Después de mi horario de clases me preparo para mi caminata hasta mi casa, hago tres cuadras escuchando música con auriculares y luego me los saco cuando entro en barrio peligroso, en él viven la mayoría de los presos sueltos o algunos que fueron condenados a servicios sociales. Aunque me encantaría saltarme este barrio, mi casa esta a una cuadra si paso por acá, y si lo salto estoy a 4, en conclusión, para una vaga como yo, es mejor pasar por acá, si total, sé defenderme bien. Llego a la cuadra de mi casa y logro ver que en la cuadra de enfrente hay unas compañeras mías, intento pensar rápido que hacer pero para cuando lo logro, una de ellas me ve y les dice a las otras que se acerquen. "Bien Alexia, se están acercando un grupo de huecas, para lo que sea que hacen con la gente que no les cae bien, tan sólo corre hasta la puerta de tu casa, abre la puerta, entra y cierra la puerta, es simple y puedes hacerlo". Corro pero una de ellas ya estaba cubriendo la puerta, ésta me agarra y me clava sus uñas de gata en el brazo, intentando retenerme para que llegue el resto, me muevo bruscamente y logro zafar del agarre, otra del grupo llega corriendo y me agarra un mechón de pelo, pero le agarro la mano haciendo fuerza y ella del dolor me suelta, -¡Agarren a esa estúpida! Se las verá con nosotras por meterse con Alan- la miro intrigada, -¿Alan? ¿Quién es ese?-. Terminan de llegar las otras chicas del grupo y una por una empiezan a agarrar mis ropas, mi bolso y mis cosas de dibujo, incluso lograron tirarme al suelo. Alcanzo a golpear a alguna pero son demasiadas y no puedo librarme. -¡Hey! ¡Ustedes!- las chicas miran hacia donde provenía la voz, yo simplemente diviso el rostro del chico que me pidió direcciones hoy en la escuela, -¡Aléjense de ella!- el chico se acerca y las espanta, ahora que lo veo mejor no es muy intimidante, es delgado, de altura media y con rostro tranquilo, incluso ahora que está enojado, me sorprende que esas chicas se hayan ido, pero me alegro. El chico se acerca a ayudarme, estaba hecha un desastre, tenía el pelo desordenado, el maquillaje corrido y mis libros y cosas de dibujo estaban todas por el suelo, -Déjame ayudarte- me da la mano para que me levante pero no la tomo y me levanto sola, -E-Está bien... Supongo- él se agacha a recoger mis cosas y me las da, -Gracias supongo- el chico se ríe, -¿estabas en un gran aprieto no? Me alegra haberte ayudado, no sabría que te hubiera pasado si yo...- lo interrumpo, -YO NO NECESITO AYUDA DE NADIE ¿ENTIENDES? Hubiera terminado bien igual, pero ahora gracias a ti, se van a burlar sobre mi "guardespaldas"-, el chico cambia su expresión a triste, -L-lo siento, no quería causarte más problemas-. Observo mis cosas detalladamente y veo mis dibujos completamente destrozados y embarrados, -Eso no se ve bien...- lo miro de nuevo furiosa, -¿SE PUEDE SABER POR QUÉ SIGUES AQUÍ?-el chico se asusta y se aleja un poco, -P-perdona no quería molestarte, espero que puedas resolver lo de tus dibujos...- diciendo eso se va corriendo. Entro a mi casa y me voy a duchar y cambiar, "oh por dios que día más raro, odio tener que lidiar con gente metida y encima ese chico se cree que me ayuda haciendo... LO QUE SEA QUE HAYA HECHO, y encima mis dibujos terminaron hechos un desastre... bueno, será hacerlos de nuevo". Termino de organizarme y almorzar, y me preparo para hacer todos los seis dibujos que rompieron, lamentablemente uno no era hecho por mí sino por mi único amigo que se fue a vivir a otro país y no creo que sea muy lindo después de 5 años teniéndolo bloqueado hablarle sólo para pedirle otro dibujo, sería demasiado desubicado. Me pongo a trabajar y luego de varias horas de esfuerzo y dedicación, no logro hacer nada, -¡¿Ya es de noche y ni siquiera pude hacer un boceto?!- me alejo un poco de mi mesa de trabajo y suspiro, -bufffff, bueno... supongo que no tengo la inspiración o ando muy perdida en cualquier otra cosa...- por instantes pasa por mi mente el encuentro con aquel chico, "le estoy dando demasiada importancia a eso, pero creo que mi conciencia intenta decirme que me disculpe por gritar a la persona que me ayudó por primera vez en una situación así..."
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Algo distinto a lo común
Romance¿A veces no se cansan de ver siempre historias de romance que repiten ámbitos o frases? En este caso la historia es distinta a lo que se suele leer... Empezamos en la vida de Alexia, una chica ruda, floja y de bajas notas, una chica que no se sonro...