Leyendo El Campeón de la Reina versión 2

Nuevos Amigos

Phoebe echo un último vistazo a los Dioses esperando que en cualquier momento iniciará una nueva discusión, para su fortuna tanto Zeus como Poseidón se quedaron en silencio, pero temía que esa paz solo iba a durar muy poco.

"Mamá, tú no tienes que pedir disculpas, sé que no lo habrías hecho si hubieras tenido una elección." dijo sonriendo.

— Quédate en tu lugar Zeus. — rugió Hestia al ver que el Rey de los Dioses intentaba ponerse de pie, Zeus se quedó por unos momentos viendo fijamente a su hermana antes de soltar un bufido y volver a su lugar. Poseidón por otro lado sujeto con fuerza su tridente intentando que eso le ayudara a calmar sus celos.

Hera sonrió a su hijo adoptivo, después de todo era un buen chico a pesar de todas las cosas terribles que le ocurrieron; exactamente lo que siempre había querido en un hijo.

"Lo hiciste bien en la reunión Percy, no había visto a tu tío tan aliviado al encontrar un semidiós. Además estoy feliz de que vas a tener tu propio palacio en el Olimpo. Será bueno ya que te podré ver más a menudo." dijo  cálidamente.

"Sabes que aun estaré rescatando semidioses, ¿verdad?" preguntó un poco nervioso.

"Sí, pero eso no significa que no puedas pasar un poco de tiempo en el Olimpo con tu madre, ¿o si?"

Percy negó con la cabeza sonriendo, "No, supongo que no." pero aún se veía un poco nervioso, "¿nunca les diremos que me adoptaste?"

"Por supuesto, no me importa lo que diga tu padre. Eres tanto mi hijo como suyo pero apenas has vuelto, al menos para casi todo el mundo en el Olimpo, creo que les daré un poco de tiempo para dejar que asimilen tu regreso." dijo  sonriendo.

"¿Qué pasa con mi tío Zeus? ¿Y si se enoja?"

Hera se rió, "¿Y qué? Él ha tenido cientos de semidioses con otras mujeres. Creo que no podrá reclamarme por adoptarte."

— ¿Ahora no dirás nada querido? — rugió Hera viendo con rencor a su esposo, quien prefirió mejor mantenerse en silencio.

— Tranquila hermana, ¿acaso no podemos terminar de leer un capítulo sin pelear? — murmuró Hestia frustrada de que en cada momento alguien empezará una discusión.

Percy sonrió: "Bien."

"¿Ahora me quieres decirme por qué le mentiste a Apolo acerca de tu competencia de tiro con arco?" preguntó Hera con una ceja levantada.

Percy se quedó boquiabierto sorprendido de que se hubiera dado cuenta, "¿Cómo lo sabes?"

"Tal vez podría ya no ser capaz de leer tu mente, pero todavía puedo saber cuando mientes."

Percy frunció el ceño, "No sé. Apolo es tan molesto. Él nunca habría dejado de molestarla."

— ¡Auch! — dijo Apolo tocándose el corazón. — Solo espero que tu ni pienses igual a ese traidor — Percy prefirió mantenerse en silencio, no quería tener a otro Dios en su contra.

Hera asintió, "me di cuenta, nos has salvado a todos de un dolor de cabeza por los próximos siglos."

"Tengo que aceptar que fue agradable ver a mi papá, lo he extrañado mucho."

"Sé que aún te duele Percy, pero creo que deberías de ver a tus primos Nico y Thalia. Se que Thalia no ha sido la misma desde que desapareciste. Ella es la razón por la que las cazadoras no dejan de buscarte. Y Nico hace lo mismo. "

Percy frunció el ceño, "Tal vez tienes razón, extraño hablar con ellos, creo que voy a hablar con Artemisa y Hades para verlos de nuevo. Sólo espero que no le digan a nadie más."