Memorias Olvidadas - Parte 3

Capítulo 11

– “Todo estará bien amor.” – dijo Ethan abrazándome por detrás.

– “Lo sé, es un buen plan… solo que temo por si llegamos a perder a alguna persona de nuestro lado.” –

– “Tranquila, todos son muy fuertes.” –

– “En eso estamos de acuerdo.” – dije convencida de ello pero no podía dejar de pensar en que no quería volver a sentir aquel sentimiento al perder a alguien. – “Por qué es mañana el día que escogieron para acabar con los rebeldes?” –

– “Porque Ophelia dijo que había un día al mes que el líder pasaba por la central a verificar los avances con los experimentos y hablar con su general por los asaltos en las ciudades.” –

– “Mañana es el día que él ira.” –

– “Si. Mañana lo volveremos a ver.” – dijo Ethan mirando al cielo desde el balcón de mi habitación.

El día que habíamos fijado para la acabar con los rebeldes había llegado. Se habían entregado las bombas a los lideres de los grupos de infiltrados y ellos ya las habían colocado en sus posiciones, cuando el coronel diera la orden ellos saldrían del lugar y estallarían el lugar. Eso mantendría ocupados a todos en cada base y la central tendría que mantenerse ocupada en el cuarto de control para de algún modo respaldar el sistema de esos lugares y que no se pierda información, por ello no estarían todos pendientes de lo que pasara en la base central.

Elizabeth con Ophelia habían realizado una clases de armas especiales para todos, ya que necesitaban la sangre real para acabar con los monstruos. Habían creado balas, las cuchillas de las dagas o espadas con esto. Todo estaba preparado para acabar con nuestro enemigo.

Existían varias entradas por los que nos dividimos en varios grupos para penetrarnos. El grupo A era el de Elizabeth con Ophelia, los Sres. Bell, Alissa, Alice y otros, ellos se encargarían de los experimentos. El grupo B estaba conformado por George, el agente Davis, el coronel y otros, ellos se encargarían de ir al cuarto de control y tomar las cámaras de seguridad para guiarnos en el camino. El grupo C estaba conformado por Ethan, Alphonse, Lark, Carl, Lisa y yo, nosotros nos encargaríamos de ir donde estaba el líder. Los demás grupos se dividirían por todos lados para acabar con los peones de los rebeldes. Los agentes nos habían entregado comunicadores para estar siempre en contacto, ya que cuando el grupo B estuviera en su posición nos ayudarían atravesar el camino correcto e ir directamente al objetivo.

– “Estas bien?” – preguntó Ethan después de que los otros grupos se hayan ido.

– “Si.” –

– “Todos listos?” – dijo Carl.

– “Si.” – contestamos todos.

– “Ya estamos en el cuarto de control.” – escuche que decía el coronel por la radio. – “Les indicare como ir hasta su posición, al parecer nadie aun se ha percatado de nuestra infiltración. Fue buena idea venir primero nosotros.” –

– “De acuerdo.” – dijo Alphonse.

Estábamos en una especie de fabrica, ocultos de los demás. Nuestro grupo se encargaría de detener al líder, solo nosotros podríamos con ayuda de nuestros amigos. En un principio el coronel no acepto esto pero después de hablarlo, tuvo que aceptar que nuestra fuerza unida de los de sangre real no se comparaba con los años de experiencia que el tenia en el campo.

El coronel nos indico que debíamos entrar por la puerta lateral izquierda del lugar y avanzar hasta que viéramos los elevadores que nos llevarían a la parte inferior. Cuando avanzábamos tuvimos que ocultarnos pero no fue posible porque uno de los trabajadores nos vio, por lo que comenzó la batalla. No habían activado la alarma aun pero sabíamos que estaba cerca. Aquellos que nos habíamos topado eran simples humanos que estaban armados, fue fácil noquearlos y dejarlos inconscientes en un cuarto de limpieza que encontramos.