Prólogo

137 17 6
                                    

Recuerdo que peleamos un día miércoles, recuerdo que teníamos muchos días de estar así, pero muy dentro de mí a pesar de que me trataras de lo peor tenía la confianza que ibas a cambiar y que todo iba a ir mejor, incluso peleando y cuando te reclamé y te pedí la verdad me seguiste mintiendo, no sabes lo miserable que me sentí.

Siempre era yo el que te decía que se acabó, pero siempre era yo el que te esperaba, esperaba que después de tus errores me dijeras que te habías dado cuenta que te habías equivocado, siempre te estaba esperando y nunca me iba porque yo sabía que nunca iba a poder vivir sin ti, nunca iba a encontrar a alguien como tú, con tu misma forma de reír, de llorar, de abrazar, nadie iba tener tu misma voz o tu misma mirada cada que te enojabas, nadie iba a tener ese mismo sabor de piel, ni nadie iba a ajustarse exactamente a mis brazos, nadie iba a besar como tú, ni nadie iba a hacer el amor como tu lo hacías, nadie iba a tener tu nombre y tu manía de hacer volar mis mariposas con un mensaje o una palabra bonita, para mi nadie iba a ser tú, porque nadie me había hecho sentir de esta manera, nadie me podía hacer sentir tantos sentimientos y hacerme cambiar de un estado a otro en segundos, nadie iba a tener tu manera de celarme o tu manera de enojarme, nadie iba a hacerme ponerle tantos apodos, sobrenombres cursis, sabía perfectamente que a nadie iba a poder llamarle igual, ni podía hablarle con tal seguridad ni hacerme sentir bien en sus brazos. Eras la única, primera y última por la cual yo amé descontroladamente, desenfrenadamente, alocadamente, sinceramente, inocentemente y lo peor de todo confiadamente, siempre esperaba que cuando te enojaras me dijeras lo que de verdad pensabas de mí y no sabes cuantas veces me decepcioné de saber que a pesar que te entregué todo y hacía de todo por hacerte feliz seguía sin ser lo que esperabas, sabía que un desastre como yo no se merecía a alguien como tú, pero ¿Tú merecías a alguien como yo?, que a pesar que le hicieras lo que le hicieras, dijeras lo que le dijeras siempre iba a estar ahí? Y escucha... Siempre estará ahí a pesar de todo.

Recuerdo que en nuestra última discusión me mentiste de nuevo y en mi afán de demostrarte que estabas convertida en alguien de quien no me había enamorado me demostraste que llegué al punto de amarte tanto que dejarte ir y eliminarte de todas partes (Virtualmente hablando) para no volverte a escribir, pero no contaba con que un lapicero y un papel también servían para escribirte y decirte lo que sentía.

Y fue por eso que te empecé a escribir cartas que tal vez no leas nunca, porque en cada una lleva un trozo de mí, sé que nunca las leerás porque están bajo el colchón de mi cama esperando que se desintegren con el paso del tiempo.

Recuerdo que te dije que te fueras que no quería volver a saber nada de ti, que no quería verte más, recuerdo que mi decepción disfrazada de enojo quiso odiarte, pero no pudo, no puedo y no podré, el amor para mi nunca deja de latir en un corazón, no olvidamos a una persona que queremos de verdad, solo la superamos, y quizá, yo no sepa como hacer eso porque me he acostumbrado y encariñado a tu manera tan ¿Falsa? De quererme o tal vez amarme, quisiera que te dieras cuenta que a pesar que me equivoqué en algún pasado, el pasado ahí se quedará, y ese fue tu problema, pensar que lo que un día te pasó siempre iba a pasarte, nunca pudiste ser madura e intentar amar sin miedo como yo te amo, pero te entiendo, mírame ahora, estoy llorando con cada letra que sale de mí, no sé si es sano o es justo, pero si sé que es lo que siento, incluso dijiste que yo tuve la culpa, que yo te lastimé y que sola te dejé, pero no podía seguir muriendo por hacerte feliz, cosa que creo que nunca podrás entender a menos que seas tu la que esté en mi lugar en alguna etapa de tu vida y te des cuenta de lo que se siente ser el imbécil que está ahí porque no puede salir adelante sin esa persona, que sabe que no puede enamorarse porque no sentirá lo mismo, que sabe que habrá un miedo enorme incluida a la inseguridad que siento, pero amor mío y princesa mía, a pesar de todo nunca te desearé el mal, porque mi amor por ti nadie podrá sentirlo, nadie podrá quererte como este tonto sintió por ti, trata de cambiar tus manías y celos desquiciados, desenfrenados y no te vuelvas insoportable, recuerda que eres muy hermosa como para llorar de nuevo, recuerda que a pesar que tu ya no estés conmigo hay una promesa que hicimos mientras nuestras lágrimas caían, te dejé o acabé con una relación pero hubo momentos en los que te necesité y no estuviste, espero que te des cuenta que nunca nadie podrá ocupar el lugar en mi corazón que ocupaste tú, porque con aquella despedida tu te llevaste cada trozo de corazón que quedaba.

Te sigo escribiendo y te sigo pensando como si aún estuvieras aquí, en mi almacenamiento en la nube están todas nuestras fotos, cada que te recuerdo suelo verte sonreír y darme cuenta de que eres hermosa y si aún dudas que te amo, léeme y toma tu criterio, pero he muerto en definitiva tratando de hacer que me ames cuando sé que es imposible.

Ve amor de mi existencia, amor puro e irremplazable, ve y sé feliz con alguien que no sea feo, acomplejado e inseguro como yo, ve y sé feliz con alguien que no sea un estorbo como yo lo soy, ve y demuéstrame que yo era el del problema, recálcame que yo no te supe entender y que solo te hice perder tu tiempo, ve y dile que lo amas y repróchalo en mi cara, ve que te estaré esperando para morirme lentamente porque siempre estaré aquí recordando que un día sentada junto a mi me dijiste que me amabas, no espero que regreses conmigo, nadie merece tener a una basura como yo en su vida, ¿Recuerdas que me lo dijiste más de una vez, que yo era una basura y que nunca cambiaría?, Cuán equivocada estabas, dejé de amarme a mi por amarte a ti a cada segundo, y darte ese amor cuando todos te dieron la espalda.

Ojalá que un día, que salga a caminar o que me vaya a sentar a esos parques donde juntos estuvimos te encuentre y veas que a pesar de que han pasado muchos días, muchas semanas, muchos años yo si cumplo mi promesa y siempre estuve y estaré para ti.

Cierro mis ojos y aún estás aquí, tu nunca te has ido, sigues creyendo en mi y a pesar de todo dices que sin miedo lo quieres intentar conmigo, pero luego los abro y solo es mi imaginación luego de ver tu foto tamaño postal que cargaré siempre en mi cartera con la primera carta que me diste.

Te amaré por siempre y para siempre, como se aman los amores correspondidos, esos que duran para toda la vida, ese amor que yo sentí por ti y que tu sentiste por otra persona, y que a pesar de todo no me arrepiento, pero siempre te escribiré eso tenlo presente, solo que espero algún día entrar en tu mente, ser un recuerdo cuando con tu nuevo acompañante vayas al cine, a comer o a pasear, espero me recuerdes cuando te espere donde muchas veces te esperé en tu universidad, y se siente donde por primera vez te tomé la mano, descuida esta es la última vez que lloro por ti...

Te amo cariñito...

Te dejaré de molestar, pero nunca de escribir, hasta siempre o hasta nunca, pero prefiero hasta donde el tiempo me lo permita...

EsperándoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora