Capítulo 33:

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El muy cretino me habia puesto una lista de todas las cosas que tenía permitidas y las que no a cambio yo obtendría mi libertad en un mes, pero tenía que soportarlo 30 días ¿Esto no puede ser peor?

Y como por si fuera poco a los lugares a los que me permitía ir tenía un guardaespaldas y hasta a una modista según para vestirme adecuadamente.

De sólo recordarlo sentía que se me devolvía la cena de anoche.

¡Demonios! Yo no tolero a alguien que me ande diciendo cada cosa que hacer y tener a Peter y ahora a Katrina ya era mucho para mi.

Ella era una mujer mayor tenía unos 40 tal vez, era trigueña, tenía cabello corto y rubio, ojos cafés lucía muy bien para ser mayor.

Ella había sido muy amable toda la mañana pero repetía ¡Niña no me saques de cabales! Cuando decía algo grosero etc.

Ni siquiera tenía libertad de decir lo que yo pensaba. ¿Que tontería?

Estaba probandome una vez más un vestido elegante en tono azul honestamente era el único que me gustaba de todos los demás. Era simple pero muy bonito aparte de que el azul era mi color favorito.

Definitivamente había sido una larga mañana, estábamos en una tienda y un gran reloj en la pared anunciaba que eran las 12 del medio día.

Me moría de hambre Katrina había estado a cada instante sobre mi como ¡No te sientes así! ¡Levanta la cara! ¡No hagas tantas muecas! Etc.

Me tenía agotada y me había hecho dudar sobre el acuerdo con Conor. Pero ya era demasiado tarde para arrepentirme.

Conor quién no era más que un francés guapo y con aires de grandeza, si no fuera tan engreído hasta podríamos ser amigos pero eso están muy lejano a la realidad y con una noche me había bastado.

-Bien señorita hora de ir a almorzar.-anuncio Katrina

¡Ya era hora! Gritaba mi estómago pero yo solo respondí a Katrina con un simple asentimiento. No tenía nada que decirle, bueno sí pero el punto es que era puro sarcasmo y ella me reprendería teniendo más horas haciendo bobos gestos, o teniendo un libro sobre mi cabeza para caminar recta.

Moví mi cabeza de un lado a otro para borrar todos esos pensamientos, y me dispuse a caminar con las bolsas en mi mano.

Katrina iba a la delantera y yo parecía una estudiante atrás, ella caminaba con gracia y me reí internamente por eso.

Luego de haber comido y de recibir un leve cumplido de Katrina por haberme portado ligeramente bien, volvimos a la mansión y una extraña sensación se alojaba en mi interior.

Ver a Conor no me hacía gracia, y estaba segura que si lo veía le diría alguna grosería.

Mientras el se había quedado en la dichosa piscina tecleando en su celular yo había tenido que soportar toda la mañana a Katrina “La mandona”.

***

Estaba relajado en la piscina pensando en que hacer con esa chica ahora, debía admitir que era guapa pero a la vez muy arisca.

La más difícil que me había tocado hasta ahora, había enviado a Carl a averiguar qué sabía de la chiquilla esa.

Era totalmente normal y me extrañaba porque se había involucrado con Dante a pesar de que ella me había contado me negaba a creer que ese tarado la secuestrara, si pensaba que era idiota pero no creí que tanto.

Por otro lado este se encontraba en el sótano mis hombres le habían dado su merecido pero aún así quería mantenerlo ahí un tiempo más, su hermanito Marc había muerto en el altercado y aunque eso no estaba en mis planes no había nada que pudiera hacer y me daba igual también nadie lo mando a meterse en mis asuntos.

-Señor las damas han llegado.-dijo Peter para sacarme de mis pensamientos

-De acuerdo Peter estaré aqui un rato más, cualquier cosa avísame.

-Como usted ordene señor.

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Se que no es un gran capítulo pero prometo que el próximo será mejor.

Espero que pasen bien estás festividades conjuntas (Navidades y Año Nuevo) las quiero muchísimo 🌻
Gracias por leer❤

Tú No Eres Lo Que Yo Pensaba (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora