Jasmine estaba a punto de caer por el cansancio, las venas marcadas en sus manos hacían que se viera más delgada de lo que realmente era. Apretó los dientes y volvió a mirar el techo del otro edificio.
—Tengo que hacerlo.
Se dijo por lo bajo mientras jadeaba levemente y se relajó un momento apoyando su peso en los talones. Se levantó y puso un pie detrás del otro, gruño un poco y comenzó a correr. Sus pies se movían rápidos y ligeros, como las piernas de un ágil venado y sus manos se apretaban en el movimiento continuo. No dudo ni un momento, eso solo la hubiera matado. La duda era su peor enemiga y no dejaría que precisamente ella le arruinara todo un día de intenso trabajo.
Sus pies se elevaron sobre aquel oscuro callejón. Un gato que se encontraba buscando comida entre las cajas de basura en el callejón, se erizo al escuchar aquellos pasos sobre él. Pero paso en un instante, como un rápido vuelo.
Sus pies frenaron con el cemento de aquella terraza y ella flexiono su cuerpo y lo rodo unos 2 metros. Al terminar con una rodilla en el piso, algunos mechones de su cabello lacio y oscuro se pusieron frente a sus ojos. Aun tratando de relajar sus latidos y respiraciones esbozo una brillante sonrisa.
Se paró y volteo detrás de ella para encontrar el techo del otro edificio en el que estaba parada, alzo los brazos y grito triunfante. Le importo un demonio que alguien la escuchara, grito y rió en voz alta, salto un poco aun estando exhausta, cuando escucho una puerta abrirse. Un señor con un traje de seguridad salió golpeando una cajetilla de cigarros, pero paro en seco al ver a la figura de una persona saltar hacia las escaleras de emergencia.
—¡Hey tú! ¿Qué crees que estás haciendo?
Ella ya había iniciado su presuroso descenso cuando escucho la voz y los pasos de aquel hombre acercarse.
—¡Vuelve aquí!
Apenas llegaba al inicio de la escalera cuando ella salía disparada por aquel callejón. El gato se escondió entre las cajas viendo aquella chica con la gorra de su suéter caer y dejando a la vista el largo cabello que tenía junto con su piel clara que brillaba con el sudor que mostraba su arduo trabajo. Corrió por aquellas calles llenas de personas en traje y trato de esquivarlas pegándoles levemente en los hombros.
Corrió tan rápido, incluso mientras trataba de amarrar su cabello en una coleta con una liga, pero cuando intento frenar al ver a un chico corriendo hacia ella volteando hacia atrás de él, no pudo evitar pegar contra aquel cuerpo. Por el impacto la gorra que llevaba el chico cayó al lado de la chica y él miro confundido la liga que había aterrizado en su pecho, la tomo y la levanto a la altura de la mirada de ella para después mirarla con la misma curiosidad. A ambos los golpeo el recuerdo de la razón por la que corrían y voltearon detrás de ellos para mirar a aquellos hombres de seguridad a lo lejos que se abrían paso por la multitud.
—Shit
—Carajo.
Jaz tomo la gorra de él y en cuanto volteo vio que él ya se había parado y le ofrecía la mano. Sin pensarlo dos veces tomo su mano y el la jalo de cierta manera brusca que sus cuerpos volvieron a chocar con un poco menos de intensidad. Jaz frunció el ceño pero sin detenerse se adentró al callejón que tenían enfrente y subieron por unas escaleras. En cierto momento el chico se preocupó de que ella no pudiera seguir la rapidez de sus saltos pero en cuanto volteo sintió como su cuerpo le rozaba para pasar por encima de él mientras se agarraba de un tubo de aquellas oxidadas escaleras y se impulsaba. Parpadeo crédulo por un instante y dejo salir una risa irónica para después recuperar la velocidad de sus movimientos.
Cuando llegaron a la terraza de aquel restaurante, el camino a la esquina del frente para ver como ambos hombres seguían caminando apresurados sin saber a dónde ir. Con la respiración aun un poco agitada sonrió y volteo a ver a Jasmine quien apoyaba sus manos en sus rodillas tratando de recuperar el aliento.
—¿Estas bien? —Le pregunto acercándosele.
—Hubiera estado mejor si no hubiera topado contigo. —Le dijo sonriendo.
—Lo siento, tenía prisa —él le tendió una mano mientras sonreía con un poco de soberbia.
Ella tomo su mano y el la atrajo hacia su cuerpo. Metió su mano a la sudadera de la chica mientras la miraba por debajo de él. Ella sintió su aliento rozarle la frente y abrió los ojos sin dejar de mirar su cuello. Al final el chico saco su mano de la sudadera junto con una cartera.
—¿Dónde ha quedado el honor entre ladrones?
Ella abrió la boca dejando salir su aire en una sonrisa irónica. Volvió a acercarse a él y metió su mano a la bolsa trasera del pantalón del chico y saco una pequeña bolsita.
—Estoy cien por ciento segura que tú no lo tienes. —negó levemente con la cabeza.
Él se encogió de hombros sin dejar de sonreírle. Ella mordió levemente su labio inferior en una sonrisa un tanto atrevida y empujo a aquel chico.
—Soy Hanbin.
Dijo al momento que veía a la chica alejarse de él. Ella paro y volteo a verlo con el ceño fruncido.
—Algunos me llaman B.I
—Así que tú eres B.I —alzo una de sus cejas
—Así que me conoces.
Hanbin se sacudió un poco su camisa y ella rió al notar el deje de soberbia en su voz.
—Soy la hermana de Yunhyeong. Solo por eso te conozco.
—¿Yunhyeong? —frunció el ceño. — ¿Eres Jaz?
—Lo siento me tengo que ir.
Ella le lanzo su gorra y mientras él la atrapaba ella descendió con rapidez por las escaleras. Él corrió a la orilla del edificio y la vio ponerse la gorra de su suéter y caminar un poco más tranquila hacia la calle. Sonrió y miro la liga que se había quedado en su muñeca.
—Jaz —dijo en voz baja y se sentó recargándose en una pared.
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Jasmine
FanfictionJasmine es una chica con una pasado lleno en humo y horror, pero no esta sola, tiene a siete chicos hambrientos por justicia y venganza. Ella solo quiere pintar un mejor y tranquilo futuro junto con ese chico. Fuente de inspiración: Canción "Jasmin...