¿Y ahora que es lo que debo de hacer? Obedecer y esperar a la hora de salida en la puerta principal o huir como aquella vez y esperar el momento para ser golpeada por un palo.
Sonó la campana que daba término a la última clase, tome mis libros y me dirigí a la puerta principal, a esperar y de una vez por todas saber que era lo que querían de mi.
Me recargue en el tronco de un gran árbol que estaba cerca del lugar donde me dijeron que esperara.
-Ahora no huiste? Eres más lista de lo que pensé- escuche una voz detrás mío. Voltee y vi a un chico gordo de aspecto rudo el cual lo había visto en otro lugar antes dentro del colegio.
- Q-quien eres?- dije asustada
-¿Quien soy?- se acercaba cada vez más a mi -Soy la persona con la que perdiste la virginidad- me susurró en el oído.
Lo empuje, lo empuje lo más fuerte que pude, horrorizada.
-Que m-me hiciste ese día?- dije con las piernas temblando
- No querrás saber- me dijo dedicándome una sonrisa malvada
-Estúpido, ¡No te me vuelvas a acercar!- le grite para luego darme la vuelta y salir corriendo, pero fue más rápido que yo y me tomó de los brazos para estamparme contra la pared dejándome sin salida.
-¡SUELTAME IMBÉCIL!- me tapó la boca para después golpearme en el estómago. Caí al suelo retorciendome de dolor.
-Te vistes como un chico pero sigues siendo la misma vieja miedosa al igual que todas- me dijo mientras me tomaba de mi corto cabello y me arrojaba a la pared. Quede inconsciente.
~~~NARRADOR OMNISCIENTE~~~
El tipo gordo se llevó a Ilbem a un callejón oscuro en donde nadie pudiera verla y no se dieran cuenta de que fue golpeada.
Eso era lo que tenía que soportar Ilbem a diario, haciendo así su vida miserable, sólo por vestirse como más cómoda se sentía y por romper los estereotipos que tiene la sociedad de las mujeres y los hombres ¿porque no sólo la aceptaban tal y cual era?
Jung Woo, un hombre de 26 años, bien parecido, con rasgos asiáticos, iba caminando por la calle dirigiéndose hacia su casa, cuando de pronto ve a un chico tirado en un callejón. Se acerco a él y se percató de que no era un chico, sino una chica.
La tomó en sus brazos inmediatamente, mirándola con lástima, decidió llevarla a su casa y esperar hasta que ésta estuviera consciente.
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Masculinamente hermosa
RomansaLa sociedad nos dice desde que nacemos como debemos de vestir, como debemos de comportarnos de acuerdo a nuestro género, nos dice que las mujeres deben de usar el cabello largo y ponerse maquillaje, los hombres deben de ser rudos mientras se sientan...
