Movimiento

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Fue un gran revuelo el que se levantó por este suceso. El orientador asignado al grupo de Aome, que por casualidad había observado la escena; dio indicaciones de cómo debía de ser recogido aquel tétrico regalo y con mucho cuidado fue llevado a la dirección. Normalmente un suceso así hubiese pasado desapercibido; pero al ser tratado directamente por dicho orientador, fueron implicados en el suceso las autoridades escolares.


Cuando el abuelo de Aome y su madre se presentaron en el instituto para hablar con el director; todo subió de tono y de nivel. Debido al historial de las llamadas que eran recibidas por Aome, el director los alentó a levantar una denuncia penal por acoso en contra de la persona que estaba realizando esto. Por ello, dio órdenes de que fueran revisados los videos de seguridad de la zona de casilleros, por si había sido captado por las cámaras el autor de dicho suceso.


Gran sorpresa se llevaron cuando al revisar el video y el responsable apareció en la cámara, de este solo podían ser apreciados los siguientes rasgos. Una larga capa negra y un sombrero de copa.   En ningún momento se pudo ver los rasgos del responsable.   El director pensó que algún bromista del club de teatro era el autor de todo; y que seguramente todo no era más que una broma macabra.    Pero Aome ya estaba segura de quien era el responsable de todo.


Tristemente no todo terminó ahí para ella, ya que diariamente a partir de ese día; era dejado un regalo similar.    En ocasiones solo eran flores marchitas, pero en ocasiones eran animales muertos y disecados.   Era algo terrible y aterrador.


Tanto así, que llego el momento en que ella ya no fue más a la escuela; esto en un mutuo acuerdo con las autoridades escolares, que aceptaron que a partir de ese momento ella ya no acudiría más a clases y tan solo presentaría exámenes y con ello aprobaría el año escolar.


Las autoridades no tenían idea de quién era el responsable de todo; los regalos no tenían huellas o pistas de que los llevaran hasta el autor y por más que estudiaban los videos, no tenían una explicación de cómo lograba burlar la seguridad de la escuela para ir a dejar tan macabro regalo. Aome por su parte se sentía desmoralizada.


— ¡Hija...! — La madre de Aome trataba de razonar con ella, ella se negaba a dejar de ir a la escuela — Entiende que es lo mejor por ahora.

— Pero mamá, estoy haciendo precisamente lo que quiere; ese maldito desea que yo me atemorice y me separe de lo que es importante para mí.   Lo estoy dejando ganar; no puedo dejar que gane.

— Estarás más segura aquí, con nosotros.

— ¿Y si ahora empieza a dejar esas cosas aquí?

—...

— ¡¿Y si Sota o tú o el abuelo salen lastimados por culpa mía?!

— ¡Eso no sucederá! — El abuelo de Aome repentinamente se metió en la plática. — He puesto talismanes alrededor del templo, ninguna fuerza maligna podrá traspasar los límites del terreno.

— ¡Mamá, dejaron un regalo en la puerta de entrada! — Sota solo se acercó a ellos llevando un regalo envuelto cuidadosamente, lo más raro era que los listones que lo decoraban eran todos negros.

— ¡Oh no! ¡Mis talismanes! — El abuelo solo comenzó a poner expresión de derrota, mientras la madre de Aome y su hermano solo suspiraban.    Aome se armó de valor y tan solo comenzó a abrir el regalo.  Pero fue detenida.

Un Amor a Través Del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora