Un buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor, pero Israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento. Isaias 1:3
El reconocer que Dios existe no es suficiente, es como tu saber que que tienes libros que leer pero no lo lees y por ende no desarrollas tu intelecto.
Al buscar de Dios tiene que tener conocimiento de cómo inicio todo, desde la creación del mundo esta Dios obrando y dándonos señales de cómo El actúa sobre nosotros.
Olvídate de esas teorías que no palpan realidades ni hacen milagros, olvídate de esas leyes universales, pues si Dios es el Rey del Universo, porque irnos por la ramita?
Desde su inicio Dios nos creo con salud, abundancia y perfección, creo todo para nosotros, pero el mal también estaba y teníamos desde ya el libre albedrío, esa libertad de elegir qué hacer, qué creer, qué decir, y nos llevó a las enfermedades, a las necesidades, y desde ahí hasta entonces, en pleno 2018 seguimos viendo como el mundo gira en las mismas circunstancias, pagando consecuencias y cada vez peor, viendo guerras, viendo plagas, viendo depresión en más personas que no tienen norte, que se encuentran aislados de la felicidad y plenitud por la que fuimos diseñadas.
Pero como estamos en una era más civilizada nos mantenemos ocupados con la vida y sus demandas, pero cuando enfermas, cuando te deprimes, cuando te amargas por alguien, cuando pierdes a un ser querido vuelves al mismo lugar de origen, de donde salió todo, de alejarte de Dios, de su mano consoladora, de su armonía y su paz.
Haces lo que quieres porque no te preocupas por leer los mandamientos que él nos dejo para ti, y haciendo lo incorrecto lo alejamos.
Somos la única especie del mundo que tenemos inteligencia y sabiduría, pero nos comportamos con un instinto animal, haciendo cosas indecorosas, basta con mencionar que ahora hablar de orgias, de tríos, es algo tan natural, ya lo vemos en las películas, en los videos y nos parece como parte de la naturaleza, hasta excita, pero eso es de instinto animal y está mal visto a los ojos de Dios, pero luego te quejas del sida, de las enfermedades venéreas que son el castigo a esa aberración.
Si has leído o escuchado sobre la Ley de causa y efecto no se te hará extraño saber que cuando hacemos algo, recibimos para atrás una consecuencia, un resultado, el vaivén de las cosas, si haces maldad, si pecas, si piensas mal, si hablas mal, si comes mal, si eliges mal, entonces tendrás consecuencias negativas que se repercutarán entre tu vida y tu espíritu, ese espíritu que te dice cuando estas feliz o cuando estas triste, desanimado, o enfermo.
Que la gracia del Señor Jesucristo sea con su espíritu.
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Un libro para Perdedores
SpiritualTras la quiebra de mi empresa surgio la cuestionante de mi contadora: "Digame, y cómo esta su relación con Dios" tal pregunta me hizo entrar en una busqueda existencial, "qué tiene que ver Dios en esto"? Las respuestas les dejará atónito! Autora: E...