Dreams | Lizkook

Capítulo O19

Amor y dolor | 사랑과 고통

-Mmh.

Lalisa rascó su nariz de manera perezosa sintiendo ligeras cosquillas en ella. Luego de eso volvió a sumirse en su profundo sueño.

Pero volvió a sentirlo. Y está vez se pegó un manotazo en la nariz.

Y le dolió.

-Auch.

Oyó una risa ronca a su lado.

-Siempre torpe ¿eh?

Lisa fruncio los ojos y luego los abrió. Primero uno y después el otro. Acto seguido pudo visualizar frente a ella a un Jungkook con el cabello despeinado y los ojos risueños. A Lisa le dio mucha ternura despertar viéndolo de ese modo.

Y fue en ese momento en que sus ojos se posaron en su mano,que vio como sostenía un mechón de su cabello rubio. Y no había que ser un genio para darse cuenta que el estaba provocando las cosquillas en su nariz.

-No me digas que me viste dormir.-bromeó Lisa

-Sí.-respondió entre risas-eres una bella durmiente.

Mentira. Ambos sabían que parecia un ogro salido de la cueva. Y Jungkook la amaba igual a pesar de eso.

-Eres un...molesto.-dijo al fin sabiendo que su forma de dormir no era la más encantadora,y aunque quiso fingir enojo la sonrisa boba en su cara no podía desaparecer

-¿Y mi beso de buenos días?

-Hoy no te lo has ganado.-bromeó-sigue intentando, campeón.

Dicho eso hizo amago de levantarse de aquella pequeña cama. Sin embargo Jungkook la sujeto de la mano y volvió a arrojarla.

-No me iré sin mi beso.

Lisa rodó los ojos estando debajo de el.

-Jungkook no. Mi boca apesta y necesito un vaso de agua.

El pelinegro fingió pensar mientras se acercaba a su rostro poco a poco.

-El maldito vaso de agua puede esperar ¿sabes?

Y dicho esto con una sonrisa, se acercó a Lisa y volvió a besarla.

Lisa gimio de la sorpresa al sentir sus labios sobre los de ella. Pero no dudo ni un segundo en corresponderle mientras por instinto propio rodeaba el cuello de Jungkook con sus brazos. De modo que el tuvo más espacio para recostarse arriba de ella mientras la besaba y hacía pequeños circulos con sus dedos en la piel de su cintura. El calor dentro de ellos fue aumentado poco a poco sin ser conscientes.

Lisa no quería pensar en que estaba besando a su mejor amigo,porque caer en cuenta de ello realmente la había dejado shockeada. Y de hecho, no pudo dormir demasiado esa noche debido a las voces de su cabeza que le repetían una y otra vez que lo que estaba haciendo era incorrecto,que saldría con el corazón hecho pedazos.

Pero ignoró eso. Sólo por unos momentos quería olvidarse de las etiquetas y de sus pensamientos...y hacer lo que su corazón dictaba.

Y en ese mismo momento,su corazón pedía a gritos más besos como los que le estaba dando Jungkook sobre su boca,que no le permitían ni suspirar debido a lo encantada que estaba.

Y ambos estaban tan sumidos en ellos mismos que no se dieron cuenta para nada cuando la puerta se abrió. Ni cuando se pudo visualizar a la perfección al dueño de la casa.

-¡Won! ¡Te dije que estaban fornicando en la habitación de huéspedes!-gritó de repente. Los señaló con su dedo y el entrecejo fruncido.

Lisa y Jungkook se separaron al instante casi de manera bruta al caer en cuenta de que esa no era su casa.