Él ojos rubíes sacó de la mochila el sobre que tanto ansiada a leer desde que la saco de aquel escritorio. Después de llegar la había querido abrir, pero había un pequeño problema, su madre o como el la llamaba "la bruja" o "vieja".
Por lo cual ahora mismo estaba abriéndola.
Abrió con mucho cuidado el sobre de color azul claro, tratando de no arrugarlo ni romperlo y saco el contenido.
Le intrigaba un poco pues "la chica loca de las cartas" no solía ser tan formal con las cartas como para agregara un sobre, que probablemente se rompería de igual forma. Ella era mas de agarrar un hoja de cuaderno y escribir hay mismo, como había hecho antes, aun que después de unas cartas había comenzado a enviar las cartas en hojas blancas, con un lindo margen y linda letra.
No entendía el por que había empezado a guardar cuidadosamente y en orden cada carta.
Bueno, en realidad no sabia el por que había comenzado a contestar sus cartas.
Tampoco el por que había tomado el consejo de la chica de ser menos explosivo.
Y definitivamente no entendía los sentimientos que tenia a aquella chica de la cual pensaba saber todo sin conocerla. Pues cada vez que encontraba la carta sentia un calido sentimiento alojarse en su pecho.
Miro la carta, su contenido lo dejo aturdido por unos momentos, miro el reloj y espero pacientemente.
***
Desconocido: ¡Hola chico explosivo!.
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¡Oye tu...! ||Katsuki Bakugou ||
Fanfiction¿Estaba realmente bien aferrarse a lo que no debía? Ella siempre había sido de las chicas que necesitaban aferrarse de algo, en su caso más específicamente de alguien. Si este alguien desaparecía, su única estabilidad se perdía. Pero el, el era un...
