CHILL

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"Cuando te veo,
Sigo teniendo escalofríos"

(EXO - Chill)
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KyungSoo observaba el techo de su habitación como si en el se escondiera un secreto valioso. El golpeteo constante de un corazón rezonando en sus odios, no lo dejaba hilar ningún pensamiento hasta que descubrió que eran los suyos propios. La boca le sabía seca, su cuerpo parecía estarse meciendo sobre agua. Siempre había sido alguien a quien le resultaba fácil marearse, justo ahora todo le daba vueltas con su estómago amenazando con expulsar la sopa de la noche pasada.

Como apestaba estar enfermo.

Se levantó entre la penumbra que podía dar unas cortinas dobles y gruesas en su ventana. Afuera tampoco era como si hubiera mucha luz. Toda la semana la ciudad había sido cubierta por nubes espesas, aunque sin lluvia.

Tomo la tableta que puso en la noche sobre la comoda del costado su cama junto a un vaso de agua. Tres días con la misma pildora y aún no le daba un efecto satisfactorio.

Poco a poco sus brazos y piernas dejaban de estar entumecidas, las paredes y demás por fin se quedaban quietas. Salió de su cama algo receloso hacia el baño.

Se lavo la cara y mientras se secaba veía su reflejo demacrado. ¿Que acaso le había pasado un camión por encima? Era como tener una peluca roja al estilo punk sobre su cabeza. Las sombras debajo sus ojos podían pasar por maquillaje mal puesto, acentuándo lo que de por sí ya se veía terrible, incluso sus labios habían sido teñidos de un color palido muerto. Estaba listo para un concierto de Marylin Monroe.

Resopló poniendo pasta a su cepillo de dientes. Este resfriado ya empezaba a tenerlo harto. No quería seguir pareciendo un zombie por los pasillos, las miradas de las otras personas eran tan obvias juzgandolo. KyungSoo lo sabía, aquello le molestaba.

Antes de salir, miro el cuarto vacío de ChanYeol. para nada sorprendido. Desde aquella ocasión, donde BaekHyun lo había abandonado en el estacionamiento del Monster, con instrucciones severas sobre mantener cero contacto; el gigante sin cerebro se había convertido en un ser sin alma también. Vagando como fantasma entre la gente viva. Se iba muy temprano y regresaba mas tarde aún. Ni siquiera olía a alcohol, por lo que el que pasara tiempo en un bar estaba fuera de la lista de posibilades de donde pudiera Park perder tanto tiempo.

Él lo había notado en cuanto se subió con esa expresión deprimida, no se molestaba tan siquiera en ocultarlo, era transparente como el agua. Por eso le era fácil saber lo que pensaba todo el tiempo. No había querido preguntar porque estaba cansado y enfadado. No habría adivinado que las cosas se volcarán de esta forma. ChanYeol no era de los que le prestaban atención a sus amantes más de unos días, la fascinación se le evaporaba tan pronto como venía. Estaba preocupado, no le había gustado mentirle a la señora Park cuándo llamó hace un día para preguntar el estado de su Yeolie.

"Se encuentra más que perfecto"

Esa frase aún nadaba fastidiando su conciencia.

Sabía que debía intervenir, no podía dejar que se hundiera hasta el punto de no saber como subir. Nunca imagino tener que hacer algo así. Consolar al PlayBoy número uno que conocía por un mal de amores sonaba ridículo.

Pero KyungSoo ya tenía sus propios problemas, sin apellido ni nombre pero con rostro.

Había estado pensado en él más de lo que le gustaría admitir. Su cuerpo entero vibraba cuando las imágenes venían. Cuando su mente lo seguía llevando al Monster, poniéndolo frente a ese hombre. La garganta se le secaba al recordar lo cerca que se encontraban y como su perfume picante se había prendido tan veloz a sus ropas.
Si bajaba los párpados, la imagen se presentaba tan real, regresando a la discoteca, a ese mismo momento donde todo parecía embelesante, noches en vela eran acreditadas a eso.

Reflejos (Kaisoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora