.
¿Cómo debería empezar? ¿Quizás un 'hola'? ¿'Todo bien'? ¿No debería ir simplemente al grano?
Por supuesto, pensó el chico, al fin y al cabo solo era un reto.

Con su característica indiferencia plasmada en el rostro, tocó suavemente el hombro de la chica para llamar su atención.

No contaba, claro, con que en ese preciso momento dos críos pasaran corriendo por su lado y lo empujasen, dejándolo de rodillas en el suelo.

Se suponía que inicialmente buscaría el estúpido afiche que Kim Yu Gyeom había usado de parche para reponerlo, sin embargo, la chica no pudo evitar distraerse con la sección de discos antiguos.
Mark solía escuchar de esos cuando ella era más pequeña. Fue inevitable acercarse a echar una mirada.

Llevaba a lo menos diez minutos observando la gran variedad de elementos, cuando un leve toque en su hombro derecho la hizo voltear.
Frunció el ceño al no ver a nadie allí, pero enseguida quedó con la vista fija en el suelo.

Por dios. No puede ser.
¿Acaso Kim Yu Gyeom acaba de arrodillarse para ella?
________ sabía que sus encantos harían que cualquiera cayese a sus pies de inmediato, pero esto era exagerar.

— Así que al fin te dejas llevar por tus impulsos, eh. — no demoró en ocupar su posición de superioridad.

Un bufido salió de los labios del pelinegro antes de que este se pusiese de pie, volviendo a ser más alto que ella.
La chica no pudo evitar sentirse abrumada al ver que el rostro del chico se mantenía completamente inexpresivo y sin indicios de nerviosismo.

— ¿Que...?

— ¿Quieres salir conmigo? — Kim Yu Gyeom no esperó para soltar observando sus ojos.

________ guardó silencio totalmente desconcertada. Por primera vez la habían tomado desprevenida.
¿Qué clase de desesperación era esa? ¿Acaso el chico es un tipo de extraterrestre no conocido?

— ¿Ahora? — la chica alzó una ceja y preguntó con un burlesco tono, cruzándose de brazos.

Ella rodó los ojos divertida de la osadía del mayor y Kim simplemente tomó aire hasta llenar en su totalidad sus pulmones.

— Sí, ahora.

Fue entonces cuando la vista de la muchacha volvió al serio rostro de Yu Gyeom.
Pestañeó un par de veces incrédula y luego sonrió.

Lo había logrado.