Redención

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ALEX.

No podía, o tal vez no quería, creer lo que estoy mirando frente a mí.

Liam, mi hermano gemelo, pero él, pareciese otro; su mirada, refleja odio.

Me lleno de temor al sentir su mirada penetrante sobre mí.

Me pregunto, ¿Qué fue lo que este par de lunáticos, le hicieron?

-Valla, valla, valla, como haz cambiado, los últimos años Daniel- Vlad fue el primero en hablar.

-yo debería decir lo mismo Vlad…, ahora estas más viejo y más loco- mi padre respondió con cierta diversión.

Vlad dio una sonrisa torcida.

-Tan gracioso como te recordaba. Por cierto Daniel, déjame presentarte a mi hijo…, Dylan Master- Vlad tomo por el hombro a Liam, y el, no se movió en negación. Maldición, es como si no nos conociera.

-¿Tu hijo? Ha ha, esa es una broma ¿no?, ¿Qué le hiciste a mi hijo?- Mi padre respondió, y comenzó a sonar bastante molesto.

-¿Sorprendido, Daniel?, bien…, aquí tienes mi venganza….-Vlad se abalanzo sobre mi padre, y ambos comenzaron a pelear.

El resto del equipo, se centró en atrapar a Dan. Aunque fue una tarea algo difícil.

Uno de los detalles negativo-positivos, de las alarmas que suenan en Amity Park, es, que también lo hacen en la zona fantasma. Por tanto, no solo alertan a los humanos, sino también a los fantasmas, lo que hace, que tanto como villanos y aliados, salgan de la zona fantasma, para aprovecharse de la situación.

Comencé a ver muchos más fantasmas, en la ciudad. Lo que dificultaba el trabajo al equipo Phantom.

Incluso, mis primas y amigos, ya habían comenzado a pelear.

Pero mi atención estaba concentrada al chico frente a mí.

Un traje blanco, sin ninguna insignia, su cabello, ahora lucia rebelde, y sus ojos rojos, esos ojos, que siento haber visto en todas mis visiones.

-¿Liam?, pero… ¿pero qué te han hecho?- Mi voz era débil, sentía un nudo en la garganta que hacía que me costara trabajo hablar.

-¿Liam? No sé de quién diablos hablas niñita, pero algo que si se, es que no voy a tener piedad de ti, Phantom- Dio una sonrisa malvada, mis ojos se abrieron con gran sorpresa, este no puede ser Liam, de ninguna manera…

Di algunos pasos atrás, cuando sus manos irradiaron luz ectoplasmica roja.

¿De verdad quiere destruirme? Esto no puede ser cierto, debe ser una pesadilla.

Lagrimas corrían por mis mejillas; si esto era un sueño, deseo despertar cuanto antes.

-Ha ha ha, que niña tan sensible y débil- Liam, o Dylan, estaba burlándose de mí.

Ya ni siquiera sé cómo llamarlo, él no es Liam de ninguna manera. Vlad cambio su nombre, pero también lo lleno de odio.

No puedo creer, que Liam este decidido a atacar a su propia familia. El no pudo olvidar todos los recuerdos, todos sus sentimientos.

El chico frente a mí, es un completo desconocido.

Un rayo ectoplasmico ahora me golpeo en el estómago, lo que me saco de mis pensamientos.

The Blood CallsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora