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No puedo creerlo, la nana tiene que saberlo.

-Nana... -Grite hasta que pensé en la hora que era.

Me tape la boca con las manos y me quedé cayada a ver si me había escuchado.
Pero no lo hizo, no me escucho. Creo que fue lo mejor, era muy de noche y ella necesita descansar, mejor se lo cuanto en la mañana.
No podía dormir, me la pasaba pensando y pensando en el café, la rosa que se marchito y lo que acababa de leer ¿Puede ser real?
¿Como es que cada vez tengo más preguntas y menos respuestas?

Trate y trate de dormir pero no podía.
04:35 marcaba el reloj y yo seguía sin dormir.
04:55 estoy cansada y me obligue a dormir.

Me desperté a las 10:40, nunca me habían dejado dormir hasta tan tarde, esto es un récord.
Me levante y fui al baño, me bañe y cepille los dientes, me vestí super normal y fui a la cocina; la nana estaba ahí.

-Nana que suerte que te encuentro, necesito contarte algo. -Dije emocionada por por fin poder conversar con ella.

-¿Acaso no leíste las primeras páginas del libro? -Respondió la nana con una ceja alsada.

-Emmm... si lo hice ¿Pero porque no hablarlo contigo, tu que ya sabes? -Le respondí siendo descarada.

Sabía que no podía hablar de nada de lo que me pasaba, o leía con nadie; pero nunca me aguanto a romper reglas.

-Lo siento Sarah, no puedes contarme.

Mis ojos desilusionados se posaron el café que la nana me pasaba al par de lo que me dijo, como un premio consuelo. Lo agarre en son de paz.

-Gracias nana, te quiero.

Termine de tomar mi café y salí al patio a respirar aire fresco, necesitaba pensar.


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Ho-holaaaa perdón que los abandone muchos días, no me dejaban publicar y por arte de magia ahora si puedo. Espero les guste el nuevo capítulo💕

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⏰ Última actualización: Feb 13, 2018 ⏰

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La última rosa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora