Forest ➳ mgc. #1 #RainAwards2017

✨ d i e c i s i e t e ✨

Michael me observaba con su rostro totalmente neutro, trate de mirar mucho mas haya de sus ojos pero solamente pude apreciar culpa. 

¿Podía ser eso verdad? ¿El gran Michael Clifford sentía culpa dentro de el? 

Relamió sus labios con lentitud, mientras sus verdosos ojos no se separaban en lo absoluto de los míos. 

Abrió un poco sus labios para poder hablar, pero los cerro al momento.

— ¿Que eres? —pregunte mientras trataba de descifrar todo lo que ocultaba, se que me estoy cavando mi propia tumba preguntando esto. Pero si no lo hacia en este momento, no me atrevería nunca.

—Yo... —murmuro mientras con una mano rascaba su nuca— Nunca lo entenderías Mia. 

Mi ceño se frunció, no Michael. Esta vez no te saldrías con la tuya. 

—Si lo entenderé  —farfullé mientras trataba de buscar su mirada, estire mi mano y levante su mentón. Sus ojos estaban rojos, pero no el color que había visto antes, era ese color de lagrimas. ¿Clifford estuvo llorando?— Debes confiar en mi.

Michael rió lo mas sarcásticamente que alguien podía. Negó rápidamente y volvió a mirarme. 

— ¿Confiar en ti, Mia? —Elevo unas de sus cejas, al tiempo que chasqueó con su lengua— Si ni siquiera puedo confiar en mi. 

Creo que eso fue como una apuñalada en medio del corazón, nunca lo había visto así... Tan calmado, pero a la vez desconfiando de mi.

—Michael, yo... —No me dejo terminar la frase, que la completo por su propia cuenta.

—Tu no puedes confiar en mi, —murmuro mientras su mandíbula se tensaba— Y menos estando del lado de Luke, no pequeña bastarda. Dime, ¿Cuando Luke te salvo como lo eh hecho yo? ¿Cuantas veces Luke vigilo de ti para que otra persona no estuviera arruinandote la vida? ¿Cuantas veces Luke cuido tu maldito trasero entrando a la mansión? —escupía cada palabra, estaba sintiendo como mi corazón se estrujaba con cada maldita palabra que salia de su miserable boca. 

—Estas demente —murmuré— Luke no quiere matarme.

Y me sentí estúpida al largar eso, Michael no sabia sobre el plan. O al menos eso creía yo. Largo otra de sus carcajadas sarcástica, mientras jugaba con sus manos en las sabanas. 

—Pero quiere acabar conmigo. 

Un nudo se formo en mi garganta, y ni siquiera quería mirarlo a los ojos, me encontraba entre la espada y la pared. 

—Pero eres Idiota, Mia. —siguió escupiendo aquellas palabras sin rencor alguno, con su tono de voz aun mas fuerte. 

— ¿Que quieres conmigo? —trate de ponerme firme ante el, no podía ser débil— ¿Por qué demonios me mentiste en ese lugar? 

Michael de un segundo a otro se levanto de la cama y apretó fuertemente mis hombros, haciendo que lo mire directamente a sus ojos. 

Trague fuerte al tener su cara totalmente neutra a poco centímetros míos, podía sentir su respiración pero eso no era lo peor. Sus ojos no paraban de penetrar los míos, tratando de causar un miedo en los mismos. 

—La que se metió en ese lugar fuiste tu, por tu propia cuenta —escupió cada palabra haciendo pasar un escalofrió por todo mi cuerpo— y ahora no sabes como salir... —sonrió burlón mientras se volvía a sentar en la cama y soltaba bruscamente mis hombros.

—Quiero tener una vida normal. 

—Y la estas teniendo, primor. —abrió ampliamente sus brazos. Y su ego estaba presente como siempre. 

Negué rápidamente mientras mordía mi labio inferior. 

—No es la vida que quería... 

— ¿Crees que yo elegí la mía? —pregunto incrédulo mientras se apuntaba a si mismo— Demonios Mia, te quejas de lleno ante todo. Y ni siquiera sabes lo que realmente es el dolor. —hablo mientras vi como sus ojos se cristalizaban.

Oh, no. 

—Si, pero... —y otra vez estaba interrumpiendo mi oración. 

—Mia, solo... no te quejes, ¿Si? —afirmo, y pude ver como una lagrima se desprendía de sus ojos, pero rápidamente la limpio— Al menos sabes lo que realmente soy, ¿Lo sabes? Ni siquiera tienes una idea. No soy una bolsa de odio, no soy algo al que tendrías que tenerle miedo. Soy un alma en pena que solo busca reconfortarse en algo, de día puedo controlarme... Y de noche los papeles cambian Mia,  pero no puedes entenderlo.  

¿Estaba descubriendo el lado bueno y sensible de Michael? Porque la verdad estaba rompiendo mi corazón con cada palabra que decía. 

—Michael, yo... Lo siento —relamí mis labios y este frunció su ceño, estaba aguantando sus lagrimas y tenia ganas de abrazarlo.

El suspiro pesadamente mientras se acomodaba en la cama y hundía su rostro entre sus piernas, los sollozos se hicieron escuchar y me estaba partiendo en mil pedazos con solamente oírlo.

—No lo entiendes Mia. —volvió a repetir con su respiración entre cortada, no sabia que hacer ante ese acto. Si quedarme o irme.

Me acerque un poco hasta el y apoye una de mis manos en su rodilla. la apreté levemente mientras hacia pequeñas caricias con mi pulgar. No quería hablar, o simplemente mis palabras no salían por el nudo que contenía. 

Nunca había visto a Michael así, y por la profundidad de sus ojos sabia que no estaba mintiendo con lo que decía, no podía. 

—Mmm —masculle mientras respiraba hondo. 

Este levanto apenas su vista, y sus ojos se mantenían hinchados mientras algunas lagrimas salían de aquellos, una mueca se formo en mis labios pero el no despego sus ojos de los mio en ningún momento. Sentía como Michael me transmitía su dolor, y era algo horrible.

No emitió palabra alguna, y volvió a hundir su cabeza mientras seguía largando sollozos y lagrimas. Saque mi mano de su rodilla y la apoye encima de su cabello, mientras lo revolvía un poco sin hacer movimientos bruscos que pudieran acabar con su paciencia.

—Me siento tan confundida —murmure por lo bajo, y este no respondió a mis palabras— quiero acabar con todo esto.

— ¿Quieres acabar con todo, Mia? —pregunto mientras volvía a levantar su rostro, sus labios estaban bastantes rojos al igual que sus ojos y la punta de su nariz.

Trague fuerte y asentí. 

—Si, —trate de sonar fuerte, pero sonó como el susto que mantenía dentro. 

Este suspiro pesado y saco mi mano de su cabello, la mantuvo apretada junto con la de el. Sus dedos se mantenían totalmente fríos, acaricio levemente con su pulgar mi mano mientras la observaba. Volvió su vista directamente a mis ojos. 

—Sálvame. —farfulló.

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Hola chicas, creo que es la primera vez que escribo un capitulo en un solo día. Sorprendente ahre

No olviden votar y comentar, se los agradecería un montón. 

Nos vemos en la próxima edición, las amo.

17/01/2018.