Maratón 2/3

4.5K 323 14
                                    

Capítulo 30

El estrés que sentí cuando Sara se casó se multiplico unas mil veces ahora en mi boda a pesar de que Sara se había encargado de ella en la mayoría de las cosas, yo solo decía sí o no. Lyra y Alana también fueron de mucha ayuda y por lo tanto damas de honores pero la principal era Sara. Mi madre y la madre de James se habían hecho buenas amigas y resultaba que mi padre y el de James habían tenido conexiones de negocios anteriormente y ya se conocían y se llevaban muy bien. Lyra estaba embarazada de cinco meses pero apenas y se le empezaba a ver barriga, sería un niño. Sé que serán buenos padres.

Estamos en la cena de ensayo y me recuerda tanto a cuando conocí a James. Ese pedante chico de actitud, ahora mi prometido. Como todo ha cambiado ¿no? Como me dijo Derek una vez mi vida al igual que en las películas el novio alquilado se ha convertido en mi prometido. No pude haber tenido mejor historia de amor. Claro que esta tal vez no tenga el final de cuento de hadas. No puedo decir que Dios está siendo injusto conmigo. He tenido una vida perfecta y viviré hasta cuando él decida. Sé que mi misión era ser la felicidad de James y aunque sea egoísta por lo que sucederá quiero vivir estos días siendo la mujer más feliz del mundo. Iríamos de luna de miel una semana y James se iría a la próxima a Italia.

-Claire ¿estas lista?

-Sí, ya salgo

Termine de ponerme mis zapatos de tacón y salí al lugar donde mañana se celebraría la cena de bodas. Sara apenas me había dejado ver la decoración donde celebraríamos la boda ya que era “sorpresa” pero sabía que debía ser hermoso. Lo único que sabía era que iba a ser en una terraza con vista al mar. En el salón ya estaban las personas que habíamos invitado. James saludaba a algunas. Se veía guapísimo con su traje Armani azul marino, camisa blanca y converse a juego. Fue su única condición “No usare esos horribles zapatos largos que parecen lanchas” y no quedo de otra. A pesar de tener veinte años se comportaba como un niño pero me encantaba. Además un niño no tendría ese trasero. En cuanto me vio se dirigió a mí.

-Te… te ves hermosa mi reina

-Gracias, quisiera decir lo mismo de ti pero te verías mejor sin ropa- soltó una carcajada

-Espera a la luna de miel y veras

Nos dirigimos a la mesa principal junto a mis amigos y familiares más cercanos. Los padres de Damien junto a él se encontraban allí y fui a saludarles.

-Claire preciosa

-Señores Mason me alegro de verlos ¿Cómo la están pasando?

-De maravillas, esto es hermoso- dijo la señora Mason señalando todo el lugar.

-Todo ha sido obra se Sara

-Me lo imaginaba

-Te deseamos mucha suerte, Claire- dijo el señor Mason

-Muchas gracias de verdad señores Mason

Me aleje de allí y fuera del salón a través de las ventanas logre ver a alguien que jamás pensé. Me dirigí hacia afuera.

-¿Husmeando?

-Cla… Claire se supone que nadie me vería.

-Pues fallaste

-Quería… pedirte perdón. Sentí tal odio que me cegó y tienes razón he sido una perra toda mi vida pero eso cambiara.

-Tranquila Sasha, te perdono gracias y creo que mejor te debo dar las gracias.

Quería estar segura de que nadie nos estuviera husmeando así que lo que tenía que decirle lo dije en un susurro apenas audible pero ella si lo escucho. Su expresión era de horror y su mirada se dirigió a un punto dentro del salón a través de las ventanas. James.

-¿Lo sabe?

-No, eres la primera, todos están tan felices por mí, por mi boda. No quiero que me vean con lastima. Seré fuerte mientras pueda

-Te admiro, Claire.

Me abrazo sollozos no tardaron en escucharse y yo no tarde en seguirla. Era la primera vez que lloraba luego de haberme enterado y lo estaba haciendo con la persona que menos me esperaba

-¿No… no hay alguna posibilidad para ti?

Negué con la cabeza.

-¿Y cuándo se lo dirás a todos?

-James se ira en una semana a Italia. Si le digo no querrá irse y no quiero eso.

-Claire lo siento tanto

-Nada de eso, no es momento para llorar. Ahora es mi momento, ven entra conmigo.

-No creo que nadie me quiera ver allá dentro.

-Estarás cerca de mí, tranquila.

Asintió tímidamente con la cabeza y nos dirigimos adentro. Los que conocían de la situación no tardaron en llegar a nosotras para preguntar qué demonios hacia ella allí. A lo que yo conteste “viene conmigo” nos fuimos a sentar a la mesa principal. Hicimos el tan esperado brindis. Los padrinos de la boda que son Sara y Tyson dirían unas palabras. Luego James y yo nos diríamos algunas en un discurso según el protocolo. Ya lo tengo todo escrito. La cena paso en paz, vi que Sasha y Damien volvían a hablar, sé que a pesar de todo Damien le tiene cariño y ella a él. Espero que puedan ser felices. Luego de cenar fuimos todos a la pista de baile. No quisimos que nos hicieran despedidas de solteros a ninguno así que nos pasamos toda la noche bailando. A eso de las doce de la noche Lyra y Sara me apartan de James diciendo que no era de buena suerte que el novio y la novia duerman juntos la noche antes de la boda. Genial.

Novio de Alquiler (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora