Una vez, hace mucho tiempo, una pequeña moneda descansaba en la calzada. La pequeña moneda veía pasar a mujeres, hombres, niños y ancianos. La pequeña moneda veía pasar a gente adinerada, a gente pobre, con ropa buena y con harapos. Nadie Le hacía caso,ella sola, solo era un pequeño centavo sin valor.
Pasaban días, años, y los árboles crecían. Los árboles crecieron tanto que le hacían sombra, y ella seguía ahí tirada. Pasaba tanto el tiempo que quedó enterrada en la tierra.Olvidada.