La Espada Con Doble Filo (Akatsuki No Yona)

Capítulo 3

El amanecer se asomo, dando el inicio del día. El dolor en mi espalda era apenas captable, me había acostumbrado a dormir en las duras ramas de los árboles.

A paso lento me diriji al pequeño campamento en el cual se encontraban Yona y sus acompañantes. Ellos me contaron que viajarían a un barco pirata, me daba curiosidad ver a los piratas y el plan que tenían en mente para derrotar a Kum-ji. Divise mi objetivo y apresure mi marcha, llegando en mas o menos cinco minutos.

-¡Hola!- saludo alegremente Yona, le devolví el saludo con la mano.

-Sigo sin estar de acuerdo a que se nos una Akiko, Yona...- Me limite a alzar una ceja.

-¿Por qué Yoon?, Se ve amigable.

¿En qué momento comenzaron a hablar de mí como si no estuviera?. Yoon me ofreció la comida de mala gana, lo cual acepte con una sonrisa; logrando que se enfadara aun más, me resultaba gracioso cuando se molestaba.

-Las costas no se encuentran tan lejanas, pero deberíamos ir ya- todos asintieron y nos pusimos en marcha.

Los barcos se encontraban en los muelles; comerciantes, oficiales o pescadores eran los dueños de los navíos. Me asombraba que siendo un barco pirata dieran este como lugar de encuentro.

Divisamos a Jae-Ha a la lejanía, quien con un gesto de mano nos indicó que le siguiéramos. Rápidamente nos acercamos a una parte menos transcurrida; propia para la situación. En frente nuestra se lograba visualizar una gran nave. Nos adentramos en ella.

Los piratas y nosotros nos encontrábamos frente a frente y las miradas de los tripulantes pasaban de Yona a mí, fijándose más en ella.

-Soy Yona- declaro la misma con una sonrisa en el rostro - ¿Eres la capitana?.

- Yo Soy... la capitana Gi-Gan- la capitana pronunció las palabras cargadas de desconfianza.- Escuché algo de Jae-Ha. El dijo que quieres cooperar con nosotros.

- Si- Yona se encontraba bastante segura, como si su charla se encontrara en otro contexto.

Gi-Gan se dispuso a mirarnos atentamente, localizando la máscara de Shin-Ja. -¿Qué hay con esa mascara?, quítatela. - Exigió, sin darme cuenta ya la tenía en sus manos y el nombrado se encontraba cubriendo su cara.

Rápidamente Yoon se excuso diciendo que Shin-Ja era una persona extremadamente tímida, lo cual logro parar los intentos de la capitana por ver la cara del joven.

-La cosa que mas me importa es la confianza. ¿Quién le pediría ayuda a alguien que no es confiable?

- Pero... Somos fuertes capitana.

Gi-Gan pareció dudar ante las palabras de Hak; para rectificarlas obligo a la mayoría de sus hombres a pelear en contra de ellos.

Los piratas alardeaban el ser un número mayor a sus contrincantes, creyendo que tenían la Victoria en sus manos.

-Capitana, ellos son menos, no importa como lo mires...

-¡Si son solo ellos sin duda ganaremos!.- Pronunció otro.

La pelea transcurrió rápidamente, siendo "nuestro" grupo el vencedor, los chicos se movían como si de una danza se tratara; era hermoso.

-Ellos son 3 como yo...- Explicó Jae-Ha

-Lo hubieras dicho antes- Se lamento un pirata maltratado.

-Pasaron- Se limito a decir la Capitana, la sonrisa se formo en los rostros de Yona y Yoon.

-No se relajen mocosos- Gi-Gan dirigió su mirada hacia nosotros. -¿Qué pueden hacer?.

Un escalofrió recorrió mi cuerpo por la sorpresa de la pregunta, Yona reacciono igual, mientras que Yoon parecía confiado.

-Bueno...- Habló- No me gusta la violencia, así que no peleo. Pero después de eso puedo hacer lo que sea - Comenzó a contar con sus dedos sus habilidades - Cocinar, Coser, Cazar... Tratar heridos. Si tengo los ingredientes puedo hacer explosivos y soy un chico bastante apuesto- Vaya...

La capitana lo aprobó inmediatamente cuando comento lo de los heridos, mas el prefirió resaltar todas sus cualidades. Al terminar el discurso de Yoon, los nervios de Yona eran cada vez más visibles.

-Niñas- Nos señalo a ambas - ¿Qué hay de ustedes?.

Yona comenzó a pensar mientras la capitana le miraba fijamente.

- Yo puedo pelear - admití despreocupadamente, mi cara no reflejaba ningún sentimiento o emoción; no podía confiar abiertamente. Yona pareció aliviada por mis palabras; tendría más tiempo para pensar.

Gi-Gan me miró intrigada, mantuve la mirada fija y el silencio se me hizo eterno.

- Jae-Ha- le llamó - Pelea con ella.

Me asustaba, y mucho. ¿Qué pasaría si fallaba?, retire tales pensamientos tan pronto como aparecieron. He vivido varios años en las calles, me han hecho fuerte. No debo tener miedo.

- Capitana de verdad creo...- la sonrisa en su rostro me molestaba. Basto con una mirada por parte de la nombrada para que este le obedeciera.

Me acerque rápidamente al lugar en donde antes los demás se habían enfrentado, todas las miradas estaban posadas en mí y los piratas no tardaron en hablar silenciosamente entre ellos. Suspire.

-¿Tienes miedo hermosa? - me limite a responderle con una sonrisa. Con katana en mano y posición de pelea lista, no apartábamos la mirada uno del otro, esperando el primer movimiento. Varios minutos transcurrieron de tal manera y la presión aumentaba en mi.

-¡Comiencen!- se impaciento la capitana.

-Seré bueno contigo- antes de correr hacia mí me guiño un ojo. Contraataco y ataco, él esquivaba como si de un juego se tratara. No lograría pasar la prueba de esta manera, su fuerza era superior a la mía, incluso igual a la de los acompañantes de Yona. Necesitaba otra estrategia.

Deje de moverme y él se acerco a mi oreja.

-¿Te rendis...? - su susurro quedo en el aire, antes de que se diera cuenta que un corte se encontraba en su mejilla derecha. Sin darle tiempo a pensar ataque utilizando mi agilidad como punto fuerte.

Logre derribarlo con una patada en la pierna que utilizaba para atacar. Me acerque y le tendí la mano aceptándola gustosamente, al tomarla me impulso contra él, dando que mi cuerpo quedara encima; rápidamente cambio los papeles.

-Bien jugada Preciosa.

-¡Jae-Ha! - el nombrado aparto su cuerpo del mio con una sonrisa, me levante segundos después.

-Aprobaste.

Un peso enorme se retiro de mis hombros, aunque mi respiración era entrecortada; producto del esfuerzo ejercido.

La mirada de la mujer que antes me habia autorizado se encontraba en la pelirroja a mi lado, pude notar una pequeña seña de sonrisa en su cara.

-¿Qué hay de ti?.

-¿Yo...?- respondió Yona perdida.

-¿Qué puedes hacer?.

- Que...puedo hacer...- Se repetía una y otra vez

-Nada ¿Eh?. Alguien que no puede hacer nada es un estorbo. Kum-Ji tiene a muchas personas, por más que pelees contra él, solo perderás tu vida. Vete a casa niña.

Ki-Ja y los demás no tardaron en protestar contra sus palabras, mas Yona no se lo permitió.

-La capitana tiene razón. Pero... Yo también tengo una razón por la cual quedarme.

Esta vez pude observar una gran sonrisa en la cara de Gi-Gan.

-Entonces tendrás un trabajo peligroso... Que te probara.