Capítulo 11

415 48 74
                                    

Luhan y los entrenadores estuvieron molestos con KyungSoo durante un tiempo,  había llegado tres días después de lo acordado, una falta que no dejarían pasar. Fue suspendido por un mes en el que debía entrenar día y noche, teniendo más trabajo de lo normal, sin horas libres ni días de descanso, tan solo media hora para cada comida y las necesarias para tener un buen dormir. No tenía tiempo ni para mirar el teléfono pero se las arregló para escribirle a Kris y a Jongdae cada noche un par de mensajes antes de caer inconsciente. Pasó una semana desde que volvió a Seúl, era domingo por la noche mientras terminaba de limpiar el piso de los vestidores, tarea extra de castigo, dejó el cepillo a un lado y se sentó un momento para respirar, unos nudillos tocaron la puerta haciendo que saltara en su asiento debido a la impresión, pero fue aún más grande su sorpresa cuando vio a Jongdae de pie frente a él.

–Veo que se toman muy en serio esto de los castigos.

–Jongdae, ¿qué haces aquí? –Kyungsoo estaba muy sorprendido, ni si quiera sabía cómo es qué había conseguido entrar siendo esa un área restringida.

–Dijiste que estabas trabajando muy duro, así que vine a levantarte un poco el ánimo. También compré bebidas. –Alzó una bolsa que traía en las manos y se acercó hasta sentarse a su lado.

–¿Cómo lograste entrar? No me dijiste que venías a Seúl.

–Soy un hombre de contactos –sonrió y abrió una de las bebidas para entregársela–. Claro que te lo dije, el último día que nos vimos en tu casa, dije que iría por ti.

Kyungsoo bebió agradecido con la sensación de frescura de la bebida fría, tomó varios tragos profundos antes de resoplar.

–No sabía a qué te referías.

–Esa era la idea.

Kyungsoo se terminó la bebida y agradeció al recibir otra–. ¿Y tú no tienes trabajo?

–Soy mi propio jefe.

Kyungsoo se le quedó viendo sin decir nada.

–Aunque probablemente cuando regrese también me toque limpiar el resto de ni vida.

Ambos rieron. Kyungsoo intentó hacerle decir cómo había logrado entrar, pero Jongdae era una tumba y no hizo más que repetir que de verdad era una persona con contactos. Jongdae tampoco lo dejó volverse a poner de pie, terminando él mismo con lo que quedaba por limpiar mientras le contaba como había sido su charla al disculparse con Taemin y Sulli por la pelea, según Jongdae aquello había sido como si Jongin y él fueran una pareja divorciada explicándole la situación a su hijo adolescente.

Cuando todo estuvo listo Jongdae lo llevó en su auto hasta su edificio. Para Kyungsoo era un poco extraño que se tratarán como pareja aún cuando no habían hablado nada de salir o ser novios, aunque no le incómodo ni un poco cuando Jongdae sujetó el volante con una mano y con la otra tomó la suya, se sentía tan correcto y natural. Subieron hasta su apartamento, Kyungsoo solo tenía en mente darse una ducha, así que dejó que Jongdae conociera el lugar por su cuenta mientras él se encerraba en el baño.

–Si tienes hambre puedes buscar en la cocina, allá es la sala, siéntete libre de hacer lo que quieras, me daré un baño rápido y vuelvo.

Jongdae asintió y caminó un poco observando el lugar, no era muy grande pero sí elegante,  gritaba dinero en cada rincón, todo muy impersonal sin fotos o cosas que caracterizaran a Kyungsoo tan solo adornos, como si el jugador no hubiera querido marcar aquel lugar como suyo, lo único personal a la vista era una pared decorada con medallas y trofeos, leer cada placa lo distrajo lo suficiente hasta que el otro chico volvió. Kyungsoo se vistió con ropa cómoda y caminó hacia la cocina alborotando su cabello húmedo.

Aceptación [Chensoo-yaoi] SecuelaWhere stories live. Discover now