capítulo#17

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La hermosa vista de las calles de Londres desde el prominente cielo era la gloria encarnada. El viento golpeaba contra sus facciones, Harry permanecía con una mirada seria y tajante, en cambio Louis disfrutaba a detalle aquella experiencia. Quizás sería la primera y última vez que podría volar por los cielos acompañado de un dios griego como su jefe actual.

Pasaron unos minutos en los cielos, el estruendoso sonido que producían los élices del helicóptero provocaba un pitido en sus oídos, el clima era claramente frío, congelada sus sentidos pero era soportable.

No hablaron, sólo había un par de miradas cómplices entre ambos, risillas avergonzadas y uno que otro roce entre ambos cuerpos. La luna llena contrastaba frente a ambos provocando en Louis un suspiro enamorado de tal color gris que pintaba aquel redondo tan notable, en cielo estaba totalmente despejado de un color azul hipnótico, las estrellas doradas daban un toque perfeccionista al cielo. Era simplemente el lugar perfecto. Louis pensaba que todo aquello era un sueño pero la cruda realidad era que se dirigía al departamento de su jefe. Las razones eran obvias pero Louis trataba de ser positivo. Sin embargo Harry tenía la mente en blanco totalmente centrado en cada movimiento al pilotear su preciosa Berley, el nombre era más simbólico que nada.

Siguieron en su trance hasta que Louis se dio cuenta de cómo el helicóptero descendía poco a poco. No sabía en donde estaban exactamente pero sabía que ya no había vuelta atrás.

Estuvo tan perdido en aquellos pensamientos que ni siquiera pudo deleitarse con el roce de las manos de su jefe contra su pecho cuándo tiraba del cinturón de seguridad. Estaba claramente nervioso por lo qué tendría que hacer o decir.
Harry finalmente salió del helicóptero para rodear el mismo y llegar a la puerta del copiloto, Louis aún perdido en el duro pensamiento de tener que enfrentar la charla con su jefe solo pudo dejarse manejar por el mayor. El rizado percibía las actitudes del más bajo y sabía a la perfección que era lo que le sucedía.

Al notar el nerviosismo en el menor sólo se dispuso a soltar una risa baja, cargó a Louis en sus brazos al estilo nupcial como si fuera un pequeño muñeco, sin esfuerzo alguno.

"no te haré nada que no quieras, no puedo obligarte a nada, Tomlinson"

Después de esas palabras no volvieron a hablar por el resto del camino, un silencio incómodo para el menor.
"No quiero que las cosas entre nosotros cambien" oh dios ¿de verdad dijo eso? Juraba que sólo era un pensamiento pero maldición...

"yo...lo siento" trató de excusarse pero ya había dicho lo necesario. Harry aún con su ceño fruncido demostrando confusión sólo pudo soltar un suspiro y tratar de averiguar en silencio él por qué de las palabras del castaño. Finalmente no supo que decir. Louis cayó en cuenta que Harry estaba confundido. "No existe un nosotros..." trataba de aclarar las dudas del rizado pero aún así sentía que lo estaba arruinando cada vez más.

"Nos besamos más de una vez, sí existe un nosotros. Louis"

El castaño no supo que responder ante aquellas palabras. Por un lado se sentía bien saber que Harry determinaba un (nosotros) entre ellos. Por otro lado esto sólo le daba más confusión ¿los empleados podían besarse con sus jefes con normalidad? Eso no era normal ¿era correcto estar en la casa de su jefe? Claro que no. Obviamente no era nada normal estar en casa de su jefe pero...¿Qué diría su madre si supiera esto? Con lo moralista que era su familia seguro estaría castigado o peor aún...esto era algo malo.

Lo siguiente que sintió fue en clima cálido y perfumado. ¿Cómo llegaron tan rápido al departamento?

Harry sólo podía pensar en Louis, el pequeño y delicado joven que traía en brazos, el hermoso muchacho de mirada cristalina estaba en su departamento. El simple pensamiento le daba un estremecimiento en su ingle y algo de imágenes eróticas se hacían presentes. No era su culpa, simplemente el hecho de no follar hace más de un año y tener una cierta obsesión tóxica por su empleado le movía la cabeza de forma atroz incluso molestosa. Necesitaba dejar de pensar las veinticuatro horas en aquella mirada azul, dejar de divagar en medio de una reunión sobre cómo se sentiría la piel húmeda de su pequeño Louis.

Ambos estaban tan perdidos en sus pensamientos creando un ambiente tenso y caliente, Harry era caliente, como la lava. Azufre viva que quemaba. Tenía un aroma tan exótico qué deslumbraba. Louis era suave y fresco, tanto qué dudaba qué podrían llegar a ser una gran combinación

Pero.

¿Que sucede cuando mezclas caliente y frío en un mismo sitio?

Exacto.

Tibio.

Un equilibrio único y perfecto entre ambos polos, tranquilidad y serenidad. Un punto medio. Existen teorías dónde determinan el punto medio como punto de perfección. Este sería el caso exacto de ambos. Aunque aún no lo sabían, sentían la atracción pero ninguno lo decía por miedo a la anticipación. Quizás Harry pensaba más en los peligros que conllevaría el tener a alguien como Louis bajo su dominio.

Irían lento.

Louis fue depositado por Harry sobre el sofá de piel fina color negro, con tanta delicadeza que pensaba que un simple movimiento brusco lo rompería.

De un momento a otro Harry le extendía una copa de vino blanco, el castaño aún perdido en sus pensamientos solo asintió y tomó la copa, necesitaba un trago definitivamente. Pasó sus labios por el borde de la copa y sin pensarlo dos veces tragó todo el líquido en un movimiento brusco y desesperado.

"vaya, veo que tienes demasiada sed" Harry aún tenía su copa llena de aquel líquido transparente. Su ceño levemente fruncido con seriedad y calma.

"debemos hablar sobre algunas cosas, confianza, cosas rutinarias"

"Pero yo no quiero reglas...eso me da miedo ¿por qué no puede ser algo normal?" fruncia su ceño y dejaba sobresalir un poco su labio inferior cómo un niño pequeño. "Salir, velas blancas, flores...No lo sé, ¿cine? ¿Tardes juntos? Quizás un poco de..."

"No es lo mío"

Louis se vio interrumpido por esas simples palabras ¿no era lo suyo? Pero....

"no sé qué hago aquí. Quieres azotarme, pegarme y me pides ¿que disfrute eso? Yo...ni siquiera se cómo se siente coger o...."

"¿Qué?" su voz sonaba molesta y intranquila, el ceño fruncido más de lo normal "repite eso"

"iba a decírtelo...quizás cuánd.."

"se supone que uno dice esos detalles desde el principio, Louis Tomlinson yo te conté sobre mis gustos, los sabes. ¿Cuándo ibas a decirlo? ¿Cuándo esté totalmente enterrado en tu culo?"

Louis boqueo atónito ante aquellas palabras ¿había escuchado bien?

"No me hables así, Harry Styles" pudo observar cómo Harry pensaba, totalmente concentrado en sus pensamientos.

"Bien...No es un problema que no tenga solución"

Estás.de.coña

"podemos solucionar tu bendito problema" proseguía.

"¿Mi virginidad ahora es un problema?"

"oh vamos Louis, no me vengas con qué pensabas llegar virgen al matrimonio" ¿se estaba mofando? Louis simplemente se ruborizo y se cruzó de brazos totalmente enfadado.

Cretino.

"Te gusto, me gustas, no veo el problema en ayudarte con esto. Sí tú aceptas yo puedo hacerlo."

Pero aún estaba molesto, aún con enojo no podía dejar de mirar a su jefe, caliente y perfecto frente a sus ojos. No podía evitar que le brillaran los ojos ante la presencia del mayor.

"Bien...supongo"

Simples palabras...

¡OH SI SEÑOR! CANCELADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora