Capitulo 20

396 14 0
                                    


-Escucho una voz familiar, me limpió las lágrimas como puedo con las mangas de la sudadera, estoy tan aturdida que me cuesta trabajo levantar la cara, la levanto despacio y miro al alto hombre que tengo frente a mi con cara de preocupación.-

-¡¡Martín!! - Es lo único que puedo decir antes de correr a sus brazos, me desplomo y me aferro a él, como una niña a su padre después de caerse o incluso como si de eso dependiera mi vida. Al estar en los brazos de Martín no puedo contenerme más y me hecho a llorar a mares sobre su hombro-

-Tranquila hermosa, ¿Qué tienes, qué te puso así? - pregunta mientras le acaricia el cabello tratando de consolarla- Ven siéntate aquí en la parte de atrás, para no perder la costumbre. -Itatí está tan mal que parece, aferrada a mi, que opto por la opción se cargarla y colocarla en la camioneta yo mismo. Me siento preocupado de verla así, con ganas de robármela y curarle sus heridas, tengo a Itatí sobre mi pecho, llorando desconsolada, no me dice nada, y aún no sé el porqué.-

-Estoy aferrada a Martín, me siento tan protegida en sus brazos, como muy pocas veces me había sentido-

- Ya cariño, no llores, mejor cuéntame que pasa. -dice tierno tratando de consolarla-
-Mi vida es un desastre no tiene pies ni cabeza. -solloza-
-Tranquila preciosa. -limpiando sus lágrimas y besando su frente-
-Gracias, gracias por todo estar, siempre cuando te necesito.
-Para ti, toda la vida, aunque debo de admitir que está fue una maravillosa concidencia, ¿Ya te sientes mejor?
-Si me siento mucho mejor. - limpiando sus lágrimas- ¿Pero qué haces aquí? -aún sigo aferrada al pecho Martín no quiero separarme de él-
-Esa misma pregunta te hice yo, y como yo pregunté primero, cuéntame, ¿Que te puso así? Sólo te había visto así una vez e. mi vida y fue el día que nos separamos, y hoy no es ese día claramente -Ella sigue aferrada a mi sobre mi pecho, lejos de ser incómodo es la mejor sensación, podría estar así toda la vida-
-Ay Martín, creo que ese día, en el que te fuiste, fue el peor de mi vida.
-... -Él guarda silencio para después negar con la cabeza y suspirar- Y para mi, ni se diga. ¿Que te parece si te invito a cenar? Así podemos platicar de todo.
-Me parece muy bien, contigo, todo.

Créditos de la fotografía a la cuenta de Instagram:@hqednss

DESTINADOS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora