Capítulo 9: "Mis fuentes"

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Me siento junto a ella y comienza a hablar, -Tu eres Alexia ¿No?, los chicos me hablaron de tí y desde ese momento quise conocerte- asiento con la cabeza, -Yo soy la hermana mayor de ellos, Catalina, soy mayor de edad pero sigo viviendo con ellos porque soy la única que sabe cocinar algo comestible- me río ante su comentario, -Espero que te pueda ayudar con lo que quieras, si necesitas algo tan sólo ve a la puerta que está al frente de la tuya, - se me acerca un poco y me susurra, -Y si no puedes lidiar con estos molestos hombres yo ya tengo un lugar de escapatoria, - se asoma alguien de la cocina, -¡Yo escuché eso!-. Luego de unos minutos de charla con Cata, todos nos vamos a dormir y yo me preparo para hacerlo, una vez que ya estoy, pongo la alarma, me acomodo y duermo profundamente, sueño con el momento de discusión con mi madre, hace años que he querido decirle todo eso, pero nunca me atreví a hacerlo por las consecuencias que esto traería, al final del sueño no me ayuda Kirian sino Catalina y termina en casi lo mismo que en la realidad, lamentablemente despierto por el sonido de la alarma. -¡Buenos días Teo!- bajo al comedor para desayunar, cuando llego ya estaba la mesa preparada con variedad de comidas, -No sabía qué tomabas en la mañana asi que preparé de todo lo que podía y sabía hacer- me doy vuelta al escuchar la voz de Kirian, -¿No cocinaba Cata?- se acerca Alan de la cocina con una botella de agua, estaba todo sudado y con ropa deportiva "Debe salir a correr por las mañanas, algo más que yo no hago pero debería", -En realidad ella cocina el almuerzo y la cena, pero los desayunos y meriendas los preparamos con Alan, ya que no son comidas elaboradas las que normalmente se comen en estos horarios- asiento con la cabeza y me invitan a sentarme a comer, normalmente casi ni desayuno, solo de camino al instituto compro un alfajor o una barrita de cereal, sinceramente sé que está mal y tengo que desayunar bien pero... me da vagancia preparar algo mejor, -¡Está delicioso!- he probado un café con galletas que parecían caseras y un jugo de naranja, -Me alegro que te guste- Kirian se sienta a un lado mío y Alan en el otro, yo estaba en la esquina de la mesa, el lugar que siempre me asignan. Una vez que terminamos de desayunar nos preparamos para el instituto y salimos, en el camino admiradoras de Alan lo han parado y él nos ha hecho esperarle, en una de las veces veo que una de los grupos que lo para es de las que me molestaron ayer, apenas me vió se alejó un poco de Alan, "Asi se hace bitch", cuando entramos al intituto todas las miradas van hacia nosotros, -Creo que se nota mucho que llegamos juntos...- cuando Kirian pensaba responderme alguien tironea de mí para hacerme entrar a un aula, -¿Q-ué?...- me interrumpen, -Voy a ser directa, soy quien organiza el sitio web de chismes del inti, supongo que se nota que no pasa desapercibido el echo que hayan llegado ustedes juntos, ¿Tienes algo que ver con los nuevos? ¿Eres la novia de alguno?- la detengo antes de que siga preguntando, -No te interesa y no te pienso responder, asi que si me disculpas debo irme- cierro la puerta con fuerza antes de que la chica pueda decir algo, -¡Hey tu! ¿Acaso no te bastó el golpe de ayer que encima necesitas otro?- sin que me diera cuenta un grupo de chicos me había arrinconado, detrás de ellos estaba Vanesa con cara de "preocupada", -¿Qué pasa? ¿La obra de teatro que les hizo esa los emocionó? ¿Tanto en la historia se metieron como para creer que está basada en hechos reales?- recibo un golpe en el estómago, -No, sólo que una noticia nos llegó a los oídos y teníamos que darte una lección, para que veas que no puedes mover el mundo comlo te plazca- esa frase me desconcertó, -Esperen por favor- sin previo aviso me hago lugar entre dos chicos y paso, caminando hacia mi taquilla, la abro y encuentro algo de mucha ayuda, -Sabía que tenía una copia, no se porqué pero su frase me hizo acordar esto, gracias por su ayuda- entre mis manos tenía las llaves de mi hogar, ahora podría entrar a recoger algunas cosas o incluso cambiar la cerradura y que no pueda entrar la otra. Sin darme cuanta me había ido hacia un aula, saco de mi bolso mis cosas de historia y hago los deberes que no hice en el tiempo debido, -Ajj, odio historia, nunca logro retener fechas o hechos ¡Y ni siquiera sé para qué me servirá saber quién creó la primera corbata!-, tiro mis libros a la mesa rindiéndome por completo, -Quizá te pueda ayudar, yo era bueno en historia- en la puerta del aula estaba apoyado Alan, -¿Te libraste de tus pequeñas fans?- Alan suspira y se sienta al lado mío, -No paraban de preguntarme porqué estaba contigo o si eramos pareja- pasa su brazo por detrás de mi espalda, -¿Podrías darme mi espacio personal por favor? Necesito concentrarme y hacer esto antes de que comienza la...- el sonido del timbre me interrumpe, -Mierda- por la puerta entran todos los alumnos, Alan se queda sentado al lado mío y aunque le mande indirectas de que prefiero estar sola él se queda sentado ahí. Al terminar la clase y ser retada por el profesor al no hacer la tarea, salgo al receso a descanzar un poco, me siento debajo de un árbol del patio y me relajo, -ufff, que lindo descanzar a veces así...- pero lamentablemente mi paz acaba muy pronto, ¡¿Se puede saber que haces con tu vida pedaso de estúpida?!- abro los ojos tranquilamente ya sabiendo que enfrente mío estaba el grupo de zorras, -La vivo y ya- Vanesa inconforme con mi respuesta hace que me levante tirándome del pelo, yo tranquilamente le saco mi pelo de sus manos y me vuelvo a recostar en el pasto, -¿Podrías correrte? Tapas el sol- Vanesa furiosa patea el árbol en el que me apoyaba, -Si querías hacerte la diva con todo este tema, ya sé que le pediste a un chico que me golpeara para que no pueda jugar más, mis fuentes me dicen todo- imito la chillona e irritante voz de Vanesa en la última frase, -¿C-cómo sabías eso?- me levanto y quedo cara a cara con ella, -El mísmo chico al que se lo pediste me lo dijo-.

Algo distinto a lo comúnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora