Capítulo 6 El Sable

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-No puedo creer que nuestro destino sea morir así, aunque creo que lo merezco por todo lo que he hecho- pensó Kylo mientras veía a Rey caminar.

El silencio se había generado desde que se asincerara sobre lo que sentía. Pero al parecer sus palabras solo dejaban a Rey confundida, pues no emitía sonido alguno y lo había mirado con una ceja alzada, incrédula ante los sentimientos de Kylo.

La verdad es que no había sentido algo así por nadie, estaba acostumbrado a que la gente lo tratará por su jerarquía o por que su madre era princesa, pero no alguien que lo viera como un igual, tenía mucho que agradecer a Snoke por el vínculo que había generado y podía notar que Rey sentía algo por él, aunque no lo conociera tan bien.

Su mente divagaba mas cuando estaba cansado, pero parecía que a la chica no se le agotaba la energía.

-Me estoy inpacientando- dio Kylo molesto. -Quiero descansar, Rey estás escuchando?- alzó la voz con mucha intensidad en esas últimas palabras.

-Ya llegamos- dijo Rey algo molesta. Lo cual generó un sentido de urgencia en Kylo.

-Bien, te sientas lista para el lado oscuro? Usa es enojo para conseguir lo que quieres-

-No, mmmm, estoy bien, sólo me sacaste de un pensamiento y ahora me resulta complicado regresar a él-

-Pues sí ya llegamos aprovecha mi fuerza para sacar ese sable, en realidad creo que nos estamos quedando sin tiempo-

Pero Rey no estaba lista para dejarlo ir, no tan rápido, a pesar de la visión la cuál no quería creer, el tiempo con él le había dado más respuestas de las que esperaba y quería comprenderlo.

-Entonces hagámoslo, sólo deja tocó para saber quien habita dentro-

Después de tocar la puerta se encontraron con una niña muy pequeña, que conmovió los recuerdos de Rey.

-Estas sola?- preguntó Rey.

Pero la niña no hacía ningún ruido, solamente la miraba como sí no hubiera preguntado nada.

-Necesitamos pasar, por favor.

Pero al momento de que quiso dar un paso adelante, la puerta parecía estar estancada y la niña hecha de un bloque de piedra durisimo.

-Como te enteraste de este lugar?- Pregunto una voz que provenía del interior de la casa. - Y más importante, Que vienes a buscar aquí?

-Me llamó Rey y el padawan de Mace me dio algunas pistas de como llegar aquí. Necesito algo que se encuentra en esta casa.

-La legión de personas como yo protegemos todos los vestigios que quedan de los Jedis, esperando que llegue el tiempo de ascender o desaparecer.

-Sería mejor que nos dejará pasar para hablar en privado-

-Sólo estas tú-

Cuando Rey se dio cuenta la conección con Kylo se había perdido. Y ahora realmente estaba sola.

-Pero pasa niña, te tengo que decir por que no te voy a dar el sable.

-Pero en verdad lo necesito, no tengo la posibilidad de armar el mío y toda la Orden Imperial me busca, están atentos a mis movimientos.

-Verás, es por que sí está aquí, pero muy en el fondo. Sacandolo con palos y nuestras manos tardaremos meses, además de que se hizo de esta forma para que no quedara en las manos equivocadas-

-Tiene que haber otra forma- replicó Rey. Usando las enseñanzas de Luke, se sentó sobre el piso de aquella casa y comenzó a concentrarse en la fuerza, el sable ya no sólo podía sentirse, también latía y podía sentirlo a varios metros bajo tierra y con un movimiento de su mano, se trozo un pequeño pedazo del piso, indicando que sería el punto de partida llegar a él.

Lamentablemente había más personas sensibles a la fuerza en ese planeta y en esa ciudad.

La conección con Kylo había hecho casi invisible a Rey. Pero ahora todos los que usaban la fuerza sintieron un cosquilleo debido a tanto poder usado en esos momentos y los dirijia al lugar del epicentro, varios de ellos eran aliados a los caballeros de Ren y estaban dispuestos a hacer lo necesario para formar parte del grupo.

Rey seguía usando la fuerza para poder destapar aquel baúl, pero el viejo comenzó a sentir que algo andaba mal.

-Niña, debes tener cuidado, es un territorio muy delicado y la situación entre este planeta y su vecino a muy tensa. No todos apoyamos la causa Rebelde, debes de ser más precavida-

-Siento que sí paro, no podré continuar en un buen tiempo y lamentablemente no tengo tanto-

-Conoces a los caballeros de Ren?-

Esta pregunta movió hasta el último de sus nervios. Estaba excitada y asustada al mismo tiempo, pero empezó a disimular.

-Ellos que tienen que ver?- dijo mientras continuaba sacando tierra.

-Hay una buena legión de sus postulantes en este planeta, son sensibles a la fuerza y no toleran nada que provenga de los Jedi, dirán todo o que sea con tal de ganar a su amo-

-Esperemos que sea lo más peligroso que me tengan que enfrentar-

-Pues al ritmo que vas, tendrás el sable por la mañana-

Rey comenzó a usar más la fuerza sacando bloques pequeños de tierra y fango, la superficie era blanda, sin embargo también sentía que el baúl se hundía, pero sin darse por vencida, continuó con su misión, recordando todo lo que había vivido con Kylo.

Ya que lo peor que podría pasarle era cumplir la visión de matarlo. Eso le partía el alma, era algo que no quería y entre más cavaba las lagrimas comenzaban a rodar por sus mejillas. Acto que pudo ver la nieta del viejecillo.

-Que te provoca tanto dolor?- preguntó la niña.

-No es nada, yo, recordaba cosas-

-Te traeré algo de murdin caliente, te ayuda cuando estas triste-

-Gracias- dijo Rey- pero no estaba tan segura de si eso aliviaria su corazón.

-Sí, es cierto, estas triste-

La voz grave que provenían de esas cuerdas vocales la petrifico. Había deducido que por todo el tiempo que estuvieron juntos, así también estarían separados.

-Como volviste?-

-Intentando concentrarme hasta que pude visualizarte, fácil. Porque estas triste si casi logras tu objetivo?-

-Estaba pensando en unas cosas-

-En mí, estoy seguro-

En ese momento se escuchó un vaso caer, la pequeña niña podía ver a Kylo como sí estuviera físicamente y los dos la vieron con asombro.

-Esperen, a menos que te estés convirtiendo al lado oscuro, vienen fuerzas que pertenecen a mi legión- dijo Kylo en tono preocupado.

-Ya los sentiste joven Solo. Que harás?- dijo el viejo apareciendo de una esquina de la casa.

-Tengo que sacar ese sable- Intervino Rey y comenzó a usar ya toda la fuerza que tenía en sus brazos.

Kylo comenzó a ayudarla y la pequeña niña les pasaba instrumentos para poder apoyarse y sacar todo rápido.

-Rey! Les falta poco!- La voz de Kylo subía de tono y en urgencia.

-En eso estoy!-

La casa había empezado a ser custodiada por varios agentes de la primer orden y sólo dos a la Alianza Rebelde.

-Rey!!! Ya están en la puerta!!!- Grito Kylo.

-Apaga las luces y ustedes dos huyan- les dijo al viejito y a la pequeña niña.

-Más vale que tengas un plan, tengo un mal presentimiento sobre esto-

Y en el momento en que la casa quedó en penumbras, la puerta se abrió de golpe y sólo se veían sombras de la ciudad y en cuanto el primero dio un paso al interior, una luz morada le dio vida a toda la casa.

Contigo a mi ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora