A Primera Vista

capitulo 4.

Estrella POV

Se que muchos piensan que no debería tener estos sentimientos hacia Eduardo, pero díganme entonces que hacer contra algo que simplemente se siente... Yo no elegí enamorarme de el, simplemente paso, y lo quiero, a pesar que el nunca me corresponda.

Lo se, Eduardo nunca me vera como yo quisiera, y a veces me dan ganas de estrangularlo o hacerle comer sus palabras de presumido, pero solo me hace falta ver su carita tan angelical para derretirme. Mi corazón late fuerte con una simple mirada, hace que el tiempo se detenga a mi alrededor... ¿Y me van a decir que eso no es amor?

Eduardo: Ya no quiero mas sopa -dijo haciendo aun lado con cara de asco, me levante para tomar la bandeja- ¿Puedes decirle a mi tía que me traiga ......? -asentí saliendo de su habitación.

Después de ayudar a Emma con su vestimenta, me ofrecí para quedarme al cuidado de Eduardo, con la excusa de ayudar a la señora Amelia, la pobre mujer tiene que preparar la cena para su familia, encima de atender a los gemelos y ahora a Eduardo... Por supuesto no dude en ofrecerme, a pesar que Eduardo era tan pedante, se creía que tenia que ser consentido únicamente por estar lastimado.

Amelia: Estrella, agradezco enormemente que me ayudes, ya ves como estoy -y no es para menos, el papa de Emma arreglaba el jardín mientras los gemelos tenían un desorden en la sala con sus juguetes- por cierto, ¿Donde esta Emma? Le pedí que me ayudara con sus hermanos...

Oliver: Si, ¿Donde esta mi hija? -venia entrando con los materiales que utilizaba para arreglar el jardín, por supuesto me puse nerviosa.

Estrella: Eh... Creo que iba a alimentar los conejos, si eso me dijo -fue lo primero que se me ocurrió- ¿esto es de Eduardo? Se lo llevo

Amelia: Llévale también el teléfono para que llame a sus padres, Verónica se quedo preocupada por el -me paso el inalambrico, sonreí tomando la nueva charola con mas comida para Eduardo.

Eduardo POV

Me aburre estar en casa todo el tiempo, lo único bueno es que mi Tia Amelia me da todo lo que quiero, tiene unas manos divinas para la cocina, casi tan buena como las de mi mama. Alcance mi celular como pude en la mesita de noche, leí un mensaje y sonreí: ''espero que estés bien, guapo. Pronto iré a visitarte. Besos''.

''Carla'' -suspire susurrando su nombre, hace tiempo he querido salir con ella, es linda, y creo que le gusto.

Estrella: Eduardo... -la dulce voz de la rubia interrumpió mis pensamientos- aquí traigo mas comida para ti -se acerca tímidamente dejando la bandeja encima de mi cama.

Estrella es una linda chica, muy buena y servicial conmigo... Es normal, desde que nos conocemos me he llevado bien con ella y al ser la mejor amiga de mi prima es frecuente que nos visite.

Eduardo: Gracias -sonreí acercando el plato hacia mi para empezar a comer.

Ella me observaba, siempre tenia su mirada encima de mi, a veces la encontraba observándome en el almuerzo, los chicos se reían cada vez burlándose de ello, eso me molestaba... Estrella es muy linda, pero nunca la he mirado mas allá, es buena amiga.

Estrella: Eduardo -la escuche susurrar, levante la vista del plato para atenderla- y..yo te ayudare con las clases -movió ambas manos y las escondió- así que, no te preocupes por eso.

Ella siempre se ofrecía, siempre estaba dispuesta ayudarme con lo que fuera.

Eduardo: Gracias Estrella, eres una gran amiga.

Emma POV

Intentamos escondernos de la hermanita de Gabriel, el me llevaba de la mano, imaginen mis mejillas sonrojadas solo con el echo de sentir sus manos, Gabriel se apresuraba a perder de vista a Alice, hacia todo lo posible por perderla de vista.

Gabriel: Creo que ya esta -murmuro cuando nos escondimos tras unos arbustos.

Sus ojos me miraron, siento como mi respiración se vuelve mas lenta, me sudan las manos y... ¡No me salen las palabras! Estoy en un estado critico, el me sonríe y siento que me desarmo frente a el.

Gabriel: Emma, yo... -estaba a punto de decirme algo, y yo le prestaba atención, estaba a punto de susurrar esas mágicas palabras, comienzo a sentir un sin fin de sensaciones que recorren mi cuerpo pero....

Alice: Ahahahahaha -un grito nos alerto.

Emma: ¡Alice! -fui la primera en salir y ver a la niña tirada en el suelo con algunas ramas a su alrededor.

Gabriel: Esta inconsciente -afirmo verificando el rostro de Alice, pude ver en su mirada algo que reconoci perfectamente- sera mejor que la lleve a casa -cargo a su hermanita.

Emma: ¿Si mejor la llevamos con mama? Ella podría ayudarnos...

Gabriel: Ya esta tarde, esta a punto de oscurecer y... No te preocupes -no se si lo decía para tranquilizarme- estaré bien, regresa a casa -entonces lo vi alejarse con la niña.

¿Debo preocuparme por el? Su padre es muy estricto, y muy severo con sus castigos. En una ocasión, mi padre tuvo que ir a hablar con ese señor para que no le pusiera un dedo encima. Gabriel es un buen muchacho, no entiendo porque su padre es así con el, actúa como si no le importara, nunca esta en los momentos importantes para el.

Gabriel una vez me contó que su mama siempre esta pendiente de el, ella si se preocupa por el, pero por culpa de su padre solo puede verla en vacaciones. Ese es un claro ejemplo las personas le dan un mal uso al dinero, mi papa dice que la avaricia y el poder oscurecen el corazón de las personas siempre cuando se dejan dominar por ese sentimiento. Esa situación hace que me preocupe por el, Gabriel no merece ser tratado de esta manera.

Oliver: ¿Se puede saber donde estabas, Emma Ferreira? -escuche la voz de mi padre quien me esperaba en la sala.

Vi a mi madre quien se asomo negando con la cabeza y mis hermanos corrieron en mi dirección.

Onell: Vamos Emma, la cena esta lista -hablo uno de mis hermanos rompiendo la tensión en el ambiente.

Alvaro: quiero sentarme hoy al lado de mi hermana -comento el otro y me sostuvo la mano para llevarme con el.

Onell: ¡No! Hoy es mi turno -exigió el otro sosteniendo mi otra mano, ambos me arrastraron hasta mi lugar en la mesa y se sentaron en mi lateral.

Mi mama entro con una sonrisa sosteniendo el brazo de mi padre, imagine que trataría de relajarlo un poco. Mi papa nunca puede mantener una dura expresión al lado de mi madre, ella siempre ha sabido sacar lo mejor de el.

Conociendo su historia como me han contado, es increíble todo lo que puede hacer el amor por una persona, mis padres habían tenido una linda historia de amor, anhelaba que la mía al menos llegara a ser tan linda como la de ellos, al menos que el amor de mi vida sea tan atento y amoroso como lo es mi papa con mi mama.

Suspire recordando a Gabriel... No puedo evitar la preocupación y esa sensación en mi pecho. Solo espero que no lo vayan a castigar por esto que paso con Alice, me sentiría muy responsable por ello.

Amelia: ¿En que piensas cariño? -mi vista fue en dirección a mi madre quien me miraba con suspicacia. Desvié nuevamente mi vista hacia mi plato del que no había probado bocado.

Oliver: Hmm -escuche el gruñido de mi padre- ¿En quien estará pensando?

Alvaro: ¿Estas bien hermanita? ¿No tienes apetito? -comento uno de los gemelos, sonreí mirando en su dirección.

Emma: Estoy bien hermanito -acaricie su cabello castaño- vamos a comer -dije para tomar los cubiertos y empezar a comer.

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