¿Quién no puede amar a estos idiotas del voleibol?
❌ Haikyuu!! no me pertenece. Es una obra maestra de nuestro amado Furudate Hairuchi.
✔ Portada hecha por mí, pero el dibujo no es de mi propiedad. Créditos a su respectivo artista.
[A medida que pas...
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b r o k e n h e a r t
—Lo siento, _____-san —responde el pelioliva con la mirada en la chica de baja estatura—. No me creo capaz de corresponderte.
¿Tanto había practicado aquellas palabras para que luego su corazón comenzara a romperse en pedazos? ¿Todo ese tiempo en que prácticó para dejar de lado esa timidez que la caracterizaba había sido en vano?
Tragó saliva mientras sentía las lágrimas acumularse en sus ojos (c/o) al escuchar la gruesa voz del chico pronunciar aquellas dolorosas palabras. Se sintió tonta.
«¿Cómo podría él, Ushijima Wakatoshi, fijarse en alguien como yo?»
Esa pregunta rondó por su cabeza por mucho tiempo, pero eso no le permitió darse por vencida. Sin embargo, no hubiera pensado lo mismo si supiese de el resultado que le tocó pasar.
—Oh, e-entiendo —susurró bajando su mirada y colocándose un mechón de su cabello (c/c) detrás de su oreja, así evitando observar los ojos del chico que robó su atención en secundaria—. S-Sólo he sido una molestia, lo siento —hizo una pequeña reverencia, mordiendo su labio inferior para evitar llorar en frente de él.
—Perdón por haberte lastimado —dice él al darse cuenta de lo mal que debe de haberse sentido—. No me molestaría seguir siendo amigos —comenta con su usual falta de tacto, el cual sólo intensifica el doloroso sentimiento que arde en el pecho de _____.
—S-Sí, no hay problema —responde ella con un mueca en vez de una sonrisa al erguir su cuerpo nuevamente, pero con la vista en el suelo—. Hasta mañana.
Sin esperar otra palabra, se dio la vuelta y cruzó la entrada de la prestigiosa academia mirando al frente, pero las lágrimas no tardaron en correr por sus rosadas mejillas y apaciguó el volumen de sus sollozos con sus manos.
Sabía que el chico no sabía medir sus palabras, pero no pensó que destrozaran tanto su frágil corazón, el cual no se recuperaría tan rápido.
O, al menos, eso es lo que creía.
La semana pasó demasiado rápido para algunos, pero increíblemente lenta para otros.
La situación se tornaba más incómoda a medida que pasan los días. Ambos hablaban muy poco, a penas se saludaban antes de tomar caminos distintos a pesar de haber acordado seguir con su amistad. El voleibol seguía siendo la prioridad de Ushijima, viéndose tan intimidante como siempre, aunque si era cierto que algo en su pecho le incomodaba.
La imagen de _____ llegaba a su cabeza en su tiempo libre fuera de los entrenamientos, pensando en la incómoda situación en la que ambos estaban envueltos. Apreciaba su amistad, su compañía y hasta le parecía linda, pero su pasión por el voleibol le hacía creer que no podía ser algo más que su amiga. No la llamaría una distracción o un estorbo, porque no era así, sólo que no se sentía interesado en comprometerse en algo como el "amor".
