Capitulo 5- Casi dos meses

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Me dijo que a final de clase le espera. Me daba miedo encontrarme yo, o que se encontrara él con Sahak, por suerte eso no ocurrió, seguramente si hubiera una discusión sobre algo así entre los dos y alguien lo vera les acabarian despidiendo a ambos.

 

Al finalizar las clases Merle, con cara de absoluta decepción hacia mi y dos calle alejados del instituto me pregunto.

— Sabes donde vive ¿Verdad?.— Asentí notando como su mirada se me clavaba en él alma.

 

Le lleve hacia casa de Sahak, él hecho de que Maerle supera que sabía donde vivía decía muchas cosas, no precisamente buenas, sobre mi. Me odiaba profundamente, me hubiera gustado ir atrás en el tiempo y cambiar todo eso, pero lo hecho hecho queda.

 

Llegamos a la puerta de casa de Sahak, por suerte o por desgracia estaba en casa. Nos abrió y nos invitó a pasar, se le veía en la cara que sabía lo que estaba pasando, era obvio, solo había que vernos para saber que ocurria.

 

Nos sentamos en su salón, yo al lado de Merle y Sahak frente a nosotros.

— Me lo voy a tomar con mucha paciencia. Y vamos a aclarar de una vez por todas lo que está pasando aquí. Tu cuando hablamos en la oficina sobre el tema me dijiste que no había problema que lo entendías, que a cualquiera le podía pasar, y demás cosas que despues, claro, claro que a cualquiera le puede pasar, y has aprovechado una confusión para sacarle partido. — Me miró y se dirigió a mi.— No significa que no esté dolido contigo. — Y continuó hablando a Sahak.— Has aprovechado un tiempo en él que he estado ausente para...— Hizo un parón y se puso de pie. — Has... — Intento decir más despacio, como intentando calmarse. — ...has aprovechado una confusión para...

 

Cogió a Sahak por el cuello de la camiseta levantándole, Merle aunque parecía debilucho o delgado tenía fuerza.

 

Sahak le pegó un empujón hacia atrás, Merle le soltó de golpe y automáticamente le lanzó un puñetazo con el puño derecho. Sahak se tambaleó hacia atrás, le había dado en toda la cara.

Merle se sopló el puño, a él también le había dolido. Me miró con cara de decepción y salió de allí.

 

Yo estaba asustada, nunca había visto a Merle así y mucho menos iba ser yo quien le enfadara aún más diciéndole algo, me quede en el sofá mientras las lágrimas inundaban poco a poco mis ojos. Pero antes de echarme a llorar borrosamente vi a Sahak poniéndose la mano bajo la nariz, quizás estaba sangrando.

 

Me levante, que pintaba yo allí. Me fui hacia la puerta cuando Sahak me cogió de la muñeca, seguía con una mano bajo la nariz.

 

—No te vayas.— Un simple no te vayas no haría que nada cambiase. Probablemente había perdido a quien más quería en este mundo.— No te vayas, por favor.

 

Tire de mi brazo, pero no me soltaba. Me acorralo en la puerta aún cerrada. Ya no se tapaba la nariz, tenía sus dos manos en mis muñecas. Una de ellas llena de sangre.

 

Forcejee con él, miraba hacia abajo mientras me hablaba, no quería mirarle a la cara, tenía los ojos llorosos y solo quería irme y llorar en la soledad de mi cuarto.

Oscuro y sádico amor © (+18) (Profesor-Alumna)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora