The Blood Calls

Consternación

LIAM.

Me siento un completo traicionero a mi familia. Pero si sus vidas, dependen de esto, bueno, no lo pondré en juego.

Incluso puedo sentirme incomodo, ante el pensamiento, de que, talvez mi padre estará mucho mejor sin mí. Talvez hago mal en pensar así. Pero es que, lo conozco tan poco.

Aunque no puedo dejar de pensar en Alex. Mi hermana gemela. Mi mejor amiga también.

Siempre eh estado ahí con ella, cuando me necesita, pero, ahora, sé que no podre. Solo espero que ella sea lo suficientemente fuerte para soportar esto.

Di un profundo suspiro, desearía tener el poder de volver el tiempo atrás, y hacer ver a mi padre, todo lo que siento, quizás las cosas cambiarían. Pero sé que eso es imposible, tengo que ver la realidad. Esta es la realidad. Mi realidad.

Volamos, hasta el parque en el centro de Amity Park. No entiendo que hacemos aquí. Pero estaré atento ante cualquier clase de trampa.

Vlad me observo con diversión.

-Es increíble, lo mucho que te parecesva tu padre, jovencito. Aunque eso no sea de tu total agrado- Menciono en medio de su gracia.

-No me molesta que digan que me parezco a él. En lo físico eso es más que obvio. Pero, en lo emocional no estoy muy de acuerdo- respondí sinceramente.

-Yo no estaría tan seguro de eso- cruzo los brazos y aún tenía esa estúpida sonrisa que ya odiaba. –Eres igual de heroico que él. ¿Sacrificarte por tu familia?, Ha ha, eso es algo que solo Phantom suele hacer- Comenzó a reír.

Mis puños se cerraron con fuerza, realmente este tipo estaba acabando con mi paciencia.

-Si bueno, no se puede cambiar lo que hay en tu sangre- Conteste con orgullo.

-Eso pensé…- Vlad respondió con una sonrisa torcida, luego chasqueo los dedos.

Enseguida, alguien me tomo con por los brazos. Dan estaba detrás de mí, con su sonrisa malvada. Trate de liberarme, pero fue demasiado tarde cuando Dan inserto una jeringa en uno de mis brazos, contenía un líquido amarillo. Sentí bastante dolor cuando aquel líquido comenzó a entrar en mi cuerpo.

Cerré mis ojos con fuerza, demonios, esto dolía bastante, estaba comenzando a darme un fuerte dolor de cabeza, trate de pensar en otra cosa, pero todos mis recuerdos estaban borrándose, mis padres, mi hermana, mis amigos. Todo.

Comencé a olvidar sus nombres, hasta que no podía recordar absolutamente nada.

Mi dolor de cabeza se intensifico, cuando Sentí que Vlad puso algo en mi cabeza, no sabía que era, el dolor no me dejaba abrir mis ojos. Sentí aquella jeringa salir de mí brazo. Luego escuche algunos tecleos, era una especie de aparato.

Mi mente estaba en blanco, bueno, no del todo, sentí punzadas más fuertes en la cabeza cuando empecé a ver algunas imágenes en mi mente.

¿Eran recuerdos? Recuerdos míos y… de ¿mi Padre, Vlad Master?

Mis músculos comenzaron a relajarse, ante la sensación de recuperar mis recuerdos, el dolor de cabeza se hacía menor, si ahora lo recordaba todo.

Mi nombre es Dylan Master, Mi padre es Vlad Master, soy hijo único, tengo poderes fantasmales como mi Padre.

Miles de recuerdos, se insertaban en mi mente.

Comencé a sentirme demasiado relajado. El brazo que me sujetaba por los brazos, estaba liberándome, comencé a sentirme aún más tranquilo, mis ojos se abrieron, vi a mi padre parado frente a mí, parecía feliz.