Ella está gorda

cuando prometiste...

Ian rápidamente tocó la puerta de la casa de Dove, estaba molesto, si era una broma no era graciosa y no quería oír excusas.

-Oh, decidí no seguir con la dieta, estoy bien con mi cuerpo ahora...

-¡Te voy a rebanar en tiras!

Estaba molesto, y no era para menos, estaba por lograr sus objetivos, tendría ese espacio en el programa y ahora sin más ella dice que no.

-¿Que demonios Dove?

-no, perdóname...yo realmente hice esto por mamá, pero en serio se que ella entenderá...

-¡excusas! ¡Ella tuvo sus razones para pedirme ayuda, y esa era tu mala forma! Odio que las personas abandonen lo que se proponen en un inicio, estabas tan determinada y ahora...tiraste la toalla.

-se que no lo entiendes por que es difícil para ti, pero no importa cuanto lo intente, en el pasado hice dietas y rebotaba mi peso sin poder evitarlo! Y si es por algo, esto es lo que soy, soy así, y así soy perfecta...

-no me jodas -está vez su voz era sería y expresaba realmente coraje- que mala excusa es esa...son estupideces

-¡oye!...¡No te permito que me hables así!

-¿Y qué harás? ¿Defenderte? ¿O solo lo harás a medias? Iniciaste algo y te rendiste apenas agarrando ritmo,me decepcionas...de verdad confiaba en ti

-¿Confiar en mi? No seas hipócrita -lo miró fijamente y con el seño fruncido- tu sólo querías el jodido espacio en ese programa...¿Hacerlo por mi? No me hagas reír...

Ian se quedó callado un segundo, entonces cerró los ojos y respiró hondo

-no...No solo fue eso, mi tía dijo que tu salud no era todo lo que le preocupaba, m dijo que te era difícil que tuviese el autoestima de una chica feliz, se preocupaba por que creía que tenías problemas para sentirte bien contigo, y yo quería demostrar, quería saber que se podía hacer magia con una dieta sana y esfuerzo.

-Ian...-tragó saliva- no estoy sola, conozco más personas como yo y viven una vida normal, no soy un bicho ni nada, no soy una cosa, también puedo ser como todos, y no necesito cambiar.

Ian sentía la sangre hervir, estaba molesto, ella había dicho que estaba dispuesta, que tenía la determinación, vio el brillo en sus ojos cuando se decidió, pero ahora esta Dove frente a él era diferente, no la reconocía.

-bueno, esa es tu decisión... entonces ya no me necesitas aquí -tomó su chamarra y salió de ahi-

-no, Ian...espera, no te estoy pidiendo que te vallas de mi lado...

-lo siento, pero yo no puedo verte ahora -salio de ahí pasando de largo a su tia, además al salir vio a una chica con cabello de color rosa.

-ah, hola...-antes de que pudiese decirle algo Ian se fue rápido de ahí, estaba frustrado, odiaba a la gente que se conformaba.

-Ese tipo de personas...las que abandonan todo -presiona sus labios entre sí y se fue a ver qué hacia-

-¿Eh? ¿Que pasó?

-oh, ¿eres amiga de Dove?

-si, está arriba, enseguida la llamo, pasa

Justo antes de que la madre cerrará la puerta otra chica llegó, era igual que Dove, tenía el cabello más corto aún, como a la altura de el cuello y lacio, un poco más gordita que Dove, aunque ella si usaba ropa de tirantes.

-disculpa, ¿Aquí vive Dove? Soy una amiga y vengo por ella para irnos al centro comercial...

Julissma estaba extrañada, ella creía que Dove y ella saldrían juntas, ¿Quien era ella?