Otra vez fui engañado, ese desvergonzado de Yifan debería darme dinero cada vez que mi mama usara su nombre para citarme en estos restaurantes y sobre todo citarme con la mujer que tengo al frente. La hermana de KyungSoo.
No podía negar que su parecido con Kyungsoo era exacto, pero Kyungsoo es por mucho más bonito.
-¿Estaba buena la pasta?- Me encoge de hombros mientras dejaba los cubiertos de forma ordenada en el plato mientras tomaba agua.
-Ya la había probado antes, por eso la pedí.- La mujer sintió mis (Nada oculta) molestia pero eso no le impidió seguir hablándome.
-Es la primera vez que vengo a un lugar como este.- Sonrió mirando el restaurante mientras yo solo asentí.
-Sí, que bueno.- Alegre de que el mesero se acerca sonreí rozando la libertad con mis dedos.
-¿Pedirán postre?- Antes de que pudiera declinar la oferta la mujer salto en su asiento sonriendo.
-Vi uno de esos helados enormes, puede...
-¿Vas a comértelo sola?
-Pensé que podíamos compartir uno...
-No.- Corte y mire al mesero.- Tráigame uno de esos helado y la cuenta, por favor.- El mesero un tanto confundido, camino a la cocina por nuestra orden.
-Veo que Kyungsoo no te ha hablado bien de mi.- De inmediato deje mi teléfono (Que era con lo que había estado ignorándola todo el almuerzo) y de inmediato la mire.
-Tu hermano sería incapaz de hablar mal de cualquier persona. Salvo que sea mala.- La mujer rio amarga.- No te enojes, mi madre es una auténtica hija de puta, así que no te tengo en mi estándar de enemiga.
-¿En serio?
-Si solo de persona que no tolero.- De inmediato llego el helado que la mujer miro aun en shock por lo que había dicho.- Provecho.
-El auténtico hijo de puta es KyungSoo, él siempre ha sido el perfecto.- Sobre decir que yo estaba a punto de olvidarme que era mujer.
-Te ruego que si tienes algo malo que decir de KyungSoo, omítelo te hace ver más desesperada.- Toda esta discusión justo enfrente del mesero.
-No tu no entiendes, mis padres me ignoraban, cada vez que KyungSoo hacia algo superaba diez veces lo que yo hacía, si yo practicaba ballet, el cantaba como los ángeles. Era un bastardo, y siempre haciéndose el inocente.-Estoy enojado.
-Te diría que pase por una cosa igual, pero eso es diferente, mi hermano siempre fue mejor que yo, pero a diferencia de ti, yo lo apoyaba y él nunca me dejo solo.- De inmediato tome mi teléfono.- Si terminaste tu discurso, come ya. Quiero irme.
La mujer enojada salió de aquel restaurante dejando solo el antiguo olor a perfume y a Jongin su agradable soledad.
-Señor.- El joven mesero estaba nervioso mirando al hombre que había relajado sus hombros.
-Te dejare una buena propina si me dejas insultarte.- De inmediato el mesero rio sentándose enfrente.
-O.- Dijo el rubio.- Me cuentas tus problemas mientras yo como este helado.
-¿Tu trabajo?
-Ya salí, tienes suerte.- Reí mientras asentía aun enojado.-La mujer de antes.
-Ella solo desea aplastar a mi...- Mire al joven, ya no tenía nada que perder ocultándolo (Menos después de ese anuncio a la prensa)- novio. Es su hermana, y mi madre quiere casarme con ella.
-¿Es esto un drama? Porque puedo hacer una cara de preocupación autentica.- Reí negándome.- Hombre me sorprende que en este siglo siga pasando eso.
-Pues, creo que es la maldijo por ser o nacer con dinero. Todos esperan que seas recto y perfecto.
-¿Te puedo dar un consejo?
-Claro.
-¿Pero cómo Gay que soy o como amigo "conocido"?- Sorprendido me encogi de hombros-Vas a ir con tu madre, justo de la mano con tu prometido, inclusive con tu perro si tienes.- Asentí sonriendo.- y le vas a decir: "Esta persona me gusta" si ella allí mismo comprende eso, puede que te ignore y te deje pasar.
-¿O?
-Que siga insistiendo y sea aún más mala, en todo caso ya sabe a lo que se enfrenta.
-¿Cómo así?
-Se enfrenta a su hijo enamorado, una madre no puede ser tan mala como para hacer infeliz a su hijo.
-Te sorprendería...- Sonreí y asentí.- ¿Lo dices por experiencia?
-Oye hombre, no tenía novio así que fui yo solito a decírselo.
-¿Cómo resulto?
-Me lanzo las fotos de cuando era un bebe diciendo que no me había criado así.- Se encogió de hombros.- Y hasta el día de hoy no he vuelto a saber de ella.
-Es una pena...- El mesero asintió y yo me levante.- Debo retirarme pero aquí está mi tarjeta.-Sonreí.- Estoy muy agradecido por tu consejo y sinceridad, si necesitas algún favor no dudes en llamar, ayudare como pueda.- El hombre asintió.
-¿Kim Kai?- Asentí.- Soy Taemin.
-Un gusto.- Y un poco más relajado camine tranquilamente fuera del restaurante.
-Vaya, creo que me veré en la obligación de ayudar... que buena persona soy.- Y sonriendo marco el número de su prometido.- Amor ¿Conoces la empresa Kim no? Necesito tu ayuda.- Taemin ayudaría a ese pobre hombre que se veía demacrado.
-Soosie, regrese- Insung corrió rápidamente escaleras abajo riendo al escuchar la voz de su padre y de inmediato fue levantado (Con dificultad ya que estaba creciendo) y riendo.
-Papi está durmiendo a la bebe.- Reí y asentí cargándolo como pude hasta el sofá y echándome en el.
-Hola amor.- KyungSoo bajo con sus brazos libres y dándole un beso en la mejilla y abrazando a su chico por la espalda.- ¿Cómo te fue con Yifan?
-¿Hablas de ese traidor? De nuevo mi madre utilizo su teléfono para citarnos en ese lugar.
-Vaya.- Sentó al lado de mi mientras yo acariciaba el cabello de Insung.
-Fue tu hermana.
-¿Qué?- KyungSoo miro a Jongin interrogándolo.
-¿Qué puedo decirte? Salió corriendo después de que le dije que tú eras el mejor hermano del mundo, y ella era lo peor.- El acerco su cabeza a el hombro de KyungSoo cansado ya de tener que estas siempre alerta a todo.
-Tranquilo, siento que las cosas nos irán mejor cielo... y hablando de mejor ¿Iremos a adoptar a el niño esta semana?
-Podría ser...- Y KyungSoo no pudo evitar darle un beso a su amado esposo.
-¡Iuu!- Insung se quejó.