Brothers? --> Yoonmin

XII

- Creo que tu madre es un poco ingenua. - se levantó de la cama y se acercó al rubio lentamente, intimidándolo. - Podría ser una persona que viniera a golpearte y con sólo decirle que soy tu amigo me dejó pasar. - rió. - Lamentablemente para ti soy una de esas personas.

- Na-Namjoon, a-aléjate, por favor. - susurró mientras daba unos pasos hacia atrás.

- ¿Crees que he venido hasta aquí para sólo asustarte? - dijo divertido.

Jimin siguió retrocediendo hasta que su espalda chocó contra la puerta de su habitación.

- Ve-Vete, por favor. - sus ojos se cristalizaron y Namjoon soltó una carcajada.

- ¿El marica va a llorar? - sonrió y se acercó, acorralándolo contra la puerta. - Llora, grita, suplica, haz lo que quieras, pero de ésta paliza no vas a escapar. - sonrió maliciosamente.

El pequeño cerró sus ojos dejando las lágrimas salir al sentir el puño del chico en su estómago. Namjoon lo tomó de su remera y lo estampó fuertemente contra el suelo, sonriendo al ver las gotas de agua salada que Jimin dejaba salir de sus ojos silenciosamente.

- Te mereces esto y más, puto marica. - lo pateó varias veces.

Jimin se encogía ante sus golpes, esperando a que terminara de una vez. Intentaba evitar los sollozos, sabía que si Namjoon lo oía sollozar le seguiría pegando hasta estar del todo satisfecho.

- Niño, olvidaste tu mochila en mi auto. - el pelinegro entró a la habitación sin pedir permiso primero. Tenía la mochila del menor cargada en su hombro.

La sonrisa que Yoongi poseía se borró rápidamente al ver aquella triste escena. Apretó sus puños con fuerza, logrando que sus nudillos quedaran blancos mientras miraba con furia a Namjoon. Sin dudarlo se acercó a él y le propinó un gran golpe en su nariz, provocando que cayera al suelo por el impacto. El tatuado se lanzó a él y le golpeó el rostro reiteradas veces. Jimin se retorcía en el suelo por los golpes que Namjoon le había dado mientras los veía sorprendido.

- ¡Así que eras tú, hijo de puta! - su nariz y labio comenzaron a sangrar. - ¡No vuelvas a acercarte a él, Namjoon, o voy a matarte!

El rubio frunció el ceño al escuchar que Yoongi lo llamaba por su nombre, ¿Acaso de conocían? ¿Cómo?

- Yo-Yoongi, detente. - suplicó Namjoon.

- ¡Siempre supe que eras un imbécil, desde el primer momento en el que te vi! - lo golpeó nuevamente. - ¡¿Sabes todo lo que sufrió Taehyung por tu culpa?! ¡¿Y ahora Jimin?! ¡No voy a permitirlo!

El pequeño se levantó del suelo lentamente mientras llevaba su mano a su estómago, dolía. Se acercó al tatuado y lo tomó de los hombros, para que se detuviera y Yoongi al sentir su tacto paró en seco.

- Yo-Yoongi, déjalo. - murmuró en su oído y el pelinegro se volteó para verlo con reproche.

- Él te ha dañado, Jiminnie. No se lo puedo permitir. - miró a Namjoon con rabia. - Debe aprender a no meterse contigo.

- Ya no vale la pena. - volvió a susurrar y ésta vez el chico lo escuchó y se alejó del otro, dejándolo en el suelo.

- Escúchame con atención, idiota. - se refirió a Namjoon. - Vuelvo a verte cerca de Jimin y lo que acaba de pasar no es nada a comparación de lo que voy a hacerte. - lo tomó de la camisa y lo levantó del suelo descuidadamente. - Y sí, tómalo como una amenaza. Ahora, vete.

Namjoon asintió y como pudo salió de la habitación del rubio.

- Yoongi. - Jimin lo llamó. - Mi madre no puede verlo en ese estado.