Peligrosa Obsesión (Wonho y ___) ADAPTADA

Capítulo 25

Lo miré con toda la furia que podía tener. Maldito infeliz, juro que me las va a pagar de la manera más dolorosa.

—No más preguntas —dijo su abogado.
—¿Usted tiene preguntas, señor Black? —le preguntó a mi abogado.
—Si, si las tengo —dijo y se puso de pie. Caminó hasta donde estaba Pattinson —Señor Hutchterson, ¿Por qué cree que el señor Shin lo atacó? —le preguntó.
—Mmm, porque es un lunático —dijo él.
—Aja, según se el señor Shin tiene un excelente historial psicológico. No tiene ningún problema mental —dijo y giró para mirar a los miembros del jurado —Entonces queridos miembros del jurado, ¿ustedes creen que pudo golpearlo porque si? Algún motivo tuvo que tener, ¿Cuál fue el motivo señor Hutchterson? —Hutchterson guardó silencio y compartió una nerviosa mirada con su abogado —No más preguntas al señor.
—Puede retirarse Hutchterson—le dijo el juez —Señor Black, ¿tiene alguien para interrogar?
—Si —dijo él. Se giró a vernos —Llamo al estrado a la señorita _____ ____.

Todo el mundo se giró a verla. Con cuidado ella se puso de pie y caminó de la misma forma hasta el lugar en donde antes estaba Hutchterson. El mismo hombre del libro se acercó a ella.

—Jura decir la verdad, y nada más que la verdad —le dijo.
Ella apoyó la mano derecha sobre el libro.
—Lo juro —dijo. Harry se acercó hasta ella.
—Bien señorita _____, ¿Usted conoce al señor Hutchterson? —le preguntó.
—Si —dijo ella asintiendo.
—¿Podría decirnos hace cuanto?
—Conozco a Josh desde hace ya dos años, lo conocí en unas vacaciones que hice con mi padre.
—¿Podría decirnos como es él?
—Josh es un chico dulce, cuando quiere. Atento y respetuoso —habló ella. ¿Acaso eso iba a ayudarme a salir? —Pero tiene un serio problema, es demasiado celoso...
—¿Celoso? —dijo mi abogado y sonrió —¿Podría decirnos un poco más de eso?
—¡Objeción! ¿Qué tiene que ver la vida personal del señor Hutchterson con esto? —dijo su abogado.
—No da lugar —dijo el juez y miró a Harry —Prosiga.
—Josh y yo comenzamos una relación amorosa algunos meses después de conocernos, antes de eso todo era perfecto, hasta que comenzaron a aparecer los celos. Pero no eran celos normales, eran celos posesivos y hasta irracionales. Aguante esa situación, porque de verdad lo quería, y
quería intentar algo con él. Hasta que hace unos meses decidí terminar con la relación, sus celos me estresaban...

—Entonces ¿usted nos está diciendo que el señor Hutchterson sufre un grave problema de celos?
—Si —dijo ella asintiendo.
—¿Usted conoce al señor Shin? —le preguntó. Ella posó su mirada en mí. Y había algo en su
mirada que no había visto antes.
—Si —contestó.
—¿Puede contarnos sobre eso?
—A Wonho lo conozco hace un mes. Él y yo vamos a la misma Universidad, al igual que Josh.
—Aja, ¿usted podría decirme algunas cosas sobre el señor Shin?
—Él es caballero y respetuoso. Siempre se muestra generoso con la gente que quiere y siempre encuentra la manera de hacerte reír.
—¿Señorita ______, tiene usted algo con el señor Shin? —le preguntó.
Ella volvió su vista a mí y yo la miré fijo.
—Si —dijo ella.
Entonces sentí que mi corazón se aceleraba. Ella iba a mentir para sacarme de aquí.
—¿Hace cuanto?
—Hace dos semanas.
Harry se giró a ver a los miembros del jurado.
—Una joven pareja, que acaba de empezar ¿no les parece tierno? —preguntó. Todos rieron por lo bajo. Se acercó de nuevo a ______—¿Cree usted que eso tiene que ver con lo que pasó ayer con el señor Hutchterson?
—Estoy completamente segura de ello —dijo ella.
—¡Maldita seas, _____! —rugió Hutchterson.
—¡Vuélvele a levantar la voz imbécil y te arrepentirás! —le advertí.
—¡Orden, orden! —dijo el juez elevando la voz, haciendo que todos se callaran —Prosiga, señorita.
—Wonho jamás actuaría sin provocación. No lo conozco hace mucho, pero si lo suficiente. Siempre esta tranquilo, y pasivo. Le gusta compartir tardes con sus amigos, y no es celoso... bueno quizás un poco, pero normal. Estoy segura de que Josh se enteró y que fue a buscarlo —dijo y su voz comenzó a sonar temblorosa. Todos la miramos bien.
—Es hora de la actuación —me susurró Hani.
—Lo único que yo quiero es que él salga. Ustedes no tienen ni idea de lo terrible que fue ayer para mi enterarme de que él estaba aquí —dijo y soltó algunas lágrimas —Yo lo quiero, y él no es un mal chico. Yo se que también me quiere...
—Tranquila señorita ______ —le dijo Harry y le cedió un pañuelo.